Capítulo 16

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Pov Olivia

Acababa de llegar al hotel, miré el reloj y eran casi las ocho de la tarde, en total tendría menos de una hora para arreglarme ya que a las nueve Lando me esperaba en el vestíbulo. 
Abrí mi pequeña maleta y obviamente no tenía nada más allá de un par de camisetas, una sudadera y varios pantalones. 
Cogí el teléfono y busqué el contacto de Isa, era la única persona que conocía que seguro tuviera algo de ropa más arreglada y que obviamente estuviera aquí en Mónaco. 

Llamada. 

- ¿Olivia? ¿estas bien? - fue lo primero que salió por la boca de la madrileña al descolgar el teléfono. 

- Necesito tu ayuda, ¿tendrías algo arreglado para la fiesta de esta noche?

- Empieza a ducharte, en un rato estoy ahí - dijo y colgó al instante, sabía que si tendría algo. 

Fin de la llamada. 

No tardé ni diez minutos en ducharme y lavarme el pelo, en estos momentos estaba en albornoz y con una toalla que cubría todo mi pelo; cuando varios golpes sonaron en mi puerta, por lo que debería de ser Isa.

- Sabía que al final acabarías aceptando ir a la fiesta, y también sabía que no ibas a tener nada para ponerte - dijo nada más abrir la puerta. 
- Pero chica, ¿qué tenías una tienda en la maleta? - traía al menos cuatro vestidos y tres conjuntos entre sus manos.
- Más o menos, ahora secate el pelo y pongámonos manos a la obra - está estaba maquillada pero con el pijama, por lo que supondría que tambíen vendría a la fiesta. 

(...) 

Las nueve menos cinco, ambas nos habíamos arreglado en tiempo récord, aunque no sabíamos ni como lo habíamos conseguido. 
Por lo que Isa me había contado, estas fiestas tenían mucho prestigio y el dress code sería muy formal, por lo que había que estar a la altura si no queríamos que mañana estuviéramos puestas en cada revista de Mónaco como las peores vestidas. 

Isa estaba espectacular, llevaba un vestido negro que realzaba su figura de lo más elegante, con unos tacones de plataforma. A simple vista no era para nada "formal" pero una vez puesto no tenía nada que envidiarle a nadie. 

Por mi parte, ni yo misma me reconocía

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Por mi parte, ni yo misma me reconocía. No sabía cuantos llevaba sin ponerme un vestido así, siempre que me arreglaba algo más de lo habitual solía ponerme un traje con pantalones pero podría hacer perfectamente diez años desde que dejé de usar faldas y vestidos. Al principio, elegí un traje que Isa trajo, era muy bonito pero está hizo que me probará un vestido que ni en mis mejores sueños hubiera pensado en probarmelo. Una vez me lo puse, no podía parar de mirarme al espejo, Isa me había puesto preciosa, sí yo misma echándome halagos, me veía espectacular y el vestido era simplemente increíble, hacia años que no me veía así.

- A ver sonríe - dijo Isa mientras tomaba una foto con su móvil.
- No puedo salir peor, por favor borra eso - dije mientras me reía.
- Eres tú en con tu esencia, ni por un millón de euros la borraría - dijo alejándose de mi para que no le cogiera el móvil - ahora vámonos.

- Eres tú en con tu esencia, ni por un millón de euros la borraría - dijo alejándose de mi para que no le cogiera el móvil - ahora vámonos

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( Sé que es una foto de Luisinha, pero imaginaros que es Olivia)

Encendí la pantalla de mi móvil y ví que eran las nueve, hora de bajar a recepción seguro que los chicos estarían ya esperándonos.

Pov Charles

Eran las nueves y veinte cuando miré el reloj, hacía prácticamente diez minutos que habíamos llegado al restaurante, y sí digo habíamos pues Charlotte venía conmigo. No habíamos hablado nada de nuestra situación desde que volví de Barcelona, o creo que ninguno de los dos había querido, pero se había presentado en mi habitación antes de que saliera del hotel, y pues está aquí conmigo. El camino en coche fue monótono, ninguno de los dos dijo ni una palabra, simplemente escuchábamos la música por la radio, pero antes de entrar el restaurante, esta me cogió la mano para aparentar que estábamos bien básicamente, pero en el momento que los papparazzis dejaron de tomar fotos me la soltó seguida de una mala mirada. 

- ¿Viene tu nueva fotógrafa? - me preguntó esta, algo que me extrañó pues yo no las había presentado. 
- Creo que no, tenía cosas que hacer - dije y una parte de mi se entristeció, pues en estos últimos días habíamos pasado mucho tiempo juntos, y una parte de mi deseaba pasar más tiempo con ella. No sé que me estaba pasando, pero esta mujer me estaba rompiendo todos mis esquemas. 
- Pues al final, no tendría tantas cosas que hacer - dijo esta haciéndome una señal para que mirase hacia la puerta; encontrándome en ella a Carlos con Isa seguidos de Lando y Olivia. 
- Mamma mia - quería decirlo más bajo y por la cara de Charlotte no lo había hecho, pero no pude contener la emoción que tuve al verla entrar, estaba preciosa. 
- Ven, vamos a que nos tome fotos - dijo Charlotte volviéndome a coger de la mano y prácticamente arrastrarme hasta allí - Hola chicos - dijo esta al llegar hasta ellos, Isa y Carlos la saludaron educadamente pero Lando antes de que se acercara a él se retiró con la excusa de que iba a por algo de beber - anda Olivia, que sorpresa verte, ¿eres la nueva pareja de Lando? o ¿qué haces aquí? - ¿a qué venía eso? no estaba entendiendo nada, Charlotte no había sido así nunca con otras chicas, pero de seguro que Olivia no se merecía esas palabras. 
- Lando me invitó - dijo a la misma vez que llegaba el inglés. 
- No hace falta que sea mi pareja para que esté aquí, hay otras personas que no deberían de estar y están - dijo ahora Carlos mientras agarraba el vaso que Lando le acababa de mirar - ¿vamos con los demás? - dijo a lo que los demás asintieron y pusimos rumbo a juntarnos con los demás pilotos. 

Inefable - Charles LeclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora