Inefable - Charles Leclerc

Capítulo 13

Pov Olivia

Llevaba dos días encerrada en mi apartamento desde que volvimos de Barcelona, no había salido para nada, no tenía ganas. Blanca se había pasado dos veces por el piso para saber como estaba pero eso fue lo más emocionante de estos días. Después de mi conversación con Charles, me sentí un poco mal, bueno mucho, y según yo, no me voy a tener que enfrentar a darle una respuesta a Charles, quizás si aguanto más aquí no voy a necesitar decirle nada porque ya habrá encontrado a alguien. 

Me encuentro tirada en el sofá, con una manta hasta el cuello, sí aunque sea mayo, buscando que película disney puedo ver por décima vez. Por fin encuentro una, pero mi móvil empieza a sonar por lo que me impide empezar a verla; cojo el teléfono y en la pantalla aparece una videollamada de Lando, sí, el domingo tuvimos una larga conversación y quiso darme su número, y pues me llama desde entonces. 

Videollamada

- No me puedo creer que sigas en la misma posición en la que te colgué ayer por la noche - dice el inglés nada más verme. 
- No me pienso mover de aquí hasta que empiece a trabajar la semana que viene, pienso estar todas las vacaciones viendo películas - dije mientras le mostraba la televisión. 
- Ven a Mónaco, no tienes porque verle - Lando estaba al tanto de todo lo que pasó con Charles, al igual que Carlos y Blanca. 
- ¿Y no salgo de tu box en todo el fin de semana no? - dije irónica. 
- Bueno, puede ser una mala idea - dijo este mientras ponía los ojos en blanco - Olivia, no ha pasado nada entre ustedes dos, solo un momento tenso y ya. 
- Pero no quiero volver a repetirlo, no me hace bien porque la que sufre soy yo, si ese beso hubiese ocurrido estaría ahora mismo haciendome ilusiones con algo que no iba a pasar, y quiero evitarme todo ese proceso, me niego - siempre había sido una tonta que me ilusionaba con cualquier gesto de un chico hacia mi, y ahora quería andar con pies de plomo para no volver a pasar por lo mismo. 
- No tiene que volver a pasar Liv - sí, Lando me había apodado así - si quieres puedo llevarte y recogerte en Mónaco para que no tengas que estar con él en su coche, y te soltaré en la habitación y hasta que no te duermas no me iré ¿te parece?
- Bueno no hace falta que te quedes hasta que me duerma - dije pero antes de que pudiese terminar la frase este me interrumpión. 
- Te lo estas pensado, eso me gusta - dijo este celebrándolo - Liv tienes que venir, si no tuviera fotógrafa te contrataría pero no es el caso, aprovecha esta oportunidad y deja de poner cafés para cumplir tu sueño - mi sueño nunca había sido tomar fotos en grandes premios de Fórmula 1, pero si poder vivir de la fotografía viajando por el mundo y con este trabajo podría hacerlo sin ningún problema. 
- Ya veremos - dije mientras este aplaudía a través de la pantalla, cuando alguien empezó a llamar a mi puerta - Lando, te llamo luego, están llamando a la puerta y supongo que será Blanca. 
- Esta bien, después quiero una respuesta a la propuesta de Charles y que al menos te hayas cambiado de pijama - dijo riéndose - hasta luego Liv. 
- Muy gracioso Lando, hasta luego. 

Fin de la llamada. 

Miré mi reloj y ví que era una media hora antes de la hora en la que solía salir Blanca, pero que mas daba. Abrí la puerta y estaba la persona que menos esperaba allí. 

- ¿Charles? - estaba en shock. 
- Olivia - dijo este sin dejar de mirarme. 
- ¿Qué haces aquí? 
- ¿Puedo pasar? - me preguntó y asentí mientras me apartaba de la puerta para dejarle pasar - sé que es un poco locura que haya venido hasta aquí, pero necesito una respuesta - vale si no le esperaba a él, menos me esperaba que había venido hasta aquí para que le dijera si quería ser su fotógrafa o no. 
- ¿Cuánto tiempo tengo para pensármelo? - lo había pensado, sí y mucho, pero todavía no tenía nada claro. 
- Hasta esta noche, y no me iré de aquí hasta que no me des una respuestas - esto me sorprendió pero si él me iba a chulear, yo un poco más. 
- Esta bien, ¿te gusta disney? - dije y este asintió - ¿y te gusta Aladdin? 
- Más aún, ¿la ibas a ver? - asentí - perfecto, tengo todo el día - me guiñó el ojo mientras tomaba asientó en el sofá. 

(...)

La situación que estaba viviendo en estos momentos me parecía surrealista, Charles había venido desde Mónaco solo para tener una respuesta mía, y en estos momentos lo tenía haciendo palomitas mientras vemos Aladdin. 
- ¿Te apetece algo más a parte de las palomitas? - le pregunté dirigiéndome hasta la barra americana que separaba la cocina del salón.
- ¿Tienes agua? - en estos momentos me sentía la peor anfitriona del mundo, pues ni agua le había ofrecido.
- Mejor aún - me dirigí hasta un pequeño mueble que tenía al lado del frigorífico para sacar unas pequeños botes que tenía con cada uno de los condimentos para preparar cualquier café de Starbucks - ¿te apetece un mocca blanco?
- ¿Puedes preparármelo? - preguntó este asombrado.
- Sí, y te aseguro que estará mucho mejor que el de la cafetería.

El microondas acababa de terminar de hacer las palomitas y el café estaba a medio hacer. Me giré sobre mi misma para ver lo que estaba haciendo Charles, llevándome la sorpresa de que este estaba más cerca de lo que esperaba de mi, pués estaba a escasos centrímetros de mi. 

-  ¿Cómo está tu novia? - no lo pensé mucho antes de preguntarle, pues de seguro que no lo hubiera hecho. 
- ¿La conoces? - me preguntó este mientras se apoyaba en el otro lado de la barra quedando enfrente de mi. 
- No, pero te escuché hablar alguna que otra vez con ella, es solo curiosidad.
- Charlotte esta bien, creo - ese creo no sonaba muy convincente - el otro día nos peleamos y no he sabido de ella desde entonces.
- Será cuestión de tiempo que estéis bien - dije y este asentía cabizbajo - ¿estas bien?
- No, no hay nada bien Olivia - levantó la cabeza hacia mí con los ojos cristalinos.
- No tienes porque contarmelo si no quieres Charles - dije mientras me acercaba a este con el café en las manos. 
- Necesito contárselo a alguien, y quiero que seas tú - dijo este tragándose el nudo en la garganta que se le había formado hacia escasos segundos - todo empezó la semana antes de empezar la temporada, acababa de llegar a Mónaco después de casi un mes haciendo la pretemporada, llegué a mi apartamento y me encontré una imagen que si lo hubiera sabido me hubiera quedado en Maranello, Charlotte estaba con uno de mis mejores amigos en el sofá besándose - me iba quedando en shock a medida que este iba hablando - después de esto Charlotte me juró y me perjuró que había sido él quien se había abalanzado sobre ella para besarla y que no había pasado nada más entre ellos, y como un tonto me lo creí y decidí perdonarla, a partir de ese momento, la confianza desapareció y los sentimientos cambiaron totalmente y nada es lo mismo.  Me siento mal conmigo mismo, y tengo miedo de quedarme solo si corto la relación, de no encontrar a nadie más, no lo sé - decidí interrumpirle antes de que siguiera hablando. 
- A eso se la llama costumbre, tienes miedo de que no tengas a nadie cuando vuelvas a casa de un largo fin de semana, de no tener a nadie si en algún momento algo te supera, pero creeme, que todo se supera y a todo te puedes desacostumbrar, solo tienes que hacer lo que este te diga - dije dándole un pequeño golpe en su pecho.