<SANGRE FRESCA>

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2 DÍAS DESPUÉS
El duque a estado tan ausente, escuche que su hijo se enfermó y tiene toda la atención de el, no me importa que esté con su hijo al contrario, estoy feliz por que no lo veré a la cara

Pero aun así sigo sin entender el por qué él me a estado mandado regalos, solo los veo y luego los dejo, solo son pendientes, anillos, joyas, vestidos y otras cosas más

Me basta solo con 4 conjuntos y ya, no usaré un millón de ropa cara todo los días

Me siento en el sofá donde está la ventana, el aire que va directa a mi cara se siente como si estuviera en la bahía pero sin sentir esa emoción de felicidad, de seguro Lizeth ya tiene un matrimonio con el hijo del carnicero o un fino pescador de allí

—¡Duquesa!-exclaman afuera-

Veo sin indiferencia la puerta y luego me acomodo en el sofá poniendo las piernas

—Pasa-ordeno-

La criada entra con un pequeño gatito blanco con un listón en su cuello de color rojo, es muy peludo que parece una ardilla blanca por su cola

Bajo los pies del sofá y veo al gatito, estoy aturdida, nunca había visto un gato tan elegante, los que e conocido son tan delgados y casi calvos

—Es un regalo del duque y a mandado una carta-comenta sacando la carta de su delantal-

La criada me entrega el gato y luego la carta y se va dejándome pensativa
Acaricio al pequeño gato, parece ser macho o es hembra?

—!Que linda o lindo eres!-exclamo abrazando al gato-

Abro la carta del duque y veo una carta bien limpia, con un olor a manzanilla, sin ningún error de ortografía

"Me gustaría estar con usted, no dejo de pensar en el ducado y como van las cosas, espero que no esté aburrida ni menos esté desesperada, pronto volveré, le e dejado una compañera para que le haga compañía, su nombre es Duquesa

Es una gata angora turca, espero que le haga compañía y pueda sentirse cómoda"

Dejo la carta en la mesa y me acerco a la gata sosteniéndola

—¡Hola duquesa!-exclamo con una sonrisa-

Me rio y me la pongo en mi cuello mientras mi nueva amiga mira a los alrededores con sus ojos verdes

—¡Te pareces a mi!-exclamo admirando el parecido-

Acaso el duque me la trajo por que era igual que yo, solo que ella es blanca y sus ojos son tan profundos y verdes, muchas veces pienso que en verdad él duque no es la persona mala que tanto dicen pero sigo teniéndole rencor

DUQUE STARK- ELIAS
—Lord, ¿necesita esto?-pregunta con sarcasmo el lord Diker mientras la mujer bella del sur se sienta en mis piernas -

Mierda,se supone que debería estar con mi hijo pero él me rechaza tanto, él insiste en conocer a rose, pero si lo hago él le dirá todo, no quiero verme como una bestia adelante de mi nuevo esposa, ya tengo suficientes con los putos rumores

—Elias,mierda por que no me dejas conocer a tu esposa, pude ver desde la mirada del banquete como te la comías viva- comenta de broma-

—Dima, ¿ella-lo interrumpo antes que acabe con su pregunta-

—No,ella será mi esposa, ya no más muertes-aclaro argumentando y dando la mirada-

—Entonces, es ella?-pregunta levantado las cejas-

Tal vez si o tal vez no, mis dudas cada vez son más, siempre cuando veo sus ojos veo a esa niña pequeña que me admiraba, podía ver que era ella cuando tan solo era una niña, pero ahora veo a una mujer tan seductoramente

Ya no veo inocencia entre sus ojos, ni menos algo de pureza

El lord se levanta con la mujer del sur y sostiene su mano

—Bueno duque Stark, si me disculpa yo tengo que ir a disfrutar-comenta besando a la dama-

Lo veo y le doy una sonrisa, este hombre solo necesita beber algo y ya está fascinado por cualquier cosa que tenga al frente, incluso yo puedo ser el afortunado

—Que tengan una hermosa velada-le guiño el ojo-

—Lord Diker o mejor dicho Pakit—comentó sarcásticamente-

Los dos se van dejándome sola con una dama del sur, e escuchado que las prostitutas del sur hacen que vayas al paraíso, pero yo ya tengo mi paraíso en mi ducado

—Duque-susurra seductoramente quitándose su abrigo mostrándome sus pechos seductores-

Me acerco a ella y la beso sin parar, la agarro de la cintura y la coloco en mi regazo, la beso sin parar

—Duque,por que usted nota la mirada en una mujer como yo-comenta victimizándose-

—¿Disculpa?-preguntó confundido a su pregunta sin lógica-

—Mi pregunta es, por que nota la mirada en mi mejor,podré ser incluso mejor que sus esposas-argumenta-

Me le quedo viendo y luego me acerco a su cuello y lo muerdo, sangre empieza a salir de su cuello y ella empieza a gritar del pánico, la sangre cayendo directo a mi garganta hace que el sabor sean inexplicable

Hace 2 días que no e tomado sangre fresca, me gusta tanto esto

Ella grita y intenta separarse, pero mis fuerzas son superior a las de ella

—¡Por favor!-suplica gritando-

Meto mi mano en su pecho y le arranco el corazón, ella deja de gritar y se desplaza al suelo

La duquesa y el destripador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora