<LA VERDAD>

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BAHIA DEL OESTE—
Lizbeth Jones Meclek

Lloro en el suelo  mientras mi padre me voltea a verme con desprecio y mi madre solo se mantiene callada haciendo la carta para el duque para que Rose vuelva a la bahía, ahora a mi me mandarán con esa bestia, no quiero ir con el, se suponía que yo tenía que estar al lado de Richard para siempre, todo por culpa de la confesión  de Hugo! Por que tenias que morir y confesarle a todo mundo que yo era la persona con quien habías perdido tu virginidad

Ahora todos me ven con desprecio, cada una de esas caras que le hacían a Rose ahora me la hacen a mi, Richard me dejo y le fue hacer una carta a Rose pidiendo disculpas, espero que esa carta no le llegue

—¡Padre!-exclamó llorando mientras mamá le pone el seño a la carta- mi padre solo golpea mi vientre y luego me toma del cabello

—¡No me llames padre vil mentirosa!-exclama con rabia en sus ojos- no quiero irme con ese duque, dicen que es viejo y que mata a sus esposas cuando cometen algún error, él se encarga de matarlas con sus propios perros, Rose de seguro está sufriendo como nunca

«No quiero irme con ese duque!»

POSADA- ROSE  MECLEK STARK-
DUQUESA STARK

El duque se quita todo el pantalón y agarra mi mano y la lleva hacia allí, lo miro y él se acerca a mi oreja

—Tócalo-susurra- lo agarro y lo tocó, el duque baja la cabeza y intenta no gemir, lo agarro del mentón y hago que me vea a la cara

Sonrió y me acerco a sus labios mientras él gime
—¿Te gusta?-pregunto tocándolo más-
El duque gime y yo lo sigo tocando, esto me está satisfaciendo como gime y suda agitado, quiero que gima así siempre

«No se por que pienso en eso....»

El duque gime y yo lo beso húmeda mente, al dejarlo de besar yo limpio mis labios con mi dedos mientras él me mira, le doy la vuelta y me subo encima de el, lo dejo de tocar y lo miro agitado y sudando, yo me deslizo hacia él hasta llegar a sus labios, siento como respira y como me muevo por su respiración , el duque me voltea a ver y me agarra de la mandíbula, pone sus dedos en mis labios y abro la boca

Él baja su dedo hasta llegar a mis pechos, la tela del camisón es muy fina así que puedo sentir sus toques, subo suavemente hasta sentarme en él y me acomodo el cabello

Agarro sus mano y con sus dedos hago que me toque los labios, deslizo sus dedos hasta llegar a mi vientre bajo y...

—Te miras muy linda así-comenta con una sonrisa retorcida- —¿Como?-pregunto-

El duque me agarra de mis curvas hasta llegar a mis muslos y mete sus manos en mi camisón, el poco a poco va quitándome el camisón hasta dejarme desnuda

—Ahora, te ves más linda, desnuda a mi lado-argumenta-

—BAHÍA DEL OESTE—-RICHARD
Me quedo pensando en la carta, Lizbeth me engaño pero puedo ser perdonado por Rose, debí de escuchar sus palabras y hacerle caso en lo que hacía, nunca debí de meterme a la cama de Lizbeth y pensar en que Rose era una puta

Quiero verla de nuevo, besarla y que sea mi esposa, y que todo lo qué pasó sea una reflexión de que siempre creerle en sus palabras, tengo que hacer que vuelva

Ese duque de seguro la está haciendo sufrir, un viejo maldito bastardo que no tiene corazón para Rose, mi pobre Rose....Nunca en mi vida haré eso de nuevo

«Mi luna..Mi princesa»

POSADA— ROSE MECLEK STARK
ROSE

Empiezo a gemir mientras el duque lo penetra, él besa mi cuello mientras gimo, él me tapa la boca

—Shh, se buena niña y déjate- ordena- gimo mientras él sigue, él también gime pero da suspiros profundos de satisfacción

—Duque-gimo-
—Elias-responde con firmeza-
—Elias-repito  gimiendo-

39 MINUTOS DESPUÉS-
Acaricio el pecho del duque mientras él besa mi frente, nos quedamos desnudos y abrazados en la cama, no puedo creer que me acoste con él de nuevo pero ahora si me genero placer, el duque se da la vuelta y me clava los ojos azules profundos en mi, acaricia mi cabello y luego besa mi frente de nuevo

—Volveremos al ducado hoy, mi hijo quiere pasar más tiempo contigo-comenta levantándose de la cama-

«Pero se supone que tenemos que ir a la bahía del sur y luego la del oeste?»

Me siento en la cama y lo miro

—Pero tenemos que ir a la bahía ¿cierto?-preguntó confundida-

—El viaje se canceló, iremos la otra temporada, cuando el clima esté caloroso-argumenta vistiéndose- el me había dicho que iríamos a la bahía, por que ahora ya no, por que se canceló el viaje?

Tengo tantas preguntas pero tengo miedo de exponerlas, me levanto de la cama y me empiezo a vestir, el duque me abraza por detrás y toca mi vientre

—Debemos prepararnos Duquesa-comenta seductoramente tocando mi vientre-

—Si...-respondo directamente-

La duquesa y el destripador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora