<AMENZA>

1.8K 104 9
                                    

ROSE MECLEK DE STARK
DUQUESA STARK-
PATIO DEL DUCADO STARK—

Frunzo el ceño con enojo y molestia al ver como pone su mirada en mi, aguardamos silencio ambos y de repente él empieza a acercarse a mi de una manera lenta como si me quisiera asustar.

—¿Es bello verdad?—pregunta acercándose sigilosamente— el llega hasta la orilla y pone su sombrero en su pecho y inclina su cabeza para saludar como lo hace  un lord a un duque con respeto aunque, espiarme y luego saludarme así es algo hipócrita de su parte.

—Si..Es muy bello Lord—comentó intentado disimular mi molestia— el lord se vuelve a poner el sombrero, camino hacia la orilla haciendo que el lord observe como lucho con mi vestido que hace presión haciendo que se me haga difícil salir rápido del rio.

—Cuando era pequeño, yo y el duque jugábamos en este lugar, antes estaba lleno de margaritas, tenía una pequeña silla y mesa donde la duquesa Stark y lady rosewet tomaban el té mientras nosotros jugábamos junto con sus  —comenta mientras me sigue observando—

—Caniches...—agrega ahora con un tono malhumorado—

Permanezco callada mientras él me sigue observando, acaso dijo que "él y el duque" eran amigos antes?? Levanto la mirada haciendo que el lord de una pequeña sonrisa y se empieza a quitar el guante de su mano derecha mientras yo poco a poco llego a la orilla.

—Es un lugar precioso, lastima que el pequeño Isaac no tenga amigos para que las viejas costumbres sigan—comenta  andino— el extiende su mano al estar cerca de  mí para intentar ayudarme, bajo la cabeza mirando lo poco que me queda para llegar a la orilla.

—Espero que los futuros Stark's no pierdan las costumbres, duquesa—comenta mientras me sigue observando— —Stark...—agrega con un tono bajo—

«Dijo: los futuros Stark's??» miro confundida al lord mientras sigue teniendo la mano extendida, dudo por algunos segundos en tomarla ya que este vestido está más pesado que yo y se me está haciendo muy difícil llegar a la orilla.

Miro al lord que tiene una mirada coqueta y enamoraría a cualquier joven en este momento, sinceramente se ve muy atractivo..

—Está bien duquesa, yo no soy una sabueso—anuncia dando una indirecta que capto al instante— el me está diciendo que no es el duque, como si él duque fuera alguien peligroso, pero no para mi si no para el, demuestro mi respuesta dejando su mano extendida y pasando orgullosamente a su lado mientras el agua que tengo en mi vestido moja el pasto.

Me pongo mis tacones intentando apresurarme para retirarme, si alguien me encuentra con él  así creo que se podría interpretar algo que no me conviene para nada.

—Nos vemos Lord Diker—comentó anunciando mi retiro— camino mientras el lord voltea a verme, es mejor no interactuar con él ya que el duque se podría molestar conmigo como aquella vez en el banquete de cacería, no me dijo nada pero su mirada estaba pegada en mi y en este lord, deseo no tener problemas con él ahora que me e encariñado de su presencia.

—¿Sabe que solo mis amantes pueden llamarme así?—pregunta desde lo lejos con un tono juguetón—

Al escucharlo dejo de caminar y me quedo callada, mi espalda se pone fría y parece que e recibido una apuñalada por detrás, «¡Que esta tratando de decirme estas hombre!» no sabe respetarme y siendo la duquesa.

—¡Disculpe!—exclamo enfurecida mientras aprieto ambos puños— no voy a tolerar este comportamiento, ni siquiera lo conozco para que me hable de esta manera y me diga cosas que desconozco solo para poder tener una conversación conmigo. Lo e llamado así por que así lo menciono la baronesa penelope ese día, lo dice como una advertencia o para tener una conversación divertida y pícara conmigo.

La duquesa y el destripador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora