Otro mundo (Itanaru)

Capítulo 13

Ambos caminaban en un silencio agradable -me sorprendiste bastante -el pequeño giró su vista al Uchiha -eso debe ser un halago, ¿verdad? -Itachi sonrió -de hecho, lo es, es verdad lo que dice Minato-sama, eres un genio del trabajo duro, es impresionante lo que has avanzado en tan poco tiempo -el Uzumaki sonrió divertido -mi abuelo siempre dijo que era un cabeza dura, ahora estaría revolcándose de la risa, no se lo creería -el azabache sonrió divertido, cuando vio la mirada triste al final del Senju, no pudo evitar perderse en ella -lo extrañas ¿no es así? -Naruto reaccionó, asintió -desde que lo perdí, siento que una parte de mi se fue con él, he tenido cosas muy buenas debo aceptar, por fin tengo una mamá, debo decir que a pesar de su porte rudo y estricto, es en extremo cariñosa y dedicada, tengo amigos, tú eres uno de ellos -Itachi sonrió, él sólo tenía a su primo Shisui como amigo, escuchar que el Senju lo ve de ese modo, lo hacía sentir especial -también está el Hokage, no le digas a nadie, pero puede que lo vea como un papá -el pelirrojo se sonrojó de más -tus mejillas hacen juego con tu cabello, puedes camuflajearte un poco-

Naruto lo vio sorprendido, soltó una carcajada divertida, tenía años sin reír de esa manera, eso no era mentira. Itachi se sonrojó al verlo de esa manera -yo también veo de esa manera a Minato-sama, mi padre, bueno, no es tan buen padre -Naruto sonrió, vio la mirada triste del mayor, decidió distraerlo -no pienses en ello, vayamos por un dulce para celebrar, ¿quieres? -Itachi sonrió y asintió, el pelirrojo tomó su mano, aún era pequeño y se valía de eso para ser más expresivo, quería hacer sentir bien al Uchiha, el mayor se sonrojó un poco, pero sonrió contento con su acción, sabía que lo hacía para distraerlo, no se negaría -vayamos-

Mientras caminaba platicaban de cosas triviales -marica -el pelirrojo endureció el rostro al igual que Itachi -no creas que lo que hiciste se quedará así bastardo -el rubio Namikaze usó sus manos para empujarlo, pero la mano de Itachi detuvo la suya -puedes por favor no faltarle al respeto -el rubio soltó su mano con fuerza -¿tú quién demonios eres?, no te metas conmigo, ¿qué no sabes quién soy? -Naruto no quería problemas, quería estar cerca de Minato y no se alejaría por su bastardo -vámonos Itachi, Menma, cuando madures hablamos -el pelirrojo jaló al Uchiha quién sonrió al verlo tan maduro -eres alguien bastante maduro para tu edad -el pequeño veía a la nada, habían dejado a un molesto rubio atrás, los aldeanos lo hacían a un lado por sus groserías -la vida te da algunas lecciones, no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos -

Itachi creía que hablaba de su abuelo -Menma lo ha tenido todo a diferencia mía, al inicio tenía muchos celos, envidiaba el hecho de que tuviera papás que lo adoraran y lo mimaran, que le dieran todo lo que no tuve, hasta que entendí, tal vez si lo hubiera tenido todo sería como él -el Uchiha lo observaba con cuidado, sus ojos mostraban experiencia y madurez, se veían perdidos en los recuerdos, ¿qué tanto habrá sufrido para hablar de esa manera?, tal vez ver como asesinaban a su abuelo, el hecho de que no tuviera padres y se la pasara vagando por el mundo -cuéntame, ¿por qué hay tanta tristeza en tu mirada? -Naruto abrió sus gemas bastante, bajó el rostro avergonzado -no hay mucho que contar, ya sabes mi vida gracias a Yamanaka-san, estabas ese día en la oficina -el pequeño sonrió divertido.

Itachi sabía que había algo más, no lo presionaría, entraron a la tienda de dangos y compraron sus banderillas, las comían a la orilla del lago Uchiha -¿Itachi-kun? -el azabache levantó el rostro, se sintió incómodo al ver a la chica, comer dangos en el lago era algo que hacía con ella todavía hace unos meses -¿qué sucede Izumi? -la chica rascó su brazo con vergüenza, Naruto veía el lago con el ceño marcado, sentía molestia en el chakra de la chica y en el de Itachi incomodidad, muy diferente al chakra cálido que lo envolvía hace unos minutos, le molestaba la presencia de la chica, robaba la atención de Itachi hacia él -es que… bueno, ya sabes, tiene algunos meses que ya no salimos a platicar, no sé cómo decirlo -Itachi la vio con seriedad -si, he estado ocupado -el azabache no sabía cómo decirle que se fuera, estaba incómodo, quería seguir platicando con el pelirrojo, la chica sintió su rechazo, asintió -bien, después te busco -el azabache asintió, la chica vio con duda al pequeño junto al azabache, no le dió importancia y continuó -¿es tu novia? -el Uchiha levantó el rostro con sorpresa, de inmediato negó -no, no tengo novia, es una amiga, aunque sé que ella busca una relación conmigo -Naruto lamió sus labios con celos -¿a ti te gusta? -el mayor negó nuevamente con calma -no, creo que… me gusta alguien… más -el azabache se sonrojó, giró su rostro hacia el otro lado para ocultar sus mejillas rosadas, Naruto había visto como lo vio cuando dijo esa frase, sus mejillas se sonrojaron, sonrió divertido ¿no podía ser o sí? no podía negar que a él también le agradaba estar a su lado y se le hacía además tierno y hermoso, le gustaba era un hecho, se sentía feliz a con él -eres muy lindo -Itachi se sonrojó aún más, giró su rostro hacia el pequeño quien estaba del mismo color, sonrió al darse cuenta que se sentía igual que él, el uzumaki metió la mitad de un dango a su pequeña boca masticando algo apenado, Itachi se armó de valor, besó su mejilla -tú también eres lindo -ambos sonrieron algo perdidos en el momento, continuaron comiendo sus dangos y viendo la puesta de sol.

…..

-Mocoso ¿a dónde vas? -el pelirrojo tomó su cabello un poco largo, lo peinó en media coleta dejando cabello suelto bajo esta, escuchó a su mamá, sonrió divertido -iré a pasear con Shikamaru y Choji, ma -la rubia sonrió -me alegra que hagas buenos amigos, el chico Nara es un vago, pero se ve buena persona -Naruto asintió feliz -sí, son agradables y buenas personas -la mayor se sentó en su cama con algunas dudas -he visto que en las tardes viene a verte Itachi, parece que sale de su turno como guardia de Minato directo a aquí -Naruto se sonrojó un poco, la sannin levantó una ceja, sonrió un poco -¿algún motivo en especial? digo, tienes casi diez años y el catorce -el pelirrojo negó -simplemente somos muy amigos, nos entendemos bien -la rubia se levantó, acarició su cabello -me agrada, bien, diviértete -el Senju sonrió divertido, salió corriendo del lugar al sentir el chakra de sus amigos -vamos a pasear rojo, hay un nuevo restaurante Akimichi cerca de la casa de Choji, es de barbacoa, nos darán descuento por apertura -el pelirrojo sonrió divertido -espero haya sabor limón pimienta, muero por algo así, corramos-