06; Cita

307 25 6
                                    

El timbre suena a la hora indicada, ni un sólo minuto después. Kirishima corre hacia la puerta con una sonrisa de oreja a oreja, está muy feliz.
Al abrir la puerta ve a Denki Kaminari, un rubio que conoce desde pequeño, uno de sus mejores amigos.

-¡Den!-Exclama Eijiro, para llamar la atención de su madre y que esta vea que no es mentira que va a salir con él.-Que bien que hayas llegado tan puntual, vámonos o se nos hará tarde.

-Buenas tardes, señora Kirishima.-Saluda educadamente el rubio, la mujer corresponde el saludo con una sonrisa encantadora.

«Mentirosa» quiere decir Eijiro, pues sabe que esa sonrisa amable no es la verdadera, que tan sólo sonríe cuándo hay visitas y que una vez se cierra la puerta vuelve a tener su verdadero carácter. Pero se queda callado, no quiere arruinarlo todo.

-Disfruten chicos.-Dice Hanako, sin borrar su sonrisa, posteriormente se dirige a su hijo.-Eijiro, vuelve antes de las diez.

Ambos chicos se despiden rápidamente de ella, y cierran la puerta bruscamente, para por fin poder hablar tranquilamente.

-¿Crees que se van a dar cuenta de a dónde vamos realmente?

-No lo creo, hemos sido muy discretos.-Responde Eijiro comenzando a caminar, Denki lo sigue.

El cielo comienza a teñirse de un azul oscuro precioso, y las estrellas iluminan el cielo, hace una tarde estupenda, no hace nada de frío, tan sólo hace una suave brisa que alborota ligeramente sus cabellos. Caminan a paso rápido en dirección al cine, dónde las dos chicas ya los están esperando.

Denki mira a Jirou maravillado, con una sonrisa de oreja a oreja, se queda cómo embobado al verla, Eijiro hasta puede percibir brillos en sus ojos. Pero no sabe porque, pero al ver a Mina, no se siente de la misma manera que Denki, no queda maravillado, mucho menos embobado, y no lo ve, pero jura que sus ojos no se han iluminado al verla, y se siente mal por ello.

-¡Hola Ei!-Saluda emocionada Mina, dejando un suave beso en su mejilla en forma de saludo.

Kirishima sólo puede sonreír, pues no le nace hacer nada más, tan sólo sonreír, lo que hace cuándo se siente incómodo y no sabe que más hacer.
Mina lo agarra del brazo y lo conduce hasta la tienda del cine para comprar sus palomitas y bebidas. Denki y Jirou los siguen con grandes sonrisas. Compran bebidas, golosinas y palomitas de maíz y entran a la sala de cine dónde proyectarán la película que han elegido.

Mina y Eijiro se sentaron juntos con las palomitas entre ellos. Mina se acomoda en su hombro, dejando todo su peso en él, Kirishima se remueve algo incómodo, pues no se siente nada a gusto. Mina le gusta, pero hay algo que no le permite disfrutar al máximo de su compañía, «Son los nervios» se obliga a si mismo a pensar.

La película le ha gustado, es de terror.
Nunca había visto una película de terror, sus padres decían que eran satánicas y que estaba mal verlas, él, ingenuo, creyó cada palabra que decían. Mientras los créditos finales se muestran en pantalla y la gente poco a poco se va retirando de la sala, Mina lo agarra de su camisa y estampa sus labios con los de él, bajo la mirada sorprendida y anonadada de Jirou y Denki quiénes llevan un buen rato mirándolos. Él se siente bien, pero a la vez es raro, nunca ha besado a nadie, ese es su primer beso.

La unión de sus labios con los de Mina dura apenas unos cortos segundos. Se siente avergonzado, pero a la vez se siente feliz, eso significa que Mina y él ahora son novios, pues según él, un beso es lo que sella las relaciones y el matrimonio. Mina es su novia ahora, o al menos eso cree. Se atreve a sonreír pese a la vergüenza, y Mina corresponde igual de avergonzada, pues besar a Eijiro no es algo que entraba en sus planes para esa noche, fue un simple impulso, Kirishima es un chico muy agradable y lindo, y se le hizo tierna la forma en la que Eijiro se asustaba con cada mínima cosa que ocurría en la película, fue inevitable para ella no besarlo.

Eijiro sale del cine muy feliz pese a lo avergonzado que está. Los dedos de la chica y los de él están entrelazados, y para él no hace falta decirse nada más, para él está muy clara su relación actual. Tal vez todo fue muy deprisa, más de lo que debería y le hubiera gustado, pero las cosas pasan por algún motivo, supone. Dios ha querido que sea así, y el está muy feliz con la supuesta elección de Dios.
Mina es una chica encantadora, y la primera chica que realmente le ha gustado en toda su vida, le gusta su carisma y su energía.

Vuelve a casa a las 09:50 pm, ni un minuto más ni uno menos. Suspira aliviado, ha vuelto diez minutos antes de su hora límite.

-Hola Eijiro.-Saluda su madre.-¿La pasaste bien con Denki y sus amigos?

Denki, Shinsou y Hanta, ellos son un grupo de monaguillos de su edad que conoce desde pequeño, el les dijo a sus padres que saldría con ellos. Técnicamente, no era mentira del todo, sí ha salido con Denki.

-Hola mamá, sí, la pasé muy bien con ellos.

Eijiro finge bostezar, sólo para tener una excusa para ir a su habitación. Su familia está distribuida por toda la casa, su madre limpia los platos después de la cena, su padre está en el sofá viendo la televisión y su hermano debe estar en su habitación terminando las tareas de la universidad.

-Iré a mí habitación, estoy algo cansado.-Dice Kirishima, aunque es mentira, se siente con mucha energía, no tiene ni un poco de sueño.

Eijiro sube las escaleras a gran velocidad, al llegar al segundo piso corre hasta su habitación, está emocionado y recuerda que cierta persona quería saber todos los detalles de su cita, por lo que rápidamente abre su chat con Katsuki y escribe

"Ya volví, te tengo que contar muchas cosas"


•Freedom• (Bakushima)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora