07; Emociones

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Las lágrimas caen por sus cachetes, mientras lee una y otra vez ese mensaje. "Mina y yo estamos saliendo" está siendo ridículo al llorar por él, pero le duele cómo la mierda.

Kirishima tiene novia, Mina ahora es su novia. Se limpia las lágrimas con la manga de su suéter, porque Katsuki sabe que esto es tonto, que no tiene sentido que derrame lágrimas por el pelinegro, cómo si alguna vez hubiera tenido alguna posibilidad de estar con él. Tendría sentido llorar si alguna vez hubiera tenido esperanzas, posibilidades de estar con Eijiro, pero nunca las ha tenido, por lo que es un sinsentido llorar por él. Él sabía que eso iba a pasar, que Kirishima encontraría a una mujer que lo quisiera y viceversa, sabía que Kirishima nunca se podría enamorar de un chico, eso es algo que tenía asumido desde hacía mucho tiempo, entonces, ¿por qué sigue llorando?

"me alegro por ti Ei"

Es un mentiroso. No se alegra, para nada, y no alegrarse por Kirishima es egoísta, pero también es común. Katsuki, definitivamente, ama a Kirishima, demasiado. Duele saber que nunca tendrá una posibilidad con él por la familia de la que proviene, pero es algo obvio, al fin y al cabo.
Lo más maduro sería aceptarlo y finalmente rendirse, pero Katsuki nunca ha sido de esa clase de personas que se rinden fácilmente.

Recibe un mensaje de Kirishima en respuesta al suyo, pero tan sólo lo mira, sin realmente leer lo que dice, demasiado triste cómo para escribir nada más al causante de sus lágrimas.

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Kirishima permanece con una sonrisa en su rostro que por más que pase el tiempo no se debilita ni un poco. Está feliz, muy feliz. Mina es una chica bonita, eso es innegable, y él se siente como el chico más afortunado y dichoso del mundo por poder tener su corazón. Sus padres ya le han preguntado porque se encuentra tan feliz, él no se siente listo para contarles, por lo que simplemente dice que es porque la pasó muy bien con sus amigos. Estos apenas lo conocen, por lo que lo creen inmediatamente sin darle más vueltas al tema.

Siente algo raro en su cuerpo, cómo un malestar, culpa a las palomitas y los dulces por ello, sin darle mucha importancia, sin saber que no está padeciendo un daño físico sino algo más mental. Él ni siquiera es consciente de que realmente, no ama a Mina, tan sólo le gusta y la quiere.
Eijiro siempre ha estado enamorado de otra persona, pero aún es muy pronto para él darse cuenta. Nunca ha visto probable la posibilidad de que le guste un chico, más que nada porque sus padres lo odiarían eternamente por ello, y nunca ha pensado en que él mismo podría tener esos gustos. Para él es imposible ser gay, no puede serlo.

No entiende porque Katsuki lo ha dejado en visto, normalmente es el rubio es el que siempre trata de alargar la conversación, sabe que Bakugou ama hablar con él por mensaje, más que nada son mejores amigos. Ignora ese hecho y deja a un lado su teléfono móvil para seguir indagando en su propia felicidad y dicha.

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Cinco meses después

Los Bakugou siempre han sido gente noble y gentil, y sobre todo son muy auténticos, no les importa nada lo que la gente diga sobre ellos, ellos son felices y ya está. No se dejan influenciar por las malas lenguas de la ciudad, y siguen siendo los mismos.

A Kirishima siempre le ha encantado estar con la familia Bakugou, porque la residencia de los Bakugou se siente tan hogareña, acogedora y sobre todo se siente familiar. Se siente cómo si de verdad estuviera en un hogar de verdad conviviendo con una familia de verdad, no cómo en su propia casa.
Kirishima se siente más en familia con los Bakugou que con su propia familia. Y aunque odie preferir a alguien antes que a su propia familia, no ha logrado cambiar su mente nunca.

-¡Mamá!-Grita Katsuki.-Eijiro y yo estaremos en mi habitación.

La mujer lo único que hace es asentir con la cabeza, de acuerdo con lo que ha dicho su hijo. El menor de los Bakugou se dirige a su dormitorio, y Kirishima lo sigue cual perro faldero.
Llegan hasta la habitación que ya conoce, pero aún así no puede evitar recorrer todo el dormitorio, cómo si fuera la primera vez que ha estado ahí. Sus padres no tienen ni idea de dónde está, nunca saben dónde está y normalmente no les preocupa saberlo, por lo que está tranquilo.
Se siente verdaderamente en paz por una vez en su corta vida.

-¿Por qué te sigue impresionando? Has estado aquí muchas veces.-Dice Katsuki, con una sonrisa suave.

–Lo sé, pero la decoración es tan genial, mis padres nunca me dejarían decorar mi habitación de esta forma.

Es cierto, el dormitorio de Eijiro está lleno de cosas religiosas, sus padres no le permiten quitar todas esas cosas ni mucho menos decorar tal y como a él le guste. Pero Katsuki tiene pósters de sus bandas y cantantes favoritos, y figuras de All Might, su superhéroe favorito de los cómics en los estantes. No es la gran cosa, pero para Kirishima siempre ha sido genial.

Las horas son cortas cuándo están juntos, eso es algo que nunca había cambiado, la pasan muy bien con el otro y todo se siente más ameno cuándo están juntos. Kirishima despeja su mente de todo lo relacionado a su familia, y Katsuki se despeja de todo lo relacionado a sus sentimientos, cuándo está a solas con Eijiro, simplemente se deja llevar, deja que sus sentimientos fluyan.
Han pasado dos horas antes de que pudieran darse cuenta, han estado hablando sin parar, olvidándose de todos sus problemas.

Kirishima mira su reloj, dentro de poco empezará a anochecer, sus padres le matarían si llega en la noche, su hora límite para estar en la calle entre semana son las 7 pm, y son las 6:30 pm. Tiene que irse.

–Debería irme ya, es tarde.–Dice Eijiro levantándose del piso.–La pase muy bien contigo, Kats.

Ambos chicos salen de la habitación y se dirigen a la puerta principal. Eijiro se pone su abrigo, y Katsuki se apoya en el marco de la puerta para despedir a su amigo. ¿Nunca he comentado que Katsuki siempre ha sido algo impulsivo? Si no lo he comentado, lo digo ahora.

Pues Bakugou al ver a Kirishima ahí, estando ambos a solas y sin nadie que pudiera molestarlos ni interrumpirlos, olvida todo, desde Mina hasta el daño que pudiera causar sus deseos. Simplemente agarra por su espalda baja y lo atrae hacia él, estampando sus labios sobre los de Kirishima, este no se mueve, ni un sólo músculo, pero para sorpresa del rubio, Eijiro no tarda mucho en corresponder el beso. Ni siquiera sabe en qué piensa, probablemente en nada.

Su beso dura tan sólo unos cortos segundos hasta que Kirishima lo obliga a separarse, empujándolo levemente, Katsuki se queda mirando a Kirishima, esperando a que este levante la mirada y deje de tocarse los labios para por fin hablar, cuándo este por fin levanta la mirada Bakugou espera impaciente a que Kirishima diga algo al respecto, pero este tan sólo niega con la cabeza y se va corriendo.

Buenas buenas.

A partir de ahora va a haber mucha tristeza y sobre todo mucho drama así que tendrán que prepararse para todo el drama que se viene en los próximos capítulos jsjsjs

Espero les guste lo que tengo planeado para este fanfic. Adiós se les quiere <333









•Freedom• (Bakushima)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora