Capítulo 35

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Mabel

Solo pude mirar a Alex sentado en su cama, no quería dejarlo solo ante esa mirada que tenía.

Me mordí los labios al verlo suspirar agotado frotándose el entrecejo. —Alex. —murmuré preocupada sentándome a su lado. —¿Qué sucede? —le pregunté acariciando su espalda, se veía tan conflictuado.

—Estoy... preocupado por Eric. —me dijo luego de un largo silencio. —Quiero hablar con él, pero tengo miedo de lo que diga. —me explicó mirándome temeroso, sus ojos temblaron angustiados.

De inmediato lo abrace. —Alex, calma. —le susurré acunándolo como tanto mi hermano y mi mamá lo habían hecho cuando me sentía deprimida. —Lo mejor siempre será llevar una comunicación, sólo debes calmarte y así podrás hablarle, estaré a tu lado siempre que lo quieras y necesites. —le dije sin parar de darle apapachos.

Mientras lo calmaba alguien tocó la puerta, dudé unos segundos antes de alejarme. —¿Si...? —dije abriendo la puerta, pero me sorprendí al ver a Rubit con una sonrisa tomando la mano de Eric que se notaba nervioso.

—¿Podemos hablar un rato? —preguntó ella con calma.

Todavía no podía acostumbrarme a verla a casi la altura mía. —Ah, claro. —respondí, miré primero a Alex antes de dejarlos entrar.

Este se mostraba conflictuado pero aún así se levantó asintiendo un par de veces debido a los nervios. —Bueno, tenemos a dos nerviosos aquí. —dije más tratando de calmar el ambiente.

Narrador

Las chicas acomodaron a sus novios, quedando frente a frente, ambos no decían nada.

—¿No dirán nada? —preguntó Mabel sintiéndose incómoda con el silencio.

—Yo... —murmuró Eric mirando fijamente la mitad de la cama que los separaba. —Descubrí cómo recibó poder.

—¡¿Enserio?! —gritó sorprendida y emocionada Rubit tomando una de las manos de su novio. Su emoción se desvaneció al ver su expresión de preocupación. —¿Pasa algo...?

—Miedo. —afirmó cerrando los ojos tragando con fuerza.

Todos lo miraron esperando algo más para poder entender a qué se refería.

—Mi energía proviene del miedo, pero no es cualquier miedo. —empezó a explicar frunciendo el ceño. —Proviene del miedo que tienen hacia mi. —sentenció mirándolos asustado. —En medio de lo que pasaba podía sentir el miedo de ustedes dos, y... ¿quería que me...? Hablarán sobre sus miedos, así tal vez pueda comprender sus pensamientos sobre lo que está pasando. —explicó muy nervioso.

Sus amigos lo miraron sorprendidos, una sonrisa calmada surcó los labios de Mabel al ver a los que más quiere Eric tomar sus manos.

—¿Eres idiota? —preguntó Alex aburrido, dejando descolocado al nuevo demonio.

—Parece que sí lo es. —le siguió Rubit acercándose más a su novio. —Si recuerdas lo que te dije antes de venir, ¿no? —le preguntó algo molesta. —No tengo miedo de ti, puede que seas más poderoso que yo en poder pero yo tengo más dominio que tú. —afirmó con una sonrisa altiva.

—De mi parte es obvio que tenía miedo por todo lo que ocurría, pero no porque seas un demonio o por lo que puedas llegar a hacer, sino por lo que podría pasar, nada de lo que sabíamos, de lo que hemos vivido ha sido algo real y es comprensible. —le dijo seriamente. —Tenía miedo por ti y lo que conlleva que tu origen sea diferente al que sabíamos, pero sin importar que, ¡Eres y siempre serás parte de mi familia! —concluyó con una gran sonrisa.

Contrato II: RevelacionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora