Dejé mi corazón en La Tierra Media.

4.Como una familia.

Ya llevaba un buen rato sentada junto al fuego escuchando los ronquidos de Bombur,cuando decidí ir a probar el arco. Me levanté, me colgué el carcaj y el arco y por si acaso recogí también el bolso.

Me acerqué a Bilbo para ver si estaba bien. Dormía como un tronco junto al fuego. Que mal, a ver si se iba a quemar o algo. Empecé a caminar en dirección al bosque y me detuve cuándo encontré un enorme árbol que sería perfecto para disparar.

Cogí la primera flecha, la coloqué en el arco y apunte a una de las primeras ramas. Quería darle justo en el hueco que tenía en medio, así que apunté y disparé. Fallé unos cuántos tiros hasta que le cogí el truquillo y fue entonces cuando me aburrí.

Me acerqué al árbol y empece a sacar las flechas de hueco, luego las conté todas y faltaba una, que supuse que se me habría caído por los arbusto. La busqué por todas parte pero no la vi, y en un momento oí un ruido, como de alguien caminando o acercándose. Cargué el arco y esperé. Podría ser cualquier cosas, y con eso me refiero a un conejo, un ciervo, o... un orco. Después de unos segundos, el ruido cesó, pero no me moví ya que podría ser una trampa.

Decidí que ya había pasado tiempo suficiente y empecé a andar de nuevo hasta donde estaban los demás. Todo el mundo estaba tranquilo durmiendo. Dejé el arco y el carcaj apoyados a la pared de rocas donde estuve sentada hace un rato y me quedé inmóvil examinando el lugar por si acaso, y detuve mi vista en un enorme árbol que, medio colgaba hacia el precipicio y así me fijé en el hermoso paisaje que tenía delante. No me lo pensé dos veces, corrí hasta el árbol, y después de comprobar que era seguro caminé hasta más o menos la mitad y me senté.

Dejé los pies colgando por un lado. La altura era literalmente mortal. Ese momento me hizo recordar la típica imagen de los dibujos animados en los que salen unos obreros sentados en la grúa de un rascacielos tomando el almuerzo. Todo se veía increíble desde aquí.

-Leilani- Miré hacia las raíces del árbol y vi a Fili haciendo todo tipo de gesto histéricos- ¿Te has vuelto loca o qué? Vuelve aquí- era demasiado gracioso, me estaba echando la bronca en susurros.-

-Fili, mira que vistas- Dije imitando su tono de voz.-

-¿Cómo que mire las vistas? Que te vas a matar- Empezó a acercarse a mí con paso tembloroso- ¿Se puede saber qué estás haciendo?.-

-Nada, solo quería ver las vistas, la Luna está muy grande.-

-¿Y no podías mirarla desde allí?- Se levantó y tiró de mi para que hiciera lo mismo.-

Volvimos a "tierra firme", y entonces ya más calmados nos sentamos donde antes le gastamos la broma a Bilbo.

-Eh, ¿qué hacíais colgando de un árbol?¿Y por que susurramos?-Kili se acercó y se sentó junto a su hermano. Pero vamos a ver, ¿es que ahora nadie duerme o qué?.-

-Eso-añadió Bilbo, que al parecer se unía a la fiesta.-