XIII. Just happy

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Recoge la ropa seca de la secadora y la tira dentro de la canasta para llevarla a la habitación. Odia que sea su mes de lavar de todo. Taehyung ensucia más ropa de lo que cualquiera pensaría. Por un tropiezo casi se cae y con él, iba a caer todo al suelo.

No lo hace.

La cesta queda a mitad de camino, como si el tiempo se detuvo abruptamente. En todo, menos en Hoseok que sí cayó al suelo, se rompe la nariz de lo fuerte que fue y ahora que se levanta, la sangre no cae. La siente entumida y aglomerada en sus fosas nasales.

Observa fijamente la cesta, confundido de que esté así ¿Por qué no se cae? Incluso si la toca, está pausada en el aire. Igual a una película de ciencia ficción. Recuerda vagamente que hace más de un año sucedió algo exactamente igual en un café. Va a la ventana con la mano en la nariz y mira por la ventana, demasiado dura de abrir y por ello le costó horrores asomarse.

Nada se mueve. Hay tres palomas justo delante suyo. Inmóviles, silenciosas y estáticas con sus alas extendidas o dobladas hacia sus cuerpos. Balbucea tontamente—. ¿E-estoy dormido? —se cuestiona, mira la sangre en su mano y al sacudirla, las gotas no caen. Parpadea repetido y su mente hace todo lo que puede por entender. Sin éxito ninguno.

—Esto no- ¿Uh?

Trata de usar su celular, no enciende. El teléfono de la casa tampoco y aunque lo deja en el aire, este no se cae. Trastabilla antes de ir apurado a la habitación que usan para estudiar y trabajar. Taehyung está ahí sin prestar atención a otra cosa que no sean los enormes planos que tiene que llevar la próxima semana. Es lo único que está en movimiento. Algunas cosas se van al suelo o mejor dicho, lo intentan.

Papeles, lápices, un par de láminas de madera para maquetas. Taehyung se quita uno de los auriculares que una— ¿Pasa algo cariño? —pregunta Taehyung.

—E-es que- No avan-

Mira afuera de nuevo, la ropa sigue flotando, el teléfono, su sangre. Nada está moviéndose. Taehyung se percata de cómo se está todo alrededor y se apura a tomar el celular con suficiente discreción. El dispositivo de comando se activa y todo reanuda su curso. Hoseok salta del susto. El celular, los lápices y papeles cayeron al piso de repente.

— ¿Qué? ¿¡Qué te pasó en la nariz!? —se levanta a prisa para revisarlo. Hoseok frunce las cejas ¿Acaso no vio todo lo que pasaba o qué? Su nariz es el menor de los problemas.

. . .

— ¿Cómo si el tiempo se detuvo? Hobi, creo que tragaste cloro sin querer y ahora estás intoxicado.

—Ya me había pasado una vez, cuando fuimos a una cafetería- ¡todo estaba detenido! ¡Nadie se movía y lo que había en el aire se quedaba solo flotando! —explica con tono escandaloso que aturde ligeramente a Taehyung. El departamento silencioso contrasta de forma horrible con la voz chillona de Hoseok. llena de pánico y confusión.

—Seguro fue una idea que te pasó por la cabeza. Eso no es posible. —rehúsa Taehyung al instante—. Cierra los ojos. Te acomodaré la nariz.

—A-ay no, eso va a doler, nono, por fis no.

—Hobi se valiente.

—No, me da miedo el dolor. —lloriquea.

—Eso no te detiene de montar-

— ¡ARREGLA MI NARIZ!

Taehyung sonríe cuadrado, lo sujeta con cuidado y acomoda la nariz de Hoseok en un solo movimiento. Hoseok respira profundo, vale, ahora todo está bien. Taehyung lo toma del rostro y le da un beso en los labios.

Stand by me || VHopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora