Stand by me || VHope

XX. Reality open

—Creo que deberías dar la oportunidad—opina Jin acariciando a Mickey. Él y Hoseok echados en el pasto de un parque—. Nada en él ha dado señales de ser extraño o peligroso, es simpático y con buenas ideas... Darte tiempo de reconstruir esa parte de tu vida podría estar bien.

—No sé si eso es lo que pasa—admite Hoseok inquieto—. Quizá lo estoy malinterpretando, pero...

— ¿Pero? —tienta Jin con una sonrisa.

—Incluso si es una amistad, me gustaría seguirla. Visitarlo podría ser lo que me diga qué es lo que sucede y una vez claro... Disfrutarlo. —Concluye Hoseok, sonriente. Brillante y vibrante como hacia mucho tiempo no pasaba.

—Avisa cuando vayas, estaremos pendiente de actualizaciones con el guapo y sensible francés de ensueño.

Hoseok le da un empujón amistoso. Da un profundo respiro y se queda mirando el cuello un rato hasta que su expresión se vuelve una confusa, casi de pánico ¿Es en serio? Ayer en la noche ya hubo un salto de minutos, luego un par de horas. Hacia atrás y hacia adelante.

Antes de echarse en el suelo, resignado a verlo suceder, sobresalta de escuchar a Jin hablar:

— ¿Qué demonios pasa?

— ¿Lo ves? —Jin gira abruptamente hacia él—. Tu... ¿¡Lo puedes ver!? —Hoseok se levanta de golpe—. ¡FINALMENTE NO SOY SOLO...!

Agarra a Mickey antes de que se caiga por lo que parece un agujero, portal, de ciencia ficción. Tanto él como Jin empiezan a correr para huir de eso. No van a ninguna dirección en específico, es imposible hacerlo cuando miles y miles de esos pequeños agujeros surgen y se llevan a las personas, suelo, árboles, nubes ¡Todo es succionado por esos pequeños agujeros misteriosos!

Hoseok recuerda demasiado bien la primera vez que vio uno, como su silla quedó rota y sin remedio. Sabe que, si cae en uno de ellos, posiblemente acabe muerto y si se cierra con la más mínima parte de él dentro, sería incluso peor que morir.

~ * * * ~

El par de soldados hacen todos sus esfuerzos por mantenerlo quieto, por intentar neutralizarlo y llevarlo a la sala que se preparó para él. Taehyung les da muchas dificultades hasta lograr soltarse, empujar a uno de ellos y robarle la pistola de la mano.

Dispara a su estómago y luego da al otro. Consigue robar uno de los trajes, ponérselo y salir corriendo por los infinitos pasillos. No tiene la más mínima idea de cómo es este lugar, así que no tiene mucha más opción que adivinar donde tienen las naves. Es la única forma de salir de un sitio como este.

Por accidente pasa frente a los aposentos del Supremo Laïdt. Lo ve toser, apoyado en un alto estanque donde seguro se lava la cara. Su guardián se acerca a él con una toalla. Taehyung se esconde tras uno de los pilares para escuchar la conversación.

—Mantener las realidades en insistente colapso está costando a su salud, mi señor. Le recomiendo no continuar haciéndolo.

—Si no lo hago habrá una reacción en cadena y moriremos todos—responde tomando la toalla y secándose el rostro. Puede contar como la primera vez que Taehyung lo ve sin maquillaje en el rostro. Siendo exactamente igual a Jimin. No se había percatado de lo aniñado de sus facciones, lo triste que es en realidad—. No he sacrificado tanto para permitir que todo se venga abajo.

—Insisto en mi recomendación. Una forma de curar sus males, es asesinar al culpable de este desastre. Si me lo pide, iré a hacerlo ya mismo. —dice N con rectitud y esa infinita devoción hacia su líder.

El Supremo Laïdt se lo queda viendo antes de negar con la cabeza.

—Incluso traidores como él merecen tener una muerte según las reglas—anuncia acercándose a él y tomándole de la mejilla—. Porque cuando mi tiempo de caer llegue, querré la misma benevolencia.