Capítulo 14: El regalo perfecto

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Leo Gil's POV

Le di otro golpe a la pared, pero esta vez no estaba solo.

- Oiga compadre - Lucero me pasó el brazo por los hombros - ¿y usted a qué está jugando con esa minita?

Me quedé congelado cuando supe que el Gato me había atrapado con las manos en la masa. Y lo peor es que no era solo él, al darme la vuelta también me encontré con Solari y Falcón.

- ¿Cuándo es el cumpleaños? - bromeó Maxi - yo también quiero ir, eh.

- Sí él va, yo voy - se sumó Solari como si fuera un cabro chico.

Negué con la cabeza.

- No, no, no - me apresuré en decir - no hay ningún cumpleaños, bueno, sí hay, pero yo no voy a ir... ¡Y ustedes tampoco!

- Che, ¿pero para qué te vas en la mala tan rápido? - insistió Lucero - Si la Rous te invitó a su cumpleaños no podés faltar, aparte a nosotros también nos cayó bien la pibita. Andá, dale.

Suspiré.

- Ya, okey - cedí - Yo voy a ir pero ustedes se quedan acá, alguien me tiene que tapar con el profe. 

Solari protestó.

- ¿Pero por qué él puede ir y nosotros no? - le reclamó a Lucero.

- Oye, sí - se sumó Falcón - a mí tampoco me parece justo.

El Gato se rió.

- Che, pero si vos ni siquiera la conocés - le dijo.

- ¿Cómo que no? - se defendió Maxi - pero si yo te la cuidé mientras vos estabas paseándote en pelota con el Leo. Así que yo también quiero ir al cumpleaños de la Rous.

Se me acabó la paciencia. Esto se había transformado en un desorden y mis amigos tenían la madurez de un niño de cinco años.

- Hey, ya basta - alcé la voz - Nadie aquí va a ir al cumpleaños, yo no me estaba paseando en pelota, y la mina se llama Rosario, no "Rous", ¿queda claro?

Lucero se echó a reir.

- Ché, les dije que le gustaba - bromeó.

Estudió mi reacción, y al ver que yo no me estaba riendo, se dio cuenta de que su broma no había tenido gracia para mí.

- Ya, vale, entendemos - se calmó - chicos, ¿nos dejan un rato a solas? 

Solari reclamó otro rato más, pero Lucero le guiñó un ojo y eso fue suficiente para hacer que Maxi y el Pibe se fueran.

El Gato me pasó un brazo por los hombros y me invitó a hablar con sinceridad.

- Contame Leito, ¿qué le tenés de regalo?

Ya no sacaba nada con negarme porque habían dado por hecho que sí iba a ir al cumpleaños. No me había preocupado por regalo, la verdad, así que simplemente le mostré la camiseta firmada en mi mano, esperando que eso fuera suficiente.

Pero para Lucero no lo era.

- ¿Pero cómo le vas a regalar una cosa así? - me retó - ¡Qué falta de tacto, Leito! Se nota a kilómetros que vos no sabés nada sobre mujeres.

- ¿Acaso vos sí? - respondí con sarcasmo.

- Escuchá, Leito - me llevó a dar una vuelta por la cancha - a las pibitas como Rous les gusta la ropa, el maquillaje, algo para verse guapas. No le podés regalar una camiseta toda fea de un equipo de fúbol.

- Hey, más respeto que yo amo la camiseta de Colo Colo - me defendí.  

- Sí, sí, yo también - continuó - pero ella es una chica, Leo. No podés llegar con un regalo así a su primera cita.

- Cumpleaños - lo corregí.

- Cumpleaños y primera cita - me corrigió él a mí. 

Tomé aire para hacerme el ánimo de ceder a lo que mi compañero me decía.

- Vale, ahí voy a ver que se me ocurre. Pero por favor, no quiero que ninguno de ustedes se aparezca ese día en el cumpleaños, ¿estamos?

Lucero hizo un gesto como de sellarse los labios, asumí que me estaba prometiendo que así sería.

...

¿Qué compro? ¿Qué compro? ¿Qué compro?

Daba vueltas por el mall de su ciudad buscando algo que me gustara en las vitrinas, pero todo se veía igual. ¡Si al final todo era ropa! Daba lo mismo lo que comprara.

Todavía tenía en mi mochila la camiseta con dedicatoria, era mi plan b en caso de que no consiguiera un regalo mejor antes de las 4, que era la hora a la que acordamos reunirnos. 

A las chicas les gusta lo exclusivo, ¿no? Brayan Cortés siempre se quejaba en los camarines de que su señora le pedía lo más caro, lo más único y lo más nuevo. Eso me hizo decidirme por una tienda pequeña, media tirada a la onda hippie que se llamaba "Umbrale". Me gustó porque tenían muy poquitas prendas de cada una. 

- Hola, ¿te puedo ayudar en algo? - se acercó una vendedora apenas me vio, yo me bajé más el jockey para que no pudiera reconocerme.

- Hola, sí - cambié un poco la voz - quiero eso.

Entonces apunté con el dedo un maniquí de la vitrina.

- ¿Cuál prenda en específico? - me preguntó, poniéndome en aprietos.

- Eh... - mantuve la cabeza agachada así que no pude ver bien - todo. Quiero todo lo que tiene ese maniquí, por favor.

- Muy bien, ¿en qué talla lo busca? - continuó con sus preguntas difíciles.

"¿Esto no es cómo los hombres donde todos son talla L para todo?", me cuestioné. 

¡Esa sí que era una pregunta difícil! No tenía ninguna referencia de la Rosario, ni siquiera recuerdo haberla visto de cuerpo entero, o quizá sí y no le puse atención. Es que todo pasó tan rápido.

Entonces recordé cuando la escondí en el bus y le pasé mi chaqueta para hacerla entrar al hotel. Recuerdo que las mangas le colgaban cuando intenté tomarla de la mano. 

- Es como yo, pero más pequeña - le mostré con las manos un tamaño aproximado - como así más pequeña. 

La vendedora entrecerró los ojos, como diciendo "¿qué me está queriendo decir este tipo loco?". 

- ¿Una talla S estaría bien? - preguntó con desconfianza.

- S es small - pensé en voz alta - y small significa pequeño... ¡Sí! S está bien. 

- Okey... - respondió ella con desconfianza - ya te los busco.

- Gracias - dije contento, eso no había sido tan complicado como pensé.

Ojalá tengas razón, Lucero, sino te voy a colgar de las bolas. 

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Me imagino al Leito tan nervioso comprando un regalo y lo encuentro tan tierno 😍

Hola mi gentee, ¿cómo están?

¡Hoy es día de mucho fútbol! Tenemos una tremenda semifinal entre Argentina y Croacia, ¿ustedes por quién van?

Yo voy por mi Luka Modric, todo el rato ♥️⚽

Pasando a otro tema, han llegado varias seguidoras nuevas a este fic, así que quería presentarme para que me conozcan un poquito ❤️ Mi nombre es Emori, escribo fics de fútbol desde el 5 de noviembre del 2021, y en mi perfil puedes encontrar:

Fics terminados: Pulgarcita (Erick Pulgar), Juega conmigo (Joaquín Montecinos), Suéltate (Francisco Sierralta), Descalza (Ben Brereton), Entre mentiras y rosas (Eugenio Mena).

Fics en emisión: Juégatela por mí (Joaquín Montecinos, segunda temporada), De la misma hinchada (Leonardo Gil), Mientras el lobo no está (Paulo Dybala, Qatar 2022).

Próximamente: Clemente Montes, Guillermo Maripan.

Así que quedan invitadísimas a conocer las otras historias que tengo en mi perfil, ¡se van a enamorar! 💕

De la misma hinchada (Leonardo Gil)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora