My First Smile♥ -Capitulo 54
"... Quiero que tú y Yo seamos los únicos en la tierra Que digan TE AMO... Te amo Justin."
Al terminar de leer aquella carta caí sobre mi Propio peso. En silencio deje la carta en el Asiento y Salí del Auto... las lágrimas rodaban por mis mejillas, Aun así no chillaba, No decía nada, Simplemente empecé a caminar alejándome de mi auto, La caminata se transformo en corrida... En medio de la nada empecé a correr lejos, alejándome de todo, De la gente, del mundo... finalmente un simple tropiezo hizo que caiga al suelo, rendido, lastimado, Ya sin razón por la cual vivir... me postre sobre mi rostro y Empecé a llorar desconsoladamente, Recordaba cada momento que ella y yo pasamos juntos... y esa Carta, esa Carta decía lo que ella sentía por Mi, Ella... ella me Amaba, Mas creo que eso ya es pasado, Ya que yo como tarado lo arruine todo... maldecía mi existencia, Maldecía todo... Ella era mi vida, Ahora ¿Qué rayos voy a hacer sin poder verla? ¿Sin poder abrazarla? ¿Sin poder tocarla? ¿Sin poder acariciarla?... ¿Sin poder Besarla?, No, Simplemente este era el Final... Ella me amo, pero tal como hice que me ame... Hice que me Odie.
—¿Por qué? —musité en vos alta, poniéndome de rodillas con mi rostro lleno de Lagrimas y mis ojos también, con la Respiración Agitada dejaba de Postrarme sobre mi rostro. — ¿Por qué me la tienes que quitar?, Ella es mi vida... ella es mi todo, Ahora, dime tu. —voltee mi rostro hacia el cielo, y con un dolor en mi Alma, con todo destrozado por dentro, volví a decir— ¿¡Que maldita sea hago vivo si ella ya no está conmigo!? ¡Maldición!! ¿¡Porque!? ¿¡Porque!? —grite al cielo para luego bruscamente volverme a postrar sobre mi rostro en el suelo... llore, chille, grité, crují mis dientes, lloraba por ella, Rogaba que este no fuera el fin, sabiendo que eso no iba a pasar... simplemente quería Morir.
2 MESES DESPUES.
Se preguntaran ¿Qué paso?... Yo les diré que paso.
Nuevamente en la Plaza, con mi Skatebord. Escondido detrás de un árbol, apoyado en el con la Cabeza oculta entre mis rodillas... Intentaba superarla, Intentaba no recordarla, Mas cualquier maldita cosa me traía nuevamente su nombre a mi cabeza.
Varias veces eh querido ir a su casa, intentando arreglar las cosas... Mas temía que ella no me recibiera, Temía volver a escuchar un "Te odio" de su boca.
No sabía nada de ella, No sabía que le había pasado... Era como si se hubiera esfumado de mi Vida, Cada noche rogaba a Dios pidiéndole que me la devuelva... Lloro, pensando que ya me Olvido.
Su dulce rostro, su melodiosa voz, jamás eh vuelto a ver y escuchar... Ya iban dos meses ¿Cuánto más tendría que pasar para que me perdone? Podría jurar que ya me estaba muriendo. Hoy quería alentarme e ir a su casa... pero al solo pensar aquel hecho de volver a verla, Temblaba. Quisiera al menos volver a escucharla decir mi Nombre, nadie más lo decía como ella... Ella era tan especial, tan Única, tan hermosa... Yo mismo me hago mi infierno recordándola.
Me levante del Césped y Agarre mi Skatebord, Sin montarme en el me fui caminando a mi casa... Estaba cansado, pero necesitaba relajarme.
Todas las chicas que pasaban a lado mío me Sonreían, o simplemente me daban esas típicas "miradas"... Lo estúpido es que ellas no sabían por el dolor que estaba pasando, y que Jamás me fijaría en ninguna de ellas. Mi corazón, aunque ella ya no me quiera, Es solamente de Taylor. Aunque duela... Es la verdad.
—Mamá, Llegue. —dije más o menos Gritando cuando entre por la puerta de mi Casa, al no escuchar nada ni a nadie cruce la sala y la Cocina yendo a mi cuarto... Tire mi Skatebord a un Lado al llegar a mi cuarto, para Luego tirarme Yo a mi cama.
Era tan... estúpido, Yo mismo me hacia mi propia cárcel aquí... Yo mismo me abrumaba, ¿Pero qué más podía hacer? Dos meses sin ver al Amor de tu vida, Dos meses sabiendo que ella te odia, Dos meses sabiendo que habría más... Causaba un gran dolor, Un dolor incomparable. Lo único que me consolaba era recordar los buenos momentos que pasamos... Aunque aveses no sabía si eso me reconfortaba, o Simplemente me hacia recordar el hecho de que lo de ella y Yo se había acabado.
Aquella carta la tenía guardada en un cofre... Un cofre de Plata, La había guardado pero No la había vuelto a leer o Ver. Siempre me pregunto... ¿Ella me perdonara?
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Relajando mis ojos aun echado en mi cama, Me preguntaba que estaría haciendo ella, En que estaría pensando, si estaba pensando en mí, Ya que yo siempre pensaba en ella.
Miraba el Techo un poco desconsolado, Enserio quería que esto termine, quería volver a verla y Besarla, abrazarla y decirle que la amo con todo mi corazón... ¡Pero maldición!, Ella me odia, no me quiere, me detesta ¿Enserio el destino quería esto? Si es así... ¿Jamás la volvería a ver? ¿Jamás la volvería besar?, No la volvería a tocar, no la volvería a escuchar... Creo que darme por vencido era lo Mejor, intentar superarla, Intentar sacarla de mi mente y corazón... Pero, la pregunta era ¿Cómo?
y... ¿Qué tal si la llamaba? ¿Qué tal si intentaba que al menos volvamos a ser Amigos?, No, claro que No... Ella hace tiempo me dijo que Le era difícil perdonar, y sobre todo una traición... lo Peor, es que cree que yo la utilice, que yo la traicione.
Mis pensamientos fluían como un Rompecabezas. Todo desordenado, tenía que ponerlos en su lugar correcto porque si no, no encajaría... Estaba dispuesto a llamarle, a Hablarle y si eso no resultaba... La superaría, Lo haría, Aunque me costase toda una vida yo la superaría.
Corrí hacia la Sala y sin pensarlo agarre el teléfono que estaba sobre el Mueble junto el Sillón, me senté en él y marque el número de la casa de Taylor... Rogaba que contestase su Madre, Asi al menos planearía que decirle a ella, ya que en estos momentos mi cabeza estaba hecha un lío.
—¿Hola?—mi boca se cerro, un gran nudo se formo en mi estómago. Me había quedado paralizado al Escuchar su voz, Al intentar hablar temblé... no pude pronunciar nada. —¿Hola? —volvió a decir, su voz resonó en mis oídos... Quise abrir mi boca, mas me quede en silencio.
... el simple silencio... Podía escuchar su respiración atreves del teléfono, y Ella no colgaba, no lo hacía. Quise volver a hablar, pero esta vez solo se escucho un simple tartamudeo de mi parte, no sabía porque mis ojos se empezaban a cristalizar... mi corazón temblaba, y ella solo no decía nada.
—¿Hola? —volvió a repetir... ya pude sentir como una Lagrima recorrió mi mejilla, su voz, su hermosa voz; Era ella... Era Taylor.