Atrapado en la SkullGirl

Capítulo 37: Beowulf al rescate.

Finalmente, Valentine decide aceptar la ayuda de Peacock para que pudiera liberarse del control que tenía ante la SkullGirl quién era su amiga, el cuál se había convertido en la SkullGirl para acabar con aquellos que hayan maltratado y machacado a su mejor amiga, ese ha sido el propósito de Marie Korpel de convertirse en la SkullGirl, para vengan a Patricia de lo que alguna vez le habían hecho aquellos asesinos que no tuvieron piedad ante su presencia sin importar que incluso era menor de edad, que incluso no tenía la culpa de nada. Pero ahora piensa que Michael trabaja para los Medici y eso hay que corregirlo, por culpa de las palabras de unos policías tienen que pasar por este dilema, si tan solo esto nunca hubiera pasado, entonces todo esto no habría pasado y simplemente Michael hubiera simplemente haber vuelto a su casa y poder ver a su madre enferma. Pero ahora, Michael necesitaba toda la ayuda posible para poder cumplir ese objetivo... Han pasado hasta meses para que este día llegada, y todo comenzó con solo caer en la basura de los Medici, ese sería el inicio del fin... Ahora que ninguna chica de las SkullGirl no están persiguiendo a Michael con el propósito de matarlo, ahora solo faltaba Marie quién es la más importante y que bajo ninguna circunstancia debe acabar con Michael.

Peacock llevo a Valentine rumbo al estadio donde siempre anda Beowulf, él ex amigo de Annie, el plan era más o menos el siguiente, pero será Peacock que lo explique.

Valentine: ¿Por qué estamos aquí, si sabes que la catedral esta del otro lado, no?

Peacock: no vamos por ella... Aún... tenemos que convencer a este de que se nos una a la causa... Traidora... ¿Qué, pensaste que no me iba a dar cuenta que eso de los "anti-SkullGirl" es solo una vil mentira?

Valentine: ugh... De seguro lo descubriste por qué trabajaba con el doctor Brain.

Peacock: si, esos inventos solo eran parte de una sucia estrategia para que no sospechadamos de ustedes, pero ahora eso no es relevante.

Valentine: ¿entonces por qué lo mencionas?

Peacock: por qué no lo voy a olvidar... Además de ese viejete ya se encargo mi grupo.

Valentine: ya se me hacía raro el hecho de que no estuvieras con ellos.

Peacock: descuida, volverán cuando menos lo esperes... De momento, es mejor reunirnos con él para que nos ayude.

Valentine: pues no será difícil porque de aquí lo veo. *dice apuntando a Beowulf comiendo helado mientras estaba echado en el cuadrilátero mientras cantaba una horrible canción de quién sabe quién*. Ugh canta peor que ese tipo que junta una fruta con otra... ¿Cómo se llamaba? Ya ni me acuerdo, pero carajo que fastidioso... ¡¡¡Y LO PEOR ES QUE SE VOLVIÓ POPULAR!!!

Peacock: Ya déjate de hablar y vayamos a con él. *Ambas se acercan a beowulf quién después notan que esta usando calzoncillos que parecen pantalones con líneas rojas y un color blanco*. Cielos y después se quejan de que yo uso estas cosas de abuela.

Beowulf: Estoy solo... No tengo a nadie a mi lado... Solo solito... Sin compañía de nadie al mi alrededor... *comiendo helado*.

Valentine: ey niño llorón, déjate de llorar y levántate y ponte pantalones cielos...

Beowulf: Lo siento señoritas... *se pone los pantalones y se levanta no con mucho animo que digamos*. ¿Quieren un autógrafo o algo así?

Peacock: digamos que vinimos más que por eso... Vinimos por ti.

Valentine: a pesar de tu estado... con esos músculos que tienes los desperdicias lloriqueando aquí.

Peacock: Valentine, concéntrate.

Valentine: no puedo evitarlo, es que simplemente se ve ridículo.

Beowulf: bueno si... Estoy actuando así porqué no puedo me siento mal por Annie ¿de acuerdo?

Peacock: ¿de verdad, qué pasó entre ustedes exactamente?

Beowulf: bueno éramos buenos amigos, hasta que en mi pelea, pues la fama se me subió a la cabeza y pues... Bueno nuestra amistad se rompió al punto de no querer verme y yo tampoco.

Peacock: bueno, te diría algo para que te motives a recuperar esa amistad perdida, pero que lo haga ella.

Valentine: ah chinga... ¿Por qué yo?

Peacock: para que demuestres que realmente tienes corazón entre esas pal de... ejem... ya sabes.

Valentine: pechos, se llaman pechos.

Peacock: con ese tamaño, no lo parece.

Valentine: deja de fijarte en eso, es raro... Bueno... escucha viejo que se disfraza de lobo... no soy buena dando consejos, pero si se esto... Si la perdiste por la fama, debes olvidarte de eso, y concentrarte en tus amistades antes de la fama, porque eso es lo que más vale, si puedes tener un montón de fanáticos, pero... ¿acaso esos fanáticos te quieren ver para salir, o para comer, o para pasar el rato o tener una buena relación? Dime algo que hayan hecho tus fans que no sea pedirte solamente autógrafos.

Beowulf: bueno... yo...

Valentine: ahí esta, perdiste a alguien y te lamentas de eso, lo acabas de hacer de la manera más ridícula posible, pero se nota que la quieres recuperar, y si quieres hacer eso, demuéstralo sin lloriquear.

Beowulf: tienes razón... Llorar no sirve de nada, si de verdad quiero recuperarla, debo ser el amigo que alguna vez fui... gracias enfermera provocativamente bien vestida, me has dado motivos para que el gran Beowulf vuelva a hacer lo que alguna vez fue antes de enfrentar al imparable grendel. Gracias. *trata de darle un abrazo, pero ella lo detiene con su mano*.

Valentine: eeeh... ahórratelo para tu amiga, no conmigo.

Beowulf: bueno... claramente debo ganarme tu confianza para que puedas aceptar los abrazos de el gran Beowulf.

Peacock: si dejarás de presumir tu nombre por 5 segundos, podrías recuperarla.

Beowulf: claro... Lo siento...

Valentine: bueno... ya estamos todos ¿no?

Peacock: aún no... solo falta uno más para que nos ayude.

Valentine: ah genial... ¿dime de quién se trata?

Peacock: el viejo Big Bang... pero debemos esperar 5 segundos para ir con él...

Valentine: esperar 5 segundos para...

Avery: CUAC ya llegamos jefe.

Andy Anvil: si, derrotar al chico copión de cosas originales no fue cosa difícil.

Peacock: bien hecho, sabía que podía contar con ustedes... bueno ahora si podemos irnos definitivamente.

Valentine: me imagino que después de esto, ya podremos ir a la catedral ¿no?

Peacock: tienes mi palabra.

Beowulf: bien, vamos de una vez a por ese tal Big Bang.