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Guillermo no se despertó hasta tarde, miro a los lados, Lionel ya no estaba junto a él. Se levantó para mirar la hora en su teléfono, era tarde, 2:00 p.m, había dormido mucho. Entro al baño para ducharse, peinar su cabello y por último cepillar sus dientes.

Con su ropa deportiva, encontrándose más cómodo, al momento de bajar ya se encontraba vacío, al instante de entrar encontró a Messi limpiando unos platos, aún no se había percatado de la presencia del alfa dominante, se acercó para abrazar la espalda de Lionel, quien dio un pequeño salto.
-Uh, buen día.-Limpio sus manos con una toalla, girándose para abrazar a Guillermo.
-Tengo hambre.-Poso sus manos sobre las mejillas del menor, el cual sostenía su cintura.
-Es obvió, no desayunaste.-Al momento de que Ochoa se alejara, aprovecho para dejar una zape en su cabeza, buscando comida para calentar.

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Guillermo tuvo que comer en la sala, porque al igual que él, Lionel había comido algo tarde y no tenía mucho desde que lo hizo, así que lo espero. El mayor se encontraba sentado, con la cabeza del alfa recargada sobre su pierna.
-¿No crees que hemos tenido mucha confianza este mes? -Llamo la atención del menor, quien se giró a verlo y alzarse de hombros.
-¿Por qué lo decís?-Fijo su atención en él, por estar atento a la televisión. -Es mejor, tus feromonas son de mayor ayuda.-El alfa dominante asintió y siguió comiendo tranquilo.

Al terminar de comer, se levantó para ir a la cocina y limpiar su plato, no volviendo sin preparar un plato con frutilla para Lio. Regresando a la sala y ver a Messi acostado encima del sofá, abrazando un cojín, se acercó lentamente percatándose de que ya se había dormido.

Se sentó a un lado de él, sostuvo su teléfono, tenía una llamada perdida de Karla, suspiro y salió al patio delantero, para marcar al número de su esposa.
-¿Para que llamas?
-No creas que te podrías librar de esto tan fácil, de una vez te comento, que si quieres el divorcio, está bien, no te estaré rogando, Francisco.
-Si no te interesaba este matrimonio, esto pudo haber acabado hace años, y jamás te hubiera marcado.
-La verdad me da igual, aún puedo borrar tu patética marca, pero si te diré que Lucciana es tu hija, y en dos meses se empezará el juicio para saber quien obtiene la custodia de ella, así que espero volverte a ver aquí para febrero, ¿bien?
-Confiaré en eso, y no faltaré, porque se trata de mi hija de sangre, no como el cachorro que llevas.
-Hasta entonces.

Termino por escuchar los tonos al terminar la llamada, sostuvo su teléfono con fuerza entre sus dedos, sentía demasiada rabia, apenas pudo mantener un habla decente, para que no se notara aquellas ganas de llorar, realmente pensaba que su omega lo amaba como él a ella, hasta aquel día.

Tal vez ya no podría recuperar a Karla, aunque si podría tener a su pequeña niña, de jerarquía aún no conocida, pero no tenía sabía como se lo contaría a Lionel, posiblemente este devastado con la idea de que el alfa con el que se involucró, estaba casado.

No se había percatado de que las lágrimas ya rodaban por sus mejillas, rostro levemente rojo, con sus ojos cristalizados, estaba claro su asegurado divorcio.

Se apresuró a limpiar sus mejillas al escuchar la puerta, abrirse, girándose para ver a Lionel, no se dio cuenta de que seguía en pijama y había conseguido una cobija para envolverse en ella, se acercó al alfa dominante algo adormilado.

-¿Qué haces acá afuera?, vení, hace frío, pelotudo.-Guillermo rio en bajo al escuchar su insulto, asintió y se acercó para cargarlo, alertando un poco.-PERO, ¿QUÉ HACES?, bájame, no soy ningún omega.-A pesar de que se quejaba, no hacía nada para evitar que lo siguiera cargando, al contrario, había rodeado los hombros con sus brazos.

Guillermo formó una sonrisa burlona ante las acciones del otro alfa, únicamente decía no querer, pero era obvio que no es así.

-No parece molestarte, aparte, te ves tierno.-Dio un beso en la mejilla de Lionel, que hasta ese punto no le importaba, aun tenía mucho sueño, oculto su rostro en el cuello de Ochoa, sorprendiendo al mismo por haberse dormido rápidamente entre sus brazos.

Guillermo no podría estar más enternecido con el menor, se adentró en el lugar para cerrar la puerta, porque efectivamente, estaba muy frío, y no quería que Messi se enfermara empezando su cinta de tan solo un mes.


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Aunque el alfa dominante siempre se mostraba tranquilo y sereno al momento de estar con el alfa menor, al igual siendo algo cariñoso con el mismo, con la intención de no hacerse notar mucho el estrés que pasaría después de febrero, por los papeles de divorcio, junto al proceso de custodia de Lucciana. Aterrándole la idea de que sea Karla quien gane el juicio, porque la probabilidad que ella se quede con la niña, podría ser de un 50% porque es la madre, pero el tenía la ventaja de que su esposa fue infiel, y tendría esa posibilidad de ser quien el que consiga la custodia.

Porque estaba claro, que su esposa no tenia mínima idea de que su esposo tiene un tipo de amorío, para no decir amante, como ella, que ya estaba descubierto que era el hermano de Guillermo, pero si se llega a descubrir que tanto Ochoa, como su esposa, fue infiel, sería tomado en su contra, y no podría darse el lujo de exponerse con Lionel, pero por ahora estaba bien.

Porque únicamente eran ellos dos en la mansión de Messi en Barcelona, pero un pequeño tropiezo, se podría dar a conocer su extraña relación de alfas, y siendo el argentino una celebridad mundial, llegaría a los oídos de su omega, sería una catástrofe para Guillermo.

Ya era enero, y no se dignaba a regresar a donde su esposa, que para el mes que llegaría, dejaría de serlo, aún no la podía dejar ir, después de diez años de matrimonio, lo había bateado como si fuera una pareja de unos meses, no tuvo corazón, por la forma tan tranquila en la que pedía el divorcio.

No tenía sentido, como si de la nada el amor que había entre alfa y omega, hubiera desaparecido desde hace tiempo, tal vez aquellos años en los que su esposa se revolcaba con el hermano de Guillermo, y simplemente se hacía la víctima.

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Nota:
Hola, gente hermosa, intentare ya no hacer tanto relleno a la historia para que no quede tan larga, entonces algunas cosas las adelantare, entonces es posible que simplemente narre lo que pase algunos meses que no quiero que tengan relevancia, ahre, pero bueno, espero que les siga gustando hasta que la termine, porque la verdad, no quiero pasar más de 30 capítulos.
Pero es todo, se les ama.

Fuera de canchaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora