Obssesive. [EN EDICIÓN].「KᴏᴋᴜKᴀɪ」

Final.

Siete (7) años habian pasado ya, los pequeños gemelos ya no eran tan pequeños ya tenian siete años y Kaigaku aun cree que fue ayer cuando sus pequeños eran tan solo unos recién nacidos.

Kokushibo aunque lo hubiera deseado, no pudo pasar el tiempo que quería con sus queridos hijos, ya que se la pasaba trabajando y con aquello se perdió los seis meses de los pequeños. En esos seis meses ellos ya sabían identificar a sus padres abuelos y familiares, podían sentarse y ya comenzaban a balbucear cosas, en esos seis meses Kokushibo tuvo que salir de viaje durante seis meses a hacer bueno... "Cosas de hombres", ya saben, matar gente, torturar y demás. Cuando volvió a casa los pequeños lo veían como un completo desconocido y se asustaban cada que esté se quería acercar a ellos, y cuando le decía a Kaigaku que sus hijos le odiaban Kaigaku le respondía de una manera muy obvia, le dijo algo como:
«"Idiota, es muy obvio que te tengan miedo. Desapareciste de sus vidas en su primer mes y luego te fuiste durante seis meses. Eres un completo desconocido para ellos"».

Pero Kokushibo dejó de lado la mafia por un tiempo, ya que, quería pasar más tiempo con su familia, con su esposo e hijos.

Kaigaku por su parte crío a sus pequeños, durante esos seis meses, completamente solo, pero se sintió feliz, cuando Kokushibo le dijo que dejaría la mafia por un tiempo y se quedaría con ellos.

Muichiro y Yuichiro observaban curiosos como era que su padre, Kokushibo, no dejaba de abrazar a su un"Mamá", Kaigaku, mientras le repetía una y otra vez algo que ellos no entendían, le decía algo así como: «" Vamos, Kaigaku~. Llevemos a los niños con mis padres, así nos quedamos solos y podemos hacer lo nuestro. ¡No lo hemos hecho desde hace uno o dos años! "». Ellos fruncieron el ceño, ¿Por qué su padre quería quedarse a solas con mamá?. Se entristecieron, ¿Acaso sus padres ya no los querían, y por eso los quieren llevar con los abuelos?.

Corrieron así Kaigaku y cada uno abrazo ambas piernas de este. Los adultos arquearon una ceja observando a los pequeños.

- Mamá... ¿Ya no nos quieren?. -Preguntaron los gemelos con los ojos llorosos y con ellos observaban a Kaigaku.

- ¿Qué?. -Solto Kaigaku extrañado, se separó de Kokushibo y se arrodilló frente a sus hijos- ¿Cómo que ya no los queremos?, nosotros los amamos. -Dijo acariciando con ambas manos las mejillas de los pequeños.

- Pero... Papá nos quiere llevar con los abuelos y se quiere quedar solo contigo. ¡¿Por qué se quiere quedar a solas contigo?!. -Dijeron señalando a Kokushibo.

Kaigaku sintió calor en su rostro, sus mejillas se habían tornado rojas al igual que sus orejas, por instinto se cubrió el rostro con sus manos.

- ¡Idiota, te dije que aún no haríamos nada!. -Dijo avergonzado volteando a ver a Kokushibo, el cual se había posicionado detrás de los pequeños y colocó cada una de sus manos en uno de los hombros de los gemelos.

- ¿I-Idiota?. -Repitió Muichiro llevándose su mano derecha al mentón mientras pensaba.

- ¿"Idiota"?, ¿Podemos decir esa palabra, mamá?, ¿O solo tú la puedes decir?. -Dijo Kokushibo fingiendo curiosidad al igual que Muichiro y Yuichiro, bueno, ellos si tenían curiosidad.

- ¡S-Si!, digo... ¡No, no pueden decir eso, por qué es una mala palabra!. -Hablo avergonzado. Kokushibo, Muichiro y Yuichiro rieron al ver lo roja que se encontraba la cara de Kaigaku.

- Bueno, nosotros los amamos mucho, y nunca lo vamos a dejar de hacer, por qué son nuestros lindos bebés. -Dijo Kokushibo "Atacando" a besos las mejillas de los gemelos.

En eso aprovecho para cargarlos a ambos en brazos, y sin más los llevó a la sala donde se sentaron los tres en el sofá. Kaigaku los siguió y se sentó a la par de ellos.