CAPITULO 24

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Durante toda la tarde del sábado se la pasó cocinando para llevarle comida fresa a Huening al hospital, ya había pasado un día desde que estaba allí y ya se había quejado del sabor de la comida, así que Beomgyu aprovechó para cocinarle comida rica que sabia que a Huening le gustaría.

Mientras dejaba que los muffins se hicieran en el horno, se mensajeaba con su madre preguntándole algunas cosas sobre cocina.

En un momento la puerta de entrada se abrió y la voz de Yeonjun anunciando su llegada se hizo escuchar. Entró a la cocina acercándose a Yeonjun al peli negro dejando un beso en su frente.

- Recibí un mensaje de Kai, dice que ya se aburrió de estar en el hospital - soltó riendo.

- A mi me llamó, hablamos por tres largas horas.

Yeonjun dejó salir una risa por lo bajito y observó a su alrededor para ver en qué podía ayudar al menor. Su vista se detuvo en el horno que ya se había apagado, se colocó los guantes y abrió el horno despacio.

Tomó la bandeja con cuidado y la puso a un lado, en un lugar donde nadie pudiera quemarse con el metal caliente. Se quitó los guantes y los dejó a un lado ahora empezando a lavar los utensilios que Beomgyu había utilizado antes.

Mientras el peli negro se tomaba un descanso y tomaba un sorbo de agua del vaso que tenía al lado. Por un momento se giró en su lugar y sonrió al ver a Yeonjun. Su camisa estaba ligeramente arremangada hasta sus codos y aparentemente no traía una camiseta extra debajo de la camisa que tenía. Y cómo la camisa era blanca pues se transparentaba mucho dejando ver su formada espalda.

Beomgyu tomó su celular y le saco un foto rápidamente, dejó salir un quejido al darse cuenta que el sonido estaba activado y que Yeonjun lo había escuchado, vio al mayor girarse con una sonrisa de lado.

- Cobró por cada foto que me tomes.

- Y eso desde cuando? Cuanto quieres? - dijo el menor siguiéndole la corriente al peli azul.

- Quiero... bueno deseo muchos besos tuyos.

Yeonjun se acercaba sigilosamente hacia Beomgyu, se manera lenta y calmada parecía cómo si estuviese apunto de capturar a su presa por la forma en la que se acercaba al menor. Beomgyu sintió sus mejillas colorarse y no dudó mucho en taparse el rostro y darse la vuelta dándole la espalda al mayor.

Justo en ese momento sintió las manos de Yeonjun rodear su cintura y luego sintió cómo su cuerpo era pegado al del mayor. Un jadeo de sorpresa salió de los labios de Beomgyu por el inesperado toque.

Yeonjun plantó un suave beso en el cuello del menor sintiendo cómo su piel se estremecía ante aquel beso. Sabía que el punto débil de Beomgyu era su cuello así que quería molestarlo un poco.

Volvió a dejar varios besos por todo su cuello sintiendo cómo Beomgyu tomaba sus manos y las apretaba ligeramente, esa era su señal para detenerse.

- Yeon... Detente - dijo intentando hacer que Yeonjun se detuviera, cosa que no sucedería.

Yeonjun ahora le dio la vuelta al cuerpo del chico y sonrió al ver lo rojo que estaba su rostro, sus ojos pedían a gritos que lo besara y definitivamente eso haría Yeonjun.

Tomó el rostro del chico entre sus manos y lo besó sintiendo los brazos del menor alrededor de su cintura. Beomgyu subió sus manos hasta la espalda de Yeonjun para así poder profundizar el beso.

Yeonjun entendió el mensaje y ahora bajo sus manos del rostro del chico, puso una mano en su cintura y la otra la puso detrás de la cabeza del menor. Sus lenguas ahora jugaban entre sí y las manos de Beomgyu se movían tocando el cuerpo contrario.

Ambos se separaron cuando sentían que ya no podrían aguantar más besándose debido a la falta de aire. Al separar se quedaron observando mientras sus pechos subían y bajaban. Beomgyu sonrió y el mayor no pudo evitar sonreír también y dejar un suave beso en la punta de la nariz de Beomgyu.

Lo atrajo a su cuerpo y lo abrazó acariciando suavemente su espalda. Beomgyu solo mantuvo sus manos en el pecho de Yeonjun y sus ojos ligeramente cerrados sonriendo. Se sentía el más afortunado del mundo por tener a yeonjun en su vida una vez más.

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- ¡ Vinieron !

- Claro que vendríamos, ¿ Por quien nos tomas? Además te hice comida fresca que se que amarás.

- Eres el mejor Hyung, jamás dude de ti - dijo con una linda sonrisa en sus labios.

Dejó la comida en la mesa que estaba al lado de la cama de Kai y abrió todo poniéndolo en posición para el menor, una vez lo hizo movió la mesa hacia la cama y la posicionó frente a Kai.

El menor abrió los ojos con alegría al ver toda la comida que el peli negro le había preparado y no pudo evitar en agradecerle miles de veces por tomarse el tiempo de cocinarle comida fresca.

- Esto está delicioso Hyung, ¡ Muchas gracias!

- Sabía que te gustaría, la receta de mamá nunca falla.

Mientras el menor comía, Yeonjun le sacaba conversación y Beomgyu acomodaba las cosas que aparentemente Soobin le había llevado. Solo eran unos cuentos libros, un cuaderno de dibujos, lápices de carbón y de colores y también su consola portátil.

De esa manera no había forma de que se aburriera en estos dos o bueno un día y medio que le quedaba en el hospital.

Y hablando del rey de roma justo ahi entró Soobin con una bolsa llena de probablemente comida o más cosas para que Kai se entretenga mientras esa solo.

- Oh, ¿ Hace cuanto están aquí? Pensé que vendrían más tarde - dijo Soobin dejando la bolsa sobre sobre el sillón.

- Hacen treinta minutos exactamente.

Soobin asintió y se acercó a Kai y lo observó con cuidado, Beomgyu y Yeonjun se miraron algo confundidos por la repentina acción del mayor. Vieron cómo Soobin pasaba su mano por el pelo de Kai peinándolo suavemente para diferentes lados.

Kai parecía tranquilo y ni se inmutó al sentir el toque del mayor en su pelo.

- Tú pelo esta bien, ¿ No se ha caído nada mientras me fui? - preguntó viendo al menor negar - Bien es bueno saberlo, quiere decir que ya no estás tan estresado.

Soobin miro a los dos chicos del otro lado con cara de confusión y río antes de empezar a explicarles.

- Kai suele estresarse mucho y ayer si estrés fue más alto de lo normal cosa que lo hizo perder algo de pelo, por eso me aseguró de que no se le salga pelo cuando toque su cabello.

Ambos asintieron después de la explicación y rieron al ver a Kai imitar todo lo que Soobin decía.

𝐘𝐎𝐔 & 𝐌𝐄 ── Yeongyu ² Donde viven las historias. Descúbrelo ahora