Capitulo 4

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¡DING DING!

¿Que demonios? —Akutagawa pestañeaba ligeramente, escuchaba el timbre de la puerta, pronto, escuchó la puerta abrirse y se extrañó por escuchar una voz masculina, su hermana Gin nunca traía chicos a la casa. Sintió como algo se movía debajo de él, alzó su cabeza y vió algo que lo dejaría sin palabras.

Estaría encima de Atsushi, tan acurrucado como un bebé y aún tenía una de las manos de éste en su cabeza —¿Que hace el aquí? —pensó en voz alta, a lo que tuvo una respuesta —Vino a verte, estaba preocupado por tu ausencia en el instituto— exclamó su hermana en un tono bajo, y se acercó a su hermano que aún estaba atrapado en el abdomen del albino.

El.. ¿Me cuidó? —preguntó Akutagawa, mientras dirigía su mirada hacia Atsushi; profundamente dormido, como un ángel que vino a salvarlo y se agotó tanto que tuvo que tomarse una siesta —Lo hizo, y por lo que veo son muy buenos amigos~ —señaló Gin, mientras soltaba una risilla y se agarraba el abdomen con sus manos.

Cállate, Gin —regañó el azabache, mientras hundía su cabeza en el abdomen del albino para ocultar su sonrojo, algo que hizo con lentitud, ya que no quería despertar al chico.

¿Y quien vino ahora? —preguntó el azabache mientras recobraba la compostura y alzaba lentamente la cabeza.

Es tu profesor, Osamu Dazai —hizo un gesto elegante, el mismo que hacía su hermano al dejar entrar a Atsushi y dejó ver al castaño con una sonrisa pícara mientras entraba a la habitación.

Akutagawa-kun, no esperaba que tuvieras ese tipo de relación con Atsushi~ —burló el castaño al ver tal escena tierna y muy cercana de los dos estudiantes —Es sólo un compañero —refunfuñó el azabache e intentó zafarse del agarre de albino pero nuevamente no tuvo éxito.

Gin salió de la habitación para dejarlos solos y sonó la puerta poco después, dando señal de su retirada.

No tienes por qué explicarme, tan solo con ver a Atsushi-kun tan preocupado ayer, pude saber lo que pasaba —aclaró Dazai, para después salir de la habitación y despedirse con un gesto de su mano, dejando solos a los dos estudiantes.

¿R-ryū..? —murmuró Atsushi, poniendo alerta al azabache, era la primera vez que alguien lo llamaba por su nombre, además de su hermana Gin, y que para rematar, un lindo apodo que sonaba extrañamente bien de la voz de aquel chico.

Un silencio se apoderó de la habitación, mientras que el albino estaba recién recobrando la conciencia y parpadeaba seguido, para al final de unos pocos minutos, despertar y darse cuenta del atrevimiento de dormir con Akutagawa, acariciar su cabello y dormirse con él, además del hecho de haberle llamado por un apodo a partir de su nombre.

¡Y-yo lo s-siento! —balbuceó e inmediatamente soltó una cachetada accidentalmente a la mejilla del azabache, aturdido quedó después de esto.

—¡Y-yo! —intentó explicar nuevamente, su voz hacia notar el gran nerviosismo y culpa que sentía en aquel momento, además de haberle dado accidentalmente un golpe algo fuerte al rostro de Akutagawa —¡Cállate! Ya lo sé todo, no te molestes en explicarme —gritó el azabache, irritado por los tartamudeos del contrario, esperando que se callase y lo dejara hablar, o tal vez y al intentar explicar le dé una cachetada él.

Atsushi se quedó quieto y bajó la cabeza con tristeza, sabía que algo malo iba a pasar —No te preocupes, estoy mejor soltó un suspiro para después hablar —Pero.. ¿Podrías quitar tus manos de mi cabeza? sin darse cuenta Atsushi había puesto sus manos nuevamente en la cabeza de Akutagawa e inmediatamente las retiró, no tuvo que pensar dos veces para saber que si seguía así, le darían un golpe de "agradecimiento".

꧁ೋ•✧๑♡• 𝓔𝓷𝓪𝓶𝓸𝓻𝓪𝓭𝓸𝓼 - 𝓢𝓱𝓲𝓷 𝓢𝓸𝓾𝓴𝓸𝓴𝓾  •♡๑✧•ೋ꧂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora