Ángel.

6-En la Tierra no hay solo humanos.

No me creo un monstruo ni mucho menos, no sabéis cuantas criaturas raras hay por el mundo sin que ustedes sepan de su existencia, y no por eso son "monstruos", simplemente son diferentes, claramente yo me he encontrado con muchas de ellas, al tener mis sentidos más desarrollados, que los de un humano, puedo identificar a una estando a varios kilómetros alejada de mí, os podría hacer incluso una lista, podríamos empezar con los más abundantes, que son los hombres lobo y, claramente, los vampiros, también hay, en muy poca cantidad, algo a lo que llaman "mutante", que es la "persona" capaz de transformarse en cualquier ser vivo con solo verlo; y eso no son monstruos, los verdaderos monstruos son los que se matan unos a otros, siendo de la misma especie, por guerras inútiles, conflictos interraciales o culturales y por la religión; no digo que yo no haya matado a otro vampiro, sin ir más lejos fue a Tyson; mi primer objetivo, una vez convertido en esto, fue buscar a mi "mejor amigo" y pedirle explicaciones de lo que había hecho y de porque me había abandonado sin explicarme nada de lo que esto conllevaba, me costó un par de años seguirle la pista, se movía de un lado a otro y no se quedaba mucho tiempo en el mismo lugar,  hasta que por fin lo encontré cruzando la frontera entre Estados Unidos y Canadá.

-¿Por qué me convertiste en esto?, casi mato a mi madre- digo con un tono bastante serio y casi gritando.

-Porque te dije que existían los vampiros y no me creíste además porque puedo hacerlo y ni tú ni nadie me lo podía impedir- dijo con esa media sonrisa de satisfacción.

-Y no pensaste que podía matar a mi familia- digo realmente enfadado.

-Esa era mi intención pero, a mi pesar, te contuviste más de lo que pensaba.

Esas últimas palabras se clavaron en mi mente y la furia se apodero de mí, me abalance contra él y le cogí por el cuello, pero rápidamente me quitó la mano y me empujó haciendo que me cayera al suelo y rompiera el mismo, se dio la vuelta quedándose de espaldas a mí, pero cuando se disponía a andar me levante, lo más rápido que pude, y agarrándole por las piernas lo tiré al suelo pero, sin darme cuenta, se volteo quedando frente de mí, y me empujó con tal fuerza que quedé a más de diez metros separado de él, se levantó, se sacudió la tierra y se echó a andar sin importarle nada de lo estaba pasando con una actitud, verdaderamente, arrogante, eso hizo que me enfureciera aún más, me eché a correr, subí por su espalda en menos de dos pasos y me coloque con los pies encima de sus hombros, me puse de cuclillas, le agarre la cabeza y, sin darle tiempo a reaccionar, tiré de ella con toda mi fuerza  haciendo que se despegara del resto del cuerpo; me puse a escavar dos agujeros diferentes, uno para la cabeza y otro para el resto del cuerpo, una vez terminé de escavarlos, metí sus respectivas partes en cada uno de ellos y los enterré, una vez acabe me fui de allí sin mirar atrás, dejando, junto con Tyson, toda mi vida pasada y las personas que a ella pertenecían.