Ángel.

23-Temibles verdades.

-¿Qué haces aquí?- le digo a Briana en un tono bastante seco.

-El otro día desapareciste sin más, quería saber si estabas bien.

-Ves que si lo estoy, ahora si me disculpas estoy ocupado- digo mientras intento cerrar la puerta.

-Espera, a ti te pasa algo- dice ella mientras se cuela dentro de mi casa.

-No, ahora vete.

-Quién tocó la puerta- dice la voz de Melannie desde el salón.

En ese momento Briana y yo cruzamos las miradas y ella se dirige hacia el salón.

-¿Quién eres?- le pregunta Briana a Melannie.

-Melannie ¿y tú?

-¿Y que haces aquí?- dice Briana con un tono bastante serio.

-Siamon quien es está petarda- dice levantándose del sofá .

-Cómo que petarda- dice Briana dandóle un empujón a Melannie.

Melannie ni se inmuta tras el empujón de Briana pero, acto seguido, coge a esta por el cuello y la levanta.

-No vuelvas a tocarme.

Briana intenta zafarse de su agarre pero es demasiado fuerte para ella.

-Sueltala- digo mirando mal a Melannie pero esta hace caso omiso- QUE LA SUELTES.

Melannie suelta a Briana y esta cae al suelo mientras se soba el cuello.

-No la vuelvas a tocar- digo mientras cojo de cuello a Melannie y la estampo contra la pared.

-Oh venga ya, no me digas que te gusta.

-Eso no te importa- digo y la tiro contra el suelo rompiendo este.

Melannie saca sus colmillos e intenta atacarme pero yo la esquibo fácilmente, uno tras otro sus golpes van a parar a la nada hasta que me canso, me pongo unos guantes y cojo una cadena de plata que siempre llevo en el bolsillo, se la enredo en el cuello y ella, automáticamente, para.

-Tienes que empezar a controlarte- digo haciendo más fuerte el agarre.

-¿Qué...es...esto?- dice con un hilo de voz, a causa de la plata que le quema.

-Plata, una cosa que nos hace debiles a los vampiros- digo apretando un poco más- ahora te vas a quedar tranquilita y vas a guardar los colmillos.

-Sí...pero quitame...esto ya.

Se lo quito y ella por instinto se lleva las manos al cuello, las heridas le sanan rápido y ya no las tiene.

-No me digas que ella también es cómo tú- dice Briana con un hilo de voz.

-No me digas que ella lo sabe- dice Melannie mientras me mira dudosa.

-No tendrías que a verla visto- le digo a Briana.

-¿Por qué no?.

-Es muy largo de explicar.

-Tengo tiempo.

-Y yo, explicamelo a mi también- dice Melannie acercandose a nosotros.

-Bueno...una ex mía se ha dado cuenta que...me gustas Briana y quiere matarte.

-A mí, ¿por qué?

-Porque piensa que así me va a recuperar...

-Y yo que pinto en esto- dice Melannie interrumpiendome.

-Pues que he decidido matarla yo primero y necesito ayuda.

-Pero si tu eres más fuerte que yo.

-Sí pero ella lo es aún más.

Briana se echa a correr, llorando, abre la puerta y sale, yo voy detrás de ella hasta alcanzarla.

-Dejame- dice mientras intenta zafarse de mi abrazo- no eres bueno, como puedes decir que la vas a matar y quedarte tan agusto.

-Ella amenazo con matarte a ti primero, no lo puedo permitir, no te puedo perder como a Dakota.

-¿Quien es Dakota?.

-Una amiga a la que mató- digo mientras aprieto los puños al recordarlo.

Briana me coge la cara para que la mire a los ojos, esos ojos canelos tan bonitos que tiene, me mira como diciendome que todo va a estar bien, eso me reconforta, sentir el calor de alguien y su preocupación hacia mí; no puedo aguantar más y la beso, me apodero de sus labios que se convierte en un beso apasionado que ella me sigue, noto cómo se queda sin respiración y me separo de ella.

-Vuelve a casa- le digo en un susurro, ella solo asiente, luego me da un beso en la comisura de los labios y se va.