"¿Por qué no me tenéis miedo?
¿Por qué os preocupáis por mí?"
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Una niña entrenada para matar desde que nació es enviada en una misión para derrotar a los Volturi, pero no se atreve a h...
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Horas después de ayudar a Caius en el tribunal, me acosté en la bañera grande de mi baño, sumergiéndome en el aroma de lavanda que emana de los jabones elegantes que decidí verter en el agua.
Antes de irme, ayudé a Caius con tres casos más, dos de los cuales terminaron con vampiros decapitados. El otro fue solo un error de juicio de algún tipo.
Por mucho que disfruto ayudar, me cansé y tuve hambre, así que tuve que irme. Después de mi baño, planeo irme a la cama, dado que es casi la una de la mañana.
Descanso la cabeza hacia atrás y cierro los ojos, respiro lentamente los aromas calmantes y dejo que el agua tibia se acumule sobre mi cuerpo.
Pero, justo cuando empiezo a sentirme relajada, la puerta de mi habitación se abre y una voz familiar me llama por mi nombre.
Una voz que no he oído en semanas. Jadeo para mis adentros y me apresuro a salir de la bañera, tiro una bata de seda sobre mi cuerpo expuesto y salgo rápidamente del baño.
Y ahí está, sentado al pie de mi cama, luciendo tan encantador como siempre.
"Marcus". Digo su nombre con una sonrisa.
Vuelve la cabeza hacia mí y también sonríe. "¿Interrumpí algo?"
"Oh, no, estaba terminando". Me encojo de hombros y me tambaleo más cerca de él. "Entonces, mucho tiempo sin verte, ¿eh?"
"Sí, mucho tiempo sin verte". Hace eco con el ceño fruncido. "Necesito disculparme por mi ausencia, Sienna, no pudo haber sido fácil para ti".
Asiento diligentemente. "No fue exactamente divertido, pero entendí por qué no estabas cerca. Todos lo entendieron".
"¿Cómo está Aro?" Pregunta, para mi sorpresa; incluso después de que se recuperen las emociones y los recuerdos horribles, Marcus todavía quiere saber cómo se siente su hermano, a pesar de que Aro es quien creó su dolor.
"No lo sé. Hablamos hace una semana y luego... no sé nada desde entonces". Puedo sentir que mi ceño comienza a mostrarse. "Quería que lo dejaran solo, así que no lo he molestado".
Después de nuestra charla de una noche, lo visité al día siguiente como prometí, pero estaba peor que como lo había dejado, dijo que quería estar solo, parecía desesperado, así que respeté sus deseos. Eso es todo lo que realmente habíamos hablado. No hace falta decir que lo extraño cada vez más a medida que pasan los días.
Marcus inclina la cabeza hacia un lado, perplejo. "¿En serio? Hm. ¿Tal vez podríamos hacerle una visita?"
Ahora soy yo el perplejo. "¿Estás seguro? ¿Estás listo para verlo?"
Marcus parece reflexionar sobre mis preguntas por un segundo antes de asentir lentamente. "Sí, lo estoy. He hecho algunas revelaciones en las últimas semanas".
"¿Como qué?" Pregunto, interesada.
"Te lo diré en nuestra caminata para encontrar a Aro, ¿sí?" Sonríe con júbilo, una sonrisa que he echado tanto de menos.
