Prohibido Amor de un CEO, Primera Parte

Desesperada

"Elizabeth, debo irme por ahora, regresaré más tarde de acuerdo?"

Henry susurra suavemente al oído de Elizabeth quien duerme.

El sonido de una máquina conectadas a la chica alerta a los médicos quienes corren a la habitación de Elizabeth quien ha entrado en crisis.

"Que pasa?"

Cuestiona Henry.

"Está en shock la paciente!"

"Revisen sus signos ahora!"

Ordena un médico.

"Se pone pálida, baja de ritmo cardíaco!"

"Traigan el desfibrilador ahora!"

Ordena otro médico.

"Esperen, está sangrando!"

Una enfermera hace la observación cuando mueve la chica de lado.

Henry se queda quieto a un lado de la puerta debatiendo si irse o no...

"Traigan sangre ahora, debemos hacerle una transfusión urgente."

"Aguanta jovencita, aguanta."

Ruega con voz firme un médico.

Elizabeth no había presentado ningún síntoma tan extremo como ese, hasta ahora.

"Doctor según sus estudios su sangre es rara!"

Comenta un enfermera.

"Solo tenemos un par de bolsas, pero no será suficiente!"

Henry escucha todo.

"Eso no importa, hagan la transfusión ahora!"

"Comuníquese con el banco de sangre y que envíen más de inmediato!"

El médico ordena, pero Henry se le adelante.

"Yo tengo su tipo de sangre, puedo darle toda la que necesite."

El médico ignora al chico por un segundo, por lo que Henry toma con su mano la bata del médico para ordenarle.

"Soy su tipo de sangre!"

"Ahora, HAGA LA MALDITA TRANSFUSIÓN!"

Desconfiando un poco el médico le indica a una enfermera que primero realice un prueba de compatibilidad del chico con la paciente.

Henry esta tan preocupado por Elizabeth que ignora por completo su celular y la hora.

En este momento Elizabeth es lo más importante para él.

Sentado en esa silla, a la espera de los resultados de análisis de sangre, Henry piensa que Elizabeth había estado bien, pero en poco tiempo su cuerpo colapso.

Fue por lo que Emily le administró.

Lo que Emily preparó ayudó a la pronta recuperación del cuerpo de Elizabeth!

Henry está por llamar a Carolina pero la enfermera le llama en ese instante.

"Su sangre es compatible, pero solo podemos quitarle un litro de sangre por ahora."

Henry niega con la cabeza.

"No."

"Extraigan toda la que puedan, deben de hacerlo."

"Estaré bien, hágalo ya."

Exige Henry extendiendo su brazo listo para donar toda la sangre que pueda.