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¿Qué si lo había pensado?, no era necesario, la respuesta era clara.__ Todos lo llaman: el deber de los Omegas. __ Respondió Jiang Cheng. Yu ZiYuan apretó su puño sobre la tela encima de su muslo. Una creencia que hasta su hijo decidió creer...
" __ Esa maldita creencia. Ja, ¿enserió crees en eso Yu ZiYuan?. __ Bufó el Alfa hundiendo su mano en su cabellera harto de la terquedad de la mujer. __ Recuerda esto Yu ZiYuan, tu eres una Omega no un peón de beneficios. ¿No son eso los deseos de tu A-Die?.
__La decisión está tomada. __ Con firmeza, respondió la doncella. __ Será mejor que te vayas, A-Die puede descubrirte.
__En serio estas dispuesta abandonar todo lo que lograste por tu propia cuenta. __ Los ojos del Alfa buscaba la respuesta que tanto deseaba oír de la doncella. Sin embargo, mientras que él estaba perdiendo la cordura, Yu ZiYuan aparentaba no estar afectada. Su postura siempre fue segura y firme, odiaba tanto que ella tuviera esa barrera que cada vez se hacía más irrompible para él. Su silencio fue la respuesta que más temía. __ Bien. Si eso es lo que quieres, yo ya no diré nada más. Anunciaré a los demás tu renuncia. Yu ZiYuan, espero que cuando nos volvamos a encontrar, no estés arrepentida de tus decisiones. __ Ha pesar de la punzada que sintió en su corazón, la Omega aún se mantuvo firme, reteniendo todas las lagrimas que amenazaban en salir.
》Tú no eres la Yu ZiYuan que alguna vez conocí, tú no eres la mujer, la Omega que amo. Adiós, segunda joven ama de Mieshan Yu.
Ha pesar de los deseos de detener al Alfa, Yu ZiYuan solo se mantuvo quieta, no quería verlo directo a los ojos, porque sabía que los sentimientos contenidos se ha de liberar. Cuando ya no pudo retener sus lágrimas, ese Alfa ya se había marchado, perdiéndose entre los árboles del bosque bajo la noche espesa.
Yu ZiYuan se arrepintió."
Misma creencia que la llevó a donde ahora está. __ Acércate. __ Jiang Cheng dudó. Con pasos lentos se acercó a su madre, quedándose callado. __ Siéntate. __ Esta vez no dudó, con cuidado se sentó sobre sus piernas a una distancia prudente. Yu ZiYuan suspiró, sin saber por dónde empezar o qué palabras utilizar. __ No tengo la intención de justificar mis decisiones al igual que mis acciones. Soy consciente de los tratos que te dí, me arrepiento. Perdóname. __ Jiang Cheng se sintió asfixiado por su propia saliva. Su A-Niang pidiendo disculpas, qué otras sorpresas más se llevaría esta noche.
》Todas la decisiones que tomé desde tu nacimiento, fue para protegerte de la codicia de tu A-Die, no solo a ti, también a tu hermana. Cuando te presentaste como Omega, tu A-Die enfureció, su primera opción era comprometerte con un hombre de su misma edad. Me puse a contra, tú apenas eras un bebé de tres días. Pero gracias a la buena amistad que tuve con el gran maestro Lan Qiren, logré convencerlo para que su sobrino mayor sea tu prometido. Tu A-Die vio los beneficios al enlazarse con GusuLan, por lo que no se opuso. __ Tomó un respiro. __ Sin embargo. __ Continuó. __ Hubo un problema, no sólo te nombró heredero oficial de Yumeng Jiang, eras Omega, además de que abandonarías Yumeng Jiang al igual que tu apellido paterno para tomar el de tu esposo. __ Su garganta dolió. Y los próximos recuerdos se adueñaron de su mente. __ Tú A-Die intentó violarme en muchas ocasiones. Al principio fui una tonta, al creer aquello que a todos los Omegas nos recalcaban día y noche: el deber de los Omegas. __ Ahora que lo pensaba, Jiang Cheng nunca tuvo lecciones de su A-Niang sobre los deberes de los Omega, ella nunca le obligó tener lecciones para ser un buen esposo. Ella siempre le obligaba a tomar la espada y practicar, le ayudó en su formación de su núcleo dorado. Sí se sentía cansado, su A-Niang le hacía practicar el doble. Su A-Niang siempre se preocupó de que fuera un excelente cultivador, no un excelente esposo. Las comisuras de sus labios se elevaron por un sentimiento que empezó a surgir en su corazón, esperanza. __ Con el pasó del tiempo me fui dando cuenta de que esto no era la vida que quise, es por eso que nunca más permití que tu A-Die me tocara.
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Descendiente De La Fuerza Y Pureza | Xicheng
Roman d'amour¿Quiénes son los cuatro Jiānhùrén? Fue la pregunta de muchos al ser la habladuría más famosa en todas las regiones de China. Chismes que buscaban manchar sus imágenes, historias discribiendoles como dioses en medio de los mortales, anécdotas de much...