Amarte hasta el final de mi vida (WangXian) - AU

Parte 30: Juntos

Desde hace varios días que evitaba a Jiang Cheng, hasta empezaba a hacerse costumbre el no contestar sus llamadas. No podía creer que me había ocultado que la persona que tanto amaba esperaba por mí a unas cuantas millas de distancia. Lan Zhan no merecía todo lo que había pasado, él pasó tanto tiempo sin saber nada. De un momento a otro fue separado de mí por el destino y de pronto Jiang Cheng se metió para que las posibilidades de estar juntos fuera aún más escasas.

Todo el dolor que debió sentir al sentirse abandonado y luego al regresar, pensar que tal vez haya una esperanza por volver a reencontrarse conmigo, se entera que no lo recuerdo, que todo lo que vivimos se ha ido como el fuerte viento que acarrea todo a su paso, dejando nada en donde una vez hubo tanto.

Lan Zhan se quedó conmigo tal y como lo dijo aquella noche. A pesar de haber pedido que no lo hiciera, él continuó con sus visitas luego del trabajo, mensajes, llamadas en la noche, salidas algunos fines de semana; y yo no podía evitarlo, porque yo quería que lo hiciera, en lo más profundo de mi ser sabía que no quería que se fuera, quería que se quedara conmigo y que me siguiera amando, aún cuando mi memoria no regresara, yo quería que estuviéramos juntos, porque admitía que Lan Zhan me gustó desde el primer momento que lo vi.

Y ahora, conforme pasaron los días y las semanas a su lado, me había enamorado de Lan Zhan de nuevo, no sabía cuando había ocurrido, pero entonces solamente supe que Lan Zhan era mi hogar y no había dudas de ello.

Pero tenía miedo.

No podía simplemente decirle que me había enamorado de él de nuevo, tal y como en el pasado. Lan Zhan apreciaba lo que tuvimos en aquellos días, si yo le pidiera que dejáramos el pasado atrás y que empezáramos a crear nuevos recuerdos juntos... ¿Él lo aceptaría?

Un día, Lan Zhan no vino a nuestra cita.

Lo esperé por media hora, sentado en el graderío del estadio deportivo, conmigo traía comida que había preparado con mis propias manos para ir de día de campo. Sin embargo, Lan Zhan no llegó, aún cuando le envié un mensaje y lo llamé él no contestó, solo significaba que algo había pasado.

Lo esperé por una hora y cuando mi preocupación comenzaba a subir, vi una silueta a lo lejos acercándose. Desde donde me encontraba podía distinguir que era Lan Zhan quién se acercaba, por lo que suspiré y sonreí antes de levantarme y caminar hasta él. Fue bastante extraño cuando a medida que se acercaba notaba que no era Lan Zhan, sino un hombre bastante parecido físicamente a él.

El sujeto sonrió cuando se detuvo a una distancia de mí y extendió su mano como un saludo. Alcé la ceja un poco desconfiado, dejando su mano en el aire, sin recibir su saludo.

—Joven Wei, es un gusto verlo luego de tantos años. —el tomó mi mano y la estrechó en un apretón de manos que lo deslizaba arriba y abajo en sentido amistoso. —Soy Xichen, el hermano de Lan Zhan.

Mi mente fue aclarada en ese momento y sonreí en respuesta, era casi obvio que la persona frente a mí era su hermano, sus rostros eran tan similares, excepto por el color de sus ojos, su sonrisa y su peinado.

—Oh, yo soy Wei Ying... Eh, digo, tú me conoces, pero para mí no presentarme sería de mala educación, porque es como si te conociera justo ahora.

—Lo sé, lamento lo del accidente, Lan Zhan me lo ha contado.

Suspiré y negué con la cabeza sin saber qué decir y solo me dediqué a hacer un gesto con mi cara sin sentido para luego sonreír.

—Joven Wei... —dijo luego de unos momentos, su rostro que estaba tan sereno y sonriente se torno serio y con un deje de preocupación. —Lan Zhan se disculpa por no haber podido venir.

—¿Qué le pasó? —pregunté, de pronto sentí mi corazón encogerse.

—Un problema médico, no tuvo la oportunidad de contactarlo ya que... Bueno, se desmayó.

—¿Qué? ¿Dónde está? ¿Cómo está?

—Tranquilo. —Xichen colocó una mano en mi hombro para brindarme apoyo, que parecía que lo necesitaba demasiado. —No fue grave, saldrá del hospital más tarde.

—Oh...

—Él pidió que viniera a verte, ya que estaba seguro que aún estarías aquí y no quería preocuparte o que te enojaras por dejarte plantado.

—No hay problema. —negué con la cabeza. —Xichen-ge... ¿Puedo ir a verlo?

El hermano de Lan Zhan sonrió cálidamente y asintió en respuesta. —A eso vine, vamos, mi coche está afuera.

Asentí y lo seguí, llevando conmigo las cosas que había preparado junto con una pequeña bolsa de regalo.

Cuando llegamos al hospital y luego a la habitación donde Lan Zhan estaba, este estaba sentado en el borde, con su mirada perdida en sus manos. Aunque cuando oyó unos pasos entrar, alzó la mirada para chocar sus ojos con los míos.

—Hola... —susurré, acercándome a pasos lentos hacia él. —¿Estás bien?

—Mnm.

Sonreí aliviado, quería abrazarlo fuertemente en ese momento pero no podía hacerlo.

Lan Zhan miró a su hermano y asintió hacia él y Xichen hizo lo mismo. Parecían comunicarse sobre algo.

—Los dejaré solos, iré a comprar un café y lo tomaré lo más lento posible.

Mi rostro se sonrojo sin poder evitarlo, avergonzado por el tono que había empleado Xichen al decir aquello.

—Hermano... —dijo Lan Zhan, recibiendo una sonrisa de Xichen antes de retirarse.

Al quedarnos solo allí, Lan Zhan se levantó y se acercó a mí, envolviéndome en un abrazo, mi corazón latió con más fuerza en ese momento y mi rostro se encendió aún más, si eso fuera posible.

—Lo siento. —dijo él.

Quería abrazarlo de la misma manera, pero una de mis manos mantenía su agarre en la bolsa de envases de comida que cociné, por lo que con la mano restante di palmaditas en su espalda, queriendo acercarlo más a mí.

—No hace falta, Lan Zhan.

Él se separó poco después de mí y con una de sus manos acarició mi cabellera.

—Podemos comer en mi casa. —dijo, tomando mi mano que sostenía la bolsa y haciendo énfasis a qué comida se refería. Mis ojos brillaron de emoción y sonreí abiertamente sin poder evitarlo, dando dos brincos sin darme cuenta.

—Bien, comeremos en tu casa, vaya, es la primera vez que iré.

Lan Zhan se quedó en silencio un momento antes de asentir. —Mnm.