Parte 42: XiCheng

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Aún el gran local de café, recordé la razón por la que habíamos salido y hallando una razón para cambiar de tema, sonreí en su dirección, a lo que él me miró de manera extraña.

—¿Qué?

—Yo solo pensaba en lo que debió pasar entre mi cuñado y tú, sé que se declaró a ti y tu lo golpeaste.

—¿Te fue con el chisme? 

—Mnm, de hecho se lo contó a Lan Zhan y él me lo contó. Hasta ahora tengo la idea de lo que sucedió, pero quiero escucharlo de ti, ¿por qué lo golpeaste? ¿No sería mejor besarlo? Digo, Jiang Cheng, tú lo quieres. 

—Hmph, ¿quién va a querer a alguien como él? Se emborrachó y luego soltó sus cursis palabras, ese tonto quiso retractarse, disculpándose y entonces lo golpeé, ¡no puede decir algo y arrepentirse momentos después! 

Escuché con atención lo que decía y noté el sonrojo de sus mejillas, ya sea de vergüenza o enojo, quizás las dos. Noté entonces que la razón por la que lo había golpeado era diferente a lo que pensé, ¿Xichen-ge se había arrepentido de haberse confesado? No podía verlo de esa manera, por lo que me incliné a la opción de que había un mal entendido entre ellos dos. 

—¿Le dejaste hablar luego de golpearlo? 

—No, me fui de ahí, no quería oír sus estúpidas disculpas. 

Suspiré y negué la cabeza disimuladamente. —Voy al baño, regreso en seguida. —le dije y me levanté del asiento, caminando hacia allí mientras tomaba mi teléfono y escribía un mensaje de texto a Lan Zhan. 

—Esposo mío, es momento de actuar de acuerdo al plan, lleva a tu hermano al departamento y yo llevaré al mío, nos vemos en treinta minutos! 

—Está bien. 

—Listo 😉, te amooo❤️❤️❤️❤️❤️

—Yo también te amo ❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️

Regresé a la mesa y luego de hablar un par de cosas más, nos dirigimos hacia mi departamento. Jiang Cheng estaba confundido por mi petición, ya que él quería irse a su casa y yo le había insistido que se quedara un poco más. 

Para cuando llegamos a la puerta de mi hogar, dejé que Jiang Cheng entrara primero, y antes de que reaccionara mal al ver a Xichen sentado en la sala, salí del lugar, cerrando con llaves rápidamente. 

—¡Eh! ¿Qué se supone que haces? Abre la puerta, no es gracioso. —se oyó decir a Jiang Cheng al otro lado, tratando de abrirla. 

—Ambos necesitan hablar y no les abriré hasta que lo hagan. 

—¡Abre la puerta, pedazo de payaso! —gritó, pero solamente me eché a reír. 

Segundos después sentí la mano de Lan Zhan en mi hombro y me giré para poder besarlo. Los gritos y maldiciones de Jiang Cheng seguían escuchándose por un tiempo más hasta que finalmente se calló, por lo que asumí que ya se encontraba hablando con Xichen-ge. 

Lan Zhan y yo nos miramos cómplices y entonces salimos del edificio, les daríamos un momento para hablar mientras salíamos a hacer las compras semanales. 




Jiang Cheng golpeaba la puerta insistentemente hasta que oyó una voz detrás suyo. 

—Hagámosle caso, hablemos Jiang Cheng. 

El nombrado se giró y vio a Xichen a los ojos, con una expresión seria, expectante a lo que pudiera decir el otro. Caminó a través del departamento hasta sentarse en uno de los sillones y cruzado de brazos esperó a que el otro dijera algo, ya que el no pretendía decir nada. 

—Yo, lo siento... —comenzó diciendo. 

—Si vas a seguir disculpándote mejor cállate. 

—No, es que yo si te quiero, Jiang Cheng. 

Él lo miró asombrado y confundido, por lo que el Lan volvió a hablar. 

—Quería disculparme por habértelo dicho en ese estado, yo quería que fuera especial. Estaba borracho y cuando regresé en sí, me dio miedo pensar que no me creerías, entonces me disculpé, porque quería decírtelo pero no de esa manera. —Xichen se fue acercando hasta situarse al lado de Jiang Cheng, quien al escucharlo se puso de pie para encararlo. 

—¿Tú...? ¿En verdad, lo dices en serio? 

—Sí, yo te quiero. —declaró, queriendo tomar la mano del otro, pero sin atreverse a hacerlo. 

—Yo te golpeé, ¿no estas molesto por eso? 

—No me molestaré si tu me devuelves mis sentimientos. 

Jiang Cheng suspiró y miró hacia otro lado. —¿Es un tipo de chantaje? 

—Tal vez. 

Volvió a suspirar, ahora mirándolo de frente, aún cuando sus mejillas ardían. —Tú sabes que sí. 

Lan Xichen sonrió y se acercó un poco más, está vez, sosteniendo la mano de Jiang Cheng y llevándola a su pecho. —¿Sí, qué? 

El menor resopló y rodó los ojos. —Ya sólo bésame, me desesperas. 

Y así lo hizo, tomó la nuca del otro para acercarlo a sí mismo y juntaron sus labios, besándose mutuamente, en una danza tranquila y anhelada.

.

Cuando regresamos y abrimos la puerta sigilosamente, nos encontramos con una linda imagen de Jiang Cheng y Lan Xichen dormidos unos al lado del otro, acurrucados en el sillón. 

—Lo logramos, Lan Zhan. —susurré, besando su mejilla, siendo luego besado por Lan Zhan de igual manera, que tenía una mirada cómplice conmigo. 

Acomodamos las compras en sus respectivos cajones y estantes, esperando a que los dos despertaran, ya para cuando terminamos todo y nos sentamos frente a ellos, Xichen despertó y al vernos sonrió con vergüenza y asintió como saludo, sin querer perturbar el sueño de quien dormía a su lado. 

Sonreí e intenté no reír cuando un Jiang Cheng aún dormido tomó la mano de Xichen entre la suya. 

—Quién viera a Jiang Cheng así. —susurré, riéndome en silencio. 

De pronto, como si hubiera lo invocado, abrió los ojos tratando de enfocar a quiénes estaban en frente y cuando lo hizo, se sentó correctamente, deshaciendo su agarre y frunciendo el ceño como de costumbre, evadiendo el sonrojo de sus mejillas. 

—¿Qué haces aquí? —preguntó. 

—¿Huh? Es mi casa. 

—Pensé que nunca llegarías, nos dormimos esperando a que abrieras. 

—¿Te molesta eso? Yo te vi muy cómodo durmiendo al lado de mi cuñado. 

—¡Tú! 

—Sí, yo, dime, ¿ya se arreglaron? ¿ya son novios? 

—Que te importa. 

—Lan Zhan~, me está hablando mal. —hice un puchero y Lan Zhan me abrazó por la cintura, apegándome a él. —Xichen-ge, ¿ya eres novio de mi hermano? —miré hacia él, que se mantenía callado, con sus orejas prácticamente rojas. 

—Sí. —asintió y sonrió. 

—¡Por fin! Felicidades. Ah, Lan Zhan, lo hicimos, somos como cupidos. 

Lan Zhan esbozó una pequeña sonrisa y asintió. —Mnm. 









Amarte hasta el final de mi vida (WangXian) - AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora