Cap. 1 Cita en Florencia
Florencia - Italia. Año de 2010.
La joven Cristina Maldonado paseaba por la pinacoteca, estaba maravillada con el lugar, una de las cunas más imponentes de la historia del arte, y aquel lugar la dejaba extasiada. Ella, una joven de 20 años, acababa de recibir la beca para estudiar los cuadros de Botticelli. Cris estaba en la facultad de Bellas Artes y quería ser experta en Dante Alighieri, más concretamente en El Infierno de Dante.
Recibió una beca, por presentar un trabajo sobre la obra una visión fotográfica de la actualidad en relación con la obra del siglo XVI. Cris estaba allí para presentar su trabajo, una carpeta sobre el Infierno de Dante, con fotos de la época actual, era una relectura del Infierno en tiempos modernos. Aquella mañana todo parecía ir bien, hasta que ....
- ¡Mira por dónde vas, ogro! - dijo ella, recogiendo las fotos que habían quedado esparcidas por el suelo al chocar con él.
- Siento no haberte visto. - se agachó y la ayudó a recogerlo todo. - Caminar por el museo y mirar hacia arriba no ayuda mucho, lo siento.
- Yo también miraba hacia arriba, y creo que la culpa es de los dos por admirar tanta belleza.
- ¿Eres de aquí?
- No, soy de México, vine a presentar una obra. - sonrió, no se refería a eso.
- No es eso lo que pregunté, con tanta belleza pensé que era una obra rara de este museo.
Cris sonrió y negó, en ese momento ella le miró con curiosidad, sus ojos eran penetrantes y tenía una sonrisa embriagadora. Siguen mirándose como si se estuvieran analizando, hasta que alguien les llama.
- Señorita Maldonado, el consejo espera su presentación. - dijo el caballero de traje oscuro.
- ¿El Dr. Robledo se une al Consejo? - dijo y Cris lo miro, fue el quien acepto su articulo, como podia ser. Respira hondo y sonríe desconcertada.
- Lo siento, no nos hemos presentado bien. Héctor Robledo, especialista en Dante, Botticelli. Creo que no sabía que la joven era una conocedora de Dante.
- Cristina Maldonado, pues debes saberlo porque aceptaste mi artículo y por eso estoy aquí
- Vicenzo, toma nota de que los demás artículos tienen que venir con fotos de los candidatos, no vaya a ser que me tope con ellos antes de la comisaría.
- No hay problema señor, ¿vamos a la sala de juntas?
Cris le acompañó por los pasillos del museo, quiso mirar atrás para ver si seguía allí, pero cuando lo hizo ya no le vio, Héctor se había ido por otro camino. Una entrada diferente.
Al entrar en la sala lo vio sentado al lado de la directora del Museo, una señora de algo más de 70 años, estaban hablando de oído, cuando ella entró en la sala la señora sonrió de lado como si la conociera.
- Buongiorno signorina Maldonado, espero que haya apreciado la invitación para su presentación ante el consejo del Museo de Florencia, el consejo está compuesto por expertos en Botticelli y Dante. Su trabajo fue considerado brillante para una joven de sólo 20 años.
- La edad no es un requisito para ser experto non è così, signora consigliere. - dijo Héctor mirando a Cristina.
- Naturalmente no mio caro esperto. - la dama pone su mano bajo la de Héctor en el banco, Cris mira y percibe una complicidad entre ellos. - Puede comenzar su presentación signorina Maldonado.
Cris sube al púlpito y comienza a mostrar las fotos que había tomado y hecho mostrando el antes y el ahora del Infierno de Dante, fue una presentación de casi una hora, después de que todo estuvo listo. Antonella, la directora del museo de Florencia, bajó del banco y se dirigió a Cris.