Imposible - Enzo Fernández

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-Ay Oliviaaa, mira la chanchada que hiciste con la naranja.

Le estaba lavando las manos y cambiándole la ropa, Enzo estaba entrenando y con Olí estábamos en la sala mirando la tele, ella quería una naranja pero hizo un desastre.

.-No, no. Sucio, sucio.

-Siiii sucio, mira todas las manos pegajosas.

Ella agarró la canilla y la abrió a todo pedo, me bañó.

-AAAAAH, noooo, Olí que hiciste, me mojaste toda la remera.

Ella se empezó a reír y yo reí junto a ella, que más iba a hacer, era una bebé.

-Bueno, Bueno, vamos a jugar? Porque la opción de la comida no es buena.

La lleve upa hasta su pieza, donde buscamos algunos juguetes y sus bebés, bajamos a la sala, antes de ponernos a jugar pase un trapo húmedo por la mesita porque tocó todo y dejó pegajosa la mesa.

-A ver, pero este bebé está en bolas, con el frío que haceeeee, vamos a cambiarlo.

Así estuvimos hasta que llegó Enzo, llegó enojado, nos saludo así nomas a ambas y se encerró en la pieza.

Como ya habíamos comido, y Enzo lo hizo en el entrenamiento, hice dormir a Olí la siesta, así podía hablar tranquilamente con Enzo.

-Qué bebé más preciosa.

La acosté en su camita, puse la tele para que haya ruido y salí despacio de ahi.

-Ay, voy a juntar lo que dejo Olí así me quedo tranquila.

Como dije, baje a juntar todo, apague la tele, barrí un poco, y subí.

-¿Que te pasa? Por qué viniste así malhumorado?- me senté a su lado en la cama.

.-Nada.- habló cortante.

-No me digas "nada", si entraste y apenas saludaste a Olí, vos no sos asi, ¿Qué pasó?

.-Discutí con los del equipo contrario , me dicen que me agrande por haber ganado la copa del mundo, que ni siquiera era titular y que soy un pendejo que no sabe nada, me da bronca, porque yo sé cómo me rompí el orto entrenando, en pandemia me iba a un gimnasio, nunca perdí la fe y la esperanza, y estos salames me vienen a decir a mi que soy un agrandado que no sabe nada. Mis compañeros estaban ahí y me ayudaron, pero no es así, si me quieren suspender que lo hagan, yo no me voy a dejar pisotear por nadie, a mi nadie nunca me regalo nada, todo lo que tengo lo conseguí con mi esfuerzo. Y para completar todo eso, estoy frustrado, siento que no hago suficiente, te dejo todo el día sola, cuidando a mi hija, y cuando apenas estoy llego cansado.

-No importa eso, y si estás con nosotras, es el principio de la temporada, vas a ver que dentro de poco se va a calmar todo y vamos a estar bien, vos siempre pensa que lo qué haces es para que tu hija tenga un buen futuro y vos también, tenemos mucho por delante, esto es solo el comienzo, si vos te frustras y te cetras en vos mismo, vas a explotar. Acá estoy yo para que hables, porque de eso se trata una relación también, la comunicación es clave, si uno cae, caemos los dos, conta conmigo para todo, no estás solo.- le toque la cara suavemente, el cerro los ojos ante el tacto.

.-Te amo tanto, gracias por estar conmigo siempre.

Se apoyó sobre mis piernas, mientras yo acariciaba lentamente su pelo y su cara. De repente se escuchó un llanto y me levanté enseguida.

-Olí.

Fui a su habitación y estaba sentada mientras lloraba.

-¿Que pasó bebé? No llores.

La lleve a la habitación y Enzo enseguida la agarró, ella quería estar con su papi.

.-Hola amor mío, mi bebé, porque lloras?

...

Enzo ya estaba más calmado, la verdad que verlo así me ponía mal a mi también, hoy estuvimos todo el día en casa, él disfrutando de su hija, y yo disfrutando de ellos.

.-Ahora que estamos acostados y la gorda se durmió, me podes dar unos besos no?-dijo mirándome pícaro.

-No se.

.-Qué te haces la lindaaaa.- me agarró de la cintura y de un tirón ya me subió encima de él.

-Con vos nomas.

.-Ah si?

-Ujum.

Me agarró del cuello y me atrajo hacia el, besándome apasionadamente, hace tanto no estábamos así, me pone re calentona este Enzo, me agarran del cuello y no soy yo.
Los besos subieron de tono, la ropa comenzaba a estorbar así que me deshice de mi remera, él ya estaba sin remera así que pase ambas manos por su torso desnudo, apreciando cada tatuaje, este hombre es perfecto, no lo niego.
Me acostó en la cama y él se puso entre mis piernas, mirándome mientras esperaba mi aprobación, yo asentí con la cabeza y él siguió con lo suyo, me sacó la ropa interior al igual que la de él y de una sola estocada entro en mi, haciendo soltar un gemido ahogado por su mano.
Me tocaba cada parte de mi cuerpo, me besaba y me miraba con lujuria. Cada toque me hacía querer más y más, él sabía perfectamente dónde tocar y que hacer, volviéndome completamente loca. Me dio vuelta cambiando completamente la posición, yo no me quejo, él manda en esto. Me agarró del pelo, haciendo que sus movimientos sean más bruscos, soltaba leves gemidos y jadeos, cosa que me pone demasiado, es increíble escucharlo.
Mientras ambos nos movíamos con desesperación, llegamos al tan esperado orgasmo, sentí como mis piernas comenzaban a temblar y él se ponía tenso.
Esa noche me entregué en cuerpo y alma completamente a Enzo Fernández.

...

La mañana siguiente fue agotadora, por suerte Enzo hoy no entrenaba, pero teníamos que prepara a Olí porque ya se iba, me levanté adolorida, pero de igual manera ayude a Enzo. Mientras él buscaba su ropitq y acomodaba la pieza, yo la bañaba, así íbamos a terminar más rápido.
Cada que llega el día de llevar a Olí con su mamá es un martirio, Valentina lo llena de mensajes a Enzo preguntándole a qué hora la llevábamos, que porque tardamos tanto y eso. Desde que escuché la discusión que tuvieron y las giladas que dijo de mi, no la quiero ver ni en pintura, pero bueno, así es la vida.
Olí estaba sentada en ma sillita con su tablet, Enzo terminaba de subir sus cosas y fuimos a la casa de Valentina. Llegamos y ella estaba en la puerta con una cara de orto mal, se acercó al auto y la muy hija de puta me saludo como si nada.

.-Hola hermosa.

Yo solamente asentí con la cabeza en forma de saludo, no hay peor cosa que la gente doble caraaaaa.

Despedí a Olí con un abrazo y besitos, y a Valentina por educación, después de dejar a Olí fuimos con eso a comprar cosas que nos hacían falta.