Pensé que era imposible volver a verlo, mi cuerpo, mente y corazón no saben que sentir, no se como responder, solamente siento como los bellos de mi nuca se erizan y el nerviosismo se hace presente en mi cuerpo, Enzo Fernández, con el que pase toda...
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Lunes 2 de Enero, 8:30 am.
Estábamos desayunando, Enzo se tenía que ir al club ya que empezaba la temporada, hoy era el último día de la semana que nos tocaba estar con Olí, cuando Enzo vuelva de entrenar la llevábamos a la casa de Valen.
- Come bebé Oliiii, es lo que te gusta a vos.
Ella reía y comía al mismo tiempo, le tenía que decir de a ratos que comiera ya que estaba embobada con su tablet y los videos.
-Enzo, Bueno, viste que vos ahora vas a empezar a entrenar y demás, y yo voy a estar acá sola en casa. A mi me va bien en mi trabajo de las redes sociales y con las marcas de todo, estoy mas que bien económicamente, pero no se, a veces siento que no hago nada, que soy una inservible.
Enzo:- No digas eso gorda, yo sé muy bien que vos trabajas con las marcas y que de ahí sale tu plata, que nunca me pediste un peso para comprarte algo, ¿Estás segura de querer hacer algo más aparte de eso? ¿Después no se te va a volver pesado?
-Es que mucha gente no sabe eso, y si llegamos a estar juntos no quiero que piensen que soy una mantenida.- dije preocupada.
Enzo:- No hay drama amor, vos sabes que siempre van a hablar al pedo, pero si vos queres y te hace sentir mejor busca algo, pero yo pienso que así estás bien, y si se vuelve muy pesado el tema, haces un anuncio y listo.
-Si puede ser, es que tampoco estos trabajos me van a durar toda la vida viste.
Enzo:- Si algún día pasa, vas a estar conmigo, y te voy a tener como te mereces.
-Gracias Enzito, aunque tengo mis buenos ahorros y cada vez acumulo más, creo que mis hijos, mis nietos y vi-ñietos van a vivir con mi herencia.
Enzo:- Y bueno gorda, no te hagas drama, ves? Estas bien, por acá se qué hay talleres de cosas como peluquería y eso, podes ir si no queres estar todo el tiempo encerrada.
Hablamos hasta Enzo se fue. Yo preparé a Olí para llevarla conmigo a hacer unos mandados.
-Vamos gorda, a comprar para comer.- le toque sus cachetitos.
...
Hicimos las compras, Olí iba tomando un baggio y mirando en su tablet, no se que sería sin su tablet. Llegamos a casa y me puse a cocinar, en un ratito llegaba Enzo y teníamos que llevar a Olí.
-No quiero que te vayas bebé, me voy a aburrir sin vos.- la alce upa y la abracé.
Seguí cocinando, había puesto música y con Olí bailábamos y cantabamos. Le lave las manitos y la senté en su sillita, justo llegaba Enzo.
Enzo:- Hola mis amores.- se acercó a Olí y le dio un besito, después hizo lo mismo conmigo.
-Hola Enzito, anda a lavarte las manos que justo estoy por servir la comida.
