El último suspiro (parte 1)

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Kirishima: Uff menos mal ya no hay que soportar a los periodistas a la puerta del colegio.
Kaminari: Normal, han pasado dos días ya.
Kirishima: ¿Tú no tienes noticias de Midoriya?
Kaminari: Ninguna y eso que he buscado, pero está muy bien escondido, no creo que lo encontremos fácilmente.
Bakugou: No creo que lo encontremos, nos toca esperar a que venga.

El trío de amigos entraba tranquilamente al instituto, cada vez había más alumnos que no iban a clase por miedo, era extraño ver los pasillos tan tranquilos por la mañana. Los chicos entraron a clase, al parecer hoy las lecciones eran privadas sólo estaban ellos, los amigos de Midoriya y cinco valientes más. Aizawa entró en clase y al ver el panorama suspiró y comenzó la clase. Al pasar una hora citó a Bakugou y compañía al aula de usos múltiples durante el recreo y se fue. Poco a poco las clases fueron pasando con calma y aburrimiento hasta que llegó el recreo.

Bakugou: ¿Alguna novedad?
Aizawa: Han pasado dos días, simplemente quería saber como estabais.
Nadie dijo nada.
Aizawa: Como habéis visto la escuela tiene cada vez menos alumnos. Me gustaría deciros que si por alguna razón tenéis m…
Uraraka: Seguiré viniendo, aunque me congele el miedo estaré cada día aquí hasta que podamos hacer algo acerca de esta situación.
Todos asintieron en señal de aprobación ante tales palabras.
Aizawa: ¿Estáis seguros? No quiero poneros en peligro, no me lo perdonaría.
Lida: Para salvar a Midoriya, hay que salvar primero su corazón, y solo nosotros podemos hacerlo, en eso habíamos quedado.
Aizawa: Es admirable, pero prometedme una cosa. Si por alguna razón el peligro es inminente por favor huid, poned vuestra seguridad por delante.
Bakugou: No te lo podemos prometer.
Uraraka: Hasta ahora siempre nos hemos protegido a nosotros antes que a Midoriya.
Lida: No lo podemos hacer más, si queremos salvarle tenemos que arriesgarnos.
Bakugou: Y por eso no podemos prometerlo.

Uraraka, Lida y Bakugou intercambiaron miradas, era algo extraño para ellos estar de acuerdo en algo, estaban cambiando muchas cosas últimamente. Al ver la actitud de los chicos, Aizawa se rindió, a la vez que se alegró, Bakugou había cambiado mucho, aunque a qué precio.

Aizawa: Bien de acuerdo, no os pediré que huyáis, pero en ese caso sí que os pediré que os cuidéis y sobre todo que os ayudéis entre vosotros. Bakugou, Todoroki, no es por despreciar a los demás, pero de los aquí presentes vosotros dos sois los más fuertes, cuidad de los demás y de vosotros mismos, por favor.
Hubo un pequeño silencio antes de que ambos aceptaran.
Aizawa: Bien, eso es todo lo que querría deciros. Podéis iros, comed para reponer fuerzas y ánimos. Pero antes de nada Bakugou,  ¿te puedes quedar un momento?
Bakugou asintió y pidió a sus amigos que le esperaran fuera.
Bakugou: ¿Qué ocurre?
Aizawa: Has cambiado.
Bakugou le miró sin decir nada.
Aizawa: Tu antes también hostigabas a Midoriya, ¿que ha cambiado tanto dentro de ti?
Bakugou: ¿Tanto le interesa la vida privada de sus alumnos?
Aizawa: Mi problema es que no entiendo tus motivaciones ni tu actitud. Para salvar a Midoriya tenéis que estar muy seguros de lo que hacéis, sino no le alcanzaréis. Lida y Uraraka portan una seguridad inquebrantable, más sin embargo tu y Todoroki… no estoy muy seguro.
Bakugou: ¿A dónde quieres llegar con todo esto?
Aizawa: No me andaré con más rodeos. Bakugou, tú incluso antes de que entrarais a esta institución te metias con él, por lo que me he informado no eras muy diferente a aquellos que lo maltrataban en el baño. Pero aquí estás ahora intentando salvarle. ¿Qué tienes en el corazón?
Al hacer la pregunta tocó el pecho de Katsuki con el dedo índice.
Bakugou: Yo…- vaciló por un momento.- Yo soy consciente de todo eso y quiero repararlo, me arrepiento de lo que hice.
Aizawa: ¿Y crees que con eso te acercaras a él?
Bakugou: No será tan fácil. Pero si a eso le sumo afecto, un cambio de actitud, una menos agresiva. Tal vez consiga algo.
Aizawa: Afecto ¿eh?, si que da vueltas la vida. Veo que has encontrado tu respuesta y espero que Todoroki encuentre la suya.
Bakugou: Si hace falta yo le ayudaré.
Aizawa: ¿Tú?
Bakugou: ¡Yo! si, algún problema.
Aizawa: Jajajaja, os habéis vuelto más adultos que los incompetentes adultos que tenéis por profesores. Bien, ya puedes irte.
Bakugou se dirigió hacía la puerta y antes de salir dijo:
Bakugou: Nosotros lo traeremos de vuelta, tengalo seguro.
Aizawa: *silbido* Cuánta seguridad, jaja.

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