Un Mar De Emociones [Neteyam Y Tú] -TERMINADA-

Capítulo 10

El cielo gris y las nubes oscuras que anunciaban que pronto lloveria y el frío se hacia notar. Todo estaba tranquilo, cada familia de la aldea se quedaba en su casa a refugiarse del frío pero no preferí ir a la playa para observar el anochecer.

El mar estaba sereno tornado en un azul grisáceo ni siquiera los Ilu estaban ahí, sabía que en los días lluviosos esas lindas criaturas preferían refugiarse en los extremos de la aldea donde el pueblo les habían construido un techo para cuidarlos.

Mi vista se situó en un sitio exacto del mar y poco a poco los Tulkum se acercaban a paso lento, me puse de pie intentando ver lo que pasaba mientras la lluvia empezaba a mojar todo. Algo pasaba.

No demoré más y corrí a la aldea en busca de mis padres, corrí veloz a su carpa encontrando a papá riendo y mamá solo mantenía una sonrisa, ambos al verme llegar tan de repente se mostraron serios.

—¿Ìrea'ite? —pregunto papá con un ceño fruncido—. ¿Qué pasa hija?

—Algo les pasa a los Tulkum —mamá se levantó del suelo donde estaba antes acercándose a mí—. Vengan.

Ambos pasaron al lado mío empezando a caminar hacia la playa.

—¿Pasa algo? —una voz conocida me hizo girar, se trataba de Jake y Neytiri que se acercaron a mi padre

—Ìrea'ite vio algo raro en el mar —explicó papá y yo solo seguí a mi madre que ya estaba un poco más lejos

Lo siguiente que vi fue a los Sully caminando junto a papá hacia la misma dirección. 

Llame a los Ilu al llegar a la orilla quienes no tardaron en llegar al igual que Papá,  Neytiri y Jake. Cada uno tomó un Ilu y empezamos a navegar hacia donde los Tulkum estaban rodeando algo.

Cuando estuvimos cerca observe algo que nunca había visto, unas cosas enormes en colores rojo y azul como bolsas con unos palos enormes que atravesaban el cuerpo de un Tulkum que ya estaba inmóvil. Y algunas aves ya estaban sobre el cuerpo de la criatura.

Mamá fue la primera en bajar de su Ilu al estar lo suficientemente cerca del Tulkum y se subió a la aleta de esta, observe centrándome en lo que había junto al Tulkum, era una cría que también estaba ya muerta.

Entonces lo supe, era la hermana espiritual de mamá. 

El grito ahogado de mi madre me hizo temblar junto con sus jadeos triste y el llanto.

—Su nombre era Ro —menciono papá

—Era mi hermana espiritual, era compositora de canciones, muy respetada cantábamos juntas. Espero muchos siglos de apareamiento para tener esta cría, el clan estaba feliz por ella.

No podía despegar mi vista de la cría que aun muerta permanecía junto a su madre.

—¡¿Qué es esto Tonowari?! ¡Qué es esto! —grito mamá en dirección a papá quien solo mantuvo la mirada baja

No aguante más y baje de mi Ilu nadando hacia mamá que al tenerme cerca se abrazo a mi, llorando descontroladamente. Mientras que yo solo guardo silencio permitiendo que ella desahogara su dolor en lagrimas que mojaban mi hombro.

—Hija mía —susurro empezando a acariciar mi cabello—. Hija mía, te quiero mucho.

—También te quiero mamá —hable acariciando su espalda

[ ... ]

Toda la aldea estaba reunida con mis padres parados en el centro, yo me había posicionado junto a mí hermana que se notaba asustada.

—¡Mi hermana espiritual y su bebé fueron asesinadas por las personas del cielo! —hablo mi madre

—¡Está guerra ya llegó a nosotros! Sabíamos de la caza de nuestro pueblo Tulkum, pero estaba en el horizonte, muy distante, ¡ahora está aquí! —exclamó mi padre muy molesto seguido de los gritos de los demás del pueblo

—Pero tienen que entender como piensan las personas del cielo, el gran balance no les importa —Jake intentaba hacer que su voz se escuchara entre todos los abucheos de los demás

—¡Mataremos a las personas del cielo! —logre escuchar que algunos gritaban

—Escúchenlo, ¡escúchenlo! —exclamo Neteyam logrando al fin que el bullicio se calmara un poco

—Las personas del cielo no se detendrán, este es solo el comienzo —menciono Jake dirigiéndose especialmente a mis padres—. Díganle a sus Tulkum que se vayan. ¡Díganles que se vayan lejos de aquí! —se dirigió a todos

—¿Qué? —intervino mi madre—. ¡Vives entre nosotros y no has entendido nada!

—¡Peleemos para proteger a nuestros hermanos y hermanas! —grito alguien que estaba detrás de mi madre provocando que los abucheos vuelvan

—¡Escúchen! ¡Si deciden atacar, si deciden pelear ellos los destruirán! ¡destruirán todo lo que aman! —hablo Jake, sin embargo, nadie se callo e incluso el ruido aumento—. ¡Escuchen! ¡Escuchénme!

Todo estaba empezando a descontrolárse aún más.

—Calmense —logre escuchar la voz de Neteyam y cuando lo vi note que agarraba algo raro— ¡Calmense! ¡Escuchen a mi padre, esta diciendo la verdad!

De pronto la mano de Jake le arrebato ese aparato extraño y se subió donde mis padres estaban levantando en alto esa cosa logrando que todos se callen asustados.

—Díganles a los Tulkum, que si les disparan uno de estos es una marca de muerte —hablo Jake—. Llámenme y yo los silenciaré,  salvar sus vidas es lo único que ahora importa, ¿no? Salvar a sus familias.

Mi padre en silencio se giro a mirar a mi madre que parpadeo lento dándole a indicar que estaba de acuerdo.

—Que los Tulkum sepan —indicó mi padre firme

—Háganlo —añadió mi madre de la misma manera—. Vayan.

Entonces todos se empezaron a dispersar, me aleje del lado de Tsireya para acercarme a Neteyam.

—Neteyam —mencione al estar a su lado

—Ìrea'ite —coloco una mano en mi hombro—. Quédate aquí, ahora vuelvo.

No dijo más y se fue hacia una dirección en particular. 

—Ìrea'ite —escuche la voz de mi madre y al mirarla la vi haciéndome una seña para que me acercara y así lo hice