Irracional

59 14 0
                                    

Ethan:

       Estoy felíz, acabamos de salir de la consulta con la Ginecóloga y nos han dicho que todo está bien con los bebés .

       Luego visitamos a los niños en el hospital en que Cass es voluntaria. Hay me enteré de la verdadera historia tras el color rosa de su cabello.

        Me sorprende tanto cuánto a logrado ella superar sus inseguridades.

        Ya incluso usa ropa que dejan ver parte de su cicatriz. Sonríe y se ve segura de si misma a todo momento. Y yo estoy más que feliz de haber formado parte del proceso.

        Aún vamos en el auto camino a casa, pero no me concentro mucho en el camino. La razón, es que me la paso mirando su mano.

       La mano donde lleva el anillo de compromiso que le dí a los pocos días de que aceptará casarse conmigo.  Un anillo con diamantes rosas como su cabello y sencillo, porque se que si me hubiese aparecido con uno ostentoso, como él que el dependiente quería que comprará, capas y me caía a golpes y luego lo rechazaba.

       Esa es una de las cosas que me encanta de ella. Sé que no está conmigo por mi dinero. Aunque si ahora mismo me lo pidiera, sería capaz de darle toda la fortuna de mi familia. Así de grande es mi confianza en ella.

     Cuando llegamos a la casa vemos un auto aparcado afuera. No lo conozco. Bajamos y vemos a David sentado en los escalones de la entrada.

       -¿Eh que haces aquí afuera?.- le pregunto y el me contesta que no quiso forzar la puerta por respeto a Cass y como no, procede a ser coqueto, a veces me dan ganas de darle unos buenos golpes.

        Cass se marcha hacernos jugo y nosotros nos quedamos en la sala para conversar.

        - Yyyyy,¿Qué es eso que me tienes que decir?

        -Ethan, tú sabes que yo te aprecio mucho.....- empieza pero hace una pausa .

         -Sí y yo a tí. Te considero como mi hermano.¿Pero que pasa?

          -No hay manera fácil de decir esto, por eso pedí yo ser quien te lo dijera. Llevamos meses en el asunto de tu hermano, desmontamos todos sus negocios y lo estábamos buscando para que respondiera ante la Ley.

          -Ya no digas más.- lo paro al entender la profundidad que toma la palabra "estábamos".- ¿Está muerto verdad?

            -Sí.- Esa simple palabra hace que me duela el pecho. Aunque en el fondo lo presentía, no quería creerlo.- Nos hicieron llegar su cuerpo, aún no sabemos quién, pero...

           - Cómo mi hermano era un criminal de guerra,se va a cerrar la investigación sin buscar a su asesino.- lo interrumpo y termino por él.

            - De igual manera de haber sido atrapado vivo, su castigo sería el fusilamiento. Sabes que asesinar a tus compañeros como el lo hizo es un crimen que se paga con la muerte. Lo siento.- me dice, pero yo apenas le hago caso, los recuerdos empiezan a inundar mi mente.

         Esteban y yo de niños construyendo castillos en la playa, compartiendo navidades, cumpleaños y amistades.

         Crecimos juntos apoyándonos en todo. Hacíamos todo juntos. Y en lo que uno no era bueno, pero el otro sí, siempre nos complementamos.

      Y no se cómo pasa, pero mí mente se descontrola. Todos los recuerdos se empiezan a mezclar, pero ahora no solo hay recuerdos buenos. También los malos. Recuerdo cada asesinato, a los niños huérfanos. A las familias devastadas. Recuerdo cómo me pasaba noches sin dormir buscando una pista que me llevará hasta “La Mancha”, cuando lo tenía durmiendo al lado mío.

Hacerte Sentir. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora