Cap 41

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Por la mañana temprano el calor volvió a hacer de las suyas, eran las nueve de la mañana y el frescor de la noche ya se había convertido en un sofocante calor, asfixiante, cualquier calificativo podía quedarse muy corto para describir el inmenso calor de ese día.

Max: hace mucho calor!

Oscar: vayamos otra vez a la playa, ya iremos otro día al parque de atracciones ese.

Max: buena idea, voy a llenar la nevera para poder pasar el día en la playa.

Oscar: no te olvides de la sombrilla, hoy más que nunca nos va a hacer mucha falta.

Regresaron al mismo lugar del día anterior para su sorpresa el castillo de arena todavía seguía en pie, bastante caído e irreconocible pero seguía en ese mismo lugar, al lado se encontraba el castillo de Maxi el cual estaba en un mejor estado, uno podría pensar que se acababa de hacer.

Sin molestar a nadie más volvieron a poner sus cosas en el mismo sitio del día anterior, sombrilla, tumbonas, nevera, todo estaba exactamente igual al día anterior.

Oscar: echate crema por la espalda, no empeores la situación después de quemarte el otro día.

Mientras se echaban crema el uno al otro, un pequeño zorro se les acercó para saludarlos.

Maxi: holi! buenos días.

Max: hey! buenos días, ya desde por la mañana en la playa?

Maxi: no se porqué te sorprendes, tú también estás en la playa por la mañana.

Oscar: buenos días, ya por aquí? tus padres no vienen también?

Maxi: mi mama me deja venir solo mientras ella se va a trabajar con un amigo.

Ambos furrys se miraron entre ellos, acababa de decir exactamente lo que ellos estaban pensando? De ser así sus padres no le prestaron la suficiente atención y trataban de deshacerse de él a cada momento que pudieran.

En unos pocos minutos empezaron a reconstruir el medio derruido castillo de arena del día pasado, la gente comenzó a agolparse nuevamente alrededor del edificio, hordas de caminantes se detenían en aquel lugar para poder sacar una foto al tan detallado edificio, además de observar su reconstrucción.

Para la hora de comer, la gente comenzó a marcharse dejando el lugar tal y como había estado cuando los chicos llegaron y extendieron sus toallas para disfrutar de un día en la playa, para las 3 de la tarde el inmenso calor había dado un respiro a la zona y la temperatura descendió, a pesar de seguir haciendo bastante calor, de tal manera que las fursonas podían hacer vida más "normal" a esas horas.

Maxi: hace más fresco, queréis ir al pequeño parque de atracciones?

Ambos dijeron sin pensarlo dos veces que sí, pues era uno de sus planes iniciales pero debido al calor tuvieron que posponerlo de manera indefinida.

El zorro emocionado por ir al parque de atracciones con sus dos nuevos amigos no podía esperar a subirse a todas las atracciones que el tiempo de apertura les dejara.

Maxi: vamos, el teleférico es la única forma de subir hasta la montaña, si no llegamos pronto tendremos que esperar!

Oscar: podemos subir andando o en autobús, mira en esta app puedo ver una parada cerca, y la línea llega en 5 minutos, si nos damos prisa podemos subir en bus.

Maxi: no vale la pena, muchas fursonas eligen el autobús para subir y cuando pasa por esta parada ya no entra ni un alfiler.

La pareja decidió ignorar la advertencia alegando haber menos gente en la playa, al menos así aparentaba ser, a eso se le suma ser la hora de comer, lo cual muchas fursonas estarán comiendo en algún restaurante en vez de ir a un parque de atracciones.

Sin embargo nada más llegar a la parada el pequeño Maxi les dirigió una mirada de "te lo dije", esta estaba llena, no llena, abarrotada, con una fila de casi 50 metros a la espera de entrar en el próximo autobús que llegase. Vieron pasar no uno, tampoco dos, ni siquiera tres sino hasta cinco autobuses dobles totalmente llenos, de tal forma que ninguno de ellos paró en aquella parada.

Max: creo que no sería mala idea subir en teleférico la verdad.

Oscar: sí, creo eso hubiera sido lo mejor.

Para su buena fortuna el teleférico estaba muchísimo menos lleno, y en 15 minutos ya habían subido a la cima de la montaña, pudiendo ver el pequeño gran parque de atracciones. Había tirolinas, pista de carreras, tres montañas rusas, dos recorridos en canoa, tres tiovivos, siete casetas de recompensas, dos pistas de coches de choque y decenas de mini restaurantes para tomar algo, comer o cenar en el lugar; además de haber un pequeño mirador subiendo a los pies de un monumento en la cima del monte.

Se montaron en casi todas las atracciones, no era lo mismo que un parque de atracciones "de verdad" pero sí igual de divertidas atracciones. El problema llegó cuando Oscar se cortó un dedo de manera tan grave que un doctor en ese momento habría determinado la pérdida total del mismo.

Maxi: oh, no! te has cortado, tenemos que llegar a mi casa rápido, el parque no tiene un botiquín de primeros auxilios pues al haber farmacias y un hospital cerca no lo vieron necesario.

Oscar: pues yo sí.

Bajar era más fácil pues al no ser la hora de cerrar las fursonas no se agolpaban a la espera de regresar en autobús o en el teleférico. A pesar de ello tardaron unos 10 minutos en llegar a la casa del chico, la cual estaba vacía, como si nadie hubiera vivido en ese lugar.

Maxi: no os preocupéis, mi mama no llegará hasta la cena, dejame ver la herida.

A la espera de que la herida se curase, o al menos terminar de vendar, pudieron ver gran parte de los cuadros familiares, y se fijaron en una con un zorro viejo, junto a un lobo también viejo (a pesar de que podrían tener como 60 años los dos). Se miraron con asombro, podría ser?

Max: ese es...?

Oscar: -susurrando- ni se te ocurra

Maxi: has dicho algo?

Max: am, no, decía que si ese era tu abuelo.

Maxi: jeje, sí, mamá dice que era buen amigo de ese lobo, pero ambos murieron casi al mismo tiempo asique estarán juntos en el cielo -continúa vendando la herida-

Oscar: sí, seguro estarán felices juntos en el cielo.

Al terminar de vendar se despidieron del chico, pues al día siguiente regresaban a casa y no se verían al menos durante un año.

Mi Frankenstein 2 (Furry/Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora