Cap 49

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Una gran explosión se hizo en el lugar borrando del mapa por completo al edificio, los escombros era lo único que recordaban al edificio y estos, los más ligeros, comenzaron a caer alrededor como si fueran hojas de los árboles.

Los vehículos dieron media vuelta tras la explosión con la intención de encontrar a su amigo el cual no había salido del lugar pero muy posiblemente se habría escondido en alguna piedra para sobrevivir tanto a la explosión del "arma iónica" del zorro como a la gran explosión del V-2, lo primero que haya explotado.

Fran: -bajando del Thiger II- busquen por todas partes, hay que encontrarlo y con vida.

Carlos: -buscando- ni que lo quisiéramos enterrar aquí sabes?

Max: -buscando nervioso- y s-si está muerto ya?

En eso escucharon un ruido, como un quejido que provenía de unos escombros con un amasijo de hierro retorcido por la explosión, rápidamente se acercaron lo más rápido posible al lugar para poder retirar los escombros y ver si Mark estaba ahí debajo.

Oscar: -comienza a llamarlo- Mark? Estas ahí?

Lucía: -rebuscando- no le llames, solo escaba!

Samuel: y rápido, tener tanto peso encima puede hacer que se ahogue al no poder respirar correctamente.

Tras retirar una gran puerta metálica pesada, pudieron ver que ahí estaba Mark, rápidamente Carlos se acercó al pecho del lobo para saber si notaba los latidos del corazón y al no hacerlo comenzó a realizarle el boca a boca para poder reanimarlo, pero tras unos diez minutos sin éxito y con los ojos llorosos no pudo más que confirmar la muerte de su mejor amigo.

Fran cayó al suelo derrotado, llorando la pérdida de su marido y creador, sentía que todo era culpa suya por no haber estado a su lado y haberle hecho caso cuando le dijo que le dejase solo. Había perdido lo que más amaba en el mundo y no lo iba a recuperar jamás, hiciera lo que hiciese, rezase a quien rezase e independientemente de la cantidad de suero H que usara.

Todos lloraron la muerte de su amigo por unos cinco minutos, Fran recogió el cuerpo con la intención de enterrarlo en un lugar cercano o donde él había deseado descansar llegado el momento, cuando de pronto a Fran se le ocurrió una idea, por lo que comenzó a correr hacia el vehículo y lo acomodó en un asiento mientras era seguido por sus compañeros.

Carlos: Fran, qué vas a hacer? A qué tanta prisa?

Sara: sí, por qué de repente te ha entrado tanta prisa?

Fran: porque sí hay una manera para que vuelva, pero hay que darse prisa.

Oliver: qué manera hay para que pueda volver?

Se hizo un silencio entre todos los integrantes, todos se miraron entre ellos y dirigieron su mirada a Fran, entendieron lo que estaba planeando.

Fran: voy a revivir a Mark.

Sara: está muy bien eso, pero la "máquina E" del abuelo de Mark está rota, apenas funcionó una única vez, se estropeó y nadie la ha reparado. No nos consta de que Brayan lo hubiera reparado en secreto y a Mark nunca le he visto trabajar con esa máquina.

Fran: no, esa no.

Carlos: La máquina E de Mark? Esa vieja máquina todavía funciona?

Oscar: yo pude revivir a Max, eso responde a tu pregunta?

Carlos: no, bueno sí, pero me refiero, podrá volver a funcionar? Las cosas se estropean con el tiempo, más si no se lleva un mantenimiento y después de tanto tiempo y de revivir a unas tres fursonas... pero no podemos dudar, hay que actuar.

Se subieron a todos los vehículos y condujeron a toda velocidad por la autovía directos a la antigua casa de Mark, el tiempo según su marido para poder revivir y conservar la memoria es de una hora, por que? Pues según dijo, es el tiempo que podría tardar un cuerpo en "apagarse" por lo que el cerebro seguiría intacto ese tiempo antes de comenzar a dañarse y que las neuronas comiencen a morir o a fallar, de tal forma el cerebro se dañaría y con ello sus recuerdos y memorias.

Tras media hora conduciendo llegaron a la casa, como ninguno de ellos llevaba llaves para abrir la puerta, decidieron entrar por la vieja confiable, la puerta del costado que se quedaba abierta. Abrieron la puerta y se dirigieron directamente al "laboratorio" donde estaba la máquina E, esa vieja máquina de dudosa funcionalidad por sus piezas nada fiables.

Fran introdujo a Mark en el tanque y lo llenó con el líquido viscoso que alguna vez usó con él mismo.

Carlos: tenemos que preparar las cosas, tardará tiempo en preparar todo y tenerlo a punto...

Fran: no hay tiempo, nos quedan quince minutos y no sé si hay que conseguir más energía!

Oscar: yo logré revivir a Max.

Carlos y Fran: Pero esperaste a un momento oportuno y no porque tú quieres!

El sorprendido hijo se encogió un poco ante los gritos de su padre y Fran. Sin dudarlo dos veces activaron todos los sistemas de la máquina para comenzar el proceso.

Carlos: veamos si recuerdo cómo funcionaba, prepárate para activar el conversor, esa palanca de ahí!

Fran: -va donde le ha dicho- esta?

Carlos: sí, solo tenemos que esperar a que se cargue al máximo de energía para poder hacerla funcionar correc...

No terminó la frase cuando la máquina comenzó a sacar chispas y a echar humo, algo inusual y que el husky no recordaba que hiciera. A los pocos segundos la máquina perdió potencia, pero Fran no estaba dispuesto a ver como su única oportunidad se le escapaba.

Fran: no, no! No te apagues, no ahora!

Carlos: la máquina pierde energía, la corriente eléctrica no es lo suficientemente potente como para llevar a cabo el experimento, necesitamos encontrar otra manera.

Oliver: usemos la energía que puede producir el motor del thiger-2, puede que logremos producir todo lo que necesitamos.

El tiempo corría en su contra, usaron la energía que podía producir el motor del thiger-2 para alimentar de electricidad a la máquina E de manera que, con todo, se pudiera llevar a cabo el experimento.

Oscar: ya está listo.

Camila: hemos conectado todo con el motor.

Lucia: hay luz en la casa, por lo que por ahora la corriente de la casa sigue funcionando.

Habiendo conectado todo, y con apenas 5 minutos antes de que termine el plazo que Mark dio, conectaron la máquina y la cargaron lo máximo que pudieron.

Las chispas salían de la máquina de manera descontrolada, el humo comenzó a inundar el lugar a pesar de ser un humo débil.

Sara: si seguimos así la casa se puede –salta una gran chispa- ah! Incendiar!

Carlos: un poco más, conecta el conversor Fran!

El lobo blanco bajó la palanca y de seguido Carlos hizo lo mismo con otra que hizo descargar toda la energía acumulada al cuerpo de Mark.

Chispas, humo y sonidos raros salían de la máquina que ejecutaba su cometido, a pesar de todo ello, de pronto se apagó dejando algunos incendios en los lugares donde antes salían chispas y marcas negras de donde había salido humo con anterioridad. La máquina E había terminado su cometido, definitivamente había perdido toda su energía.

Mi Frankenstein 2 (Furry/Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora