Nayeon veía a la mismísima Yoo Jeongyeon entrar por cuarta vez en la semana a la enorme cafetería, mientras pedía simpre lo mismo y fingía no conocerla como ella recordaba.
Le emocionaba en parte eso, recordaba algunas cosas vagamente, pero lo que nunca olvidó fué a Jeongyeon, cuando pudiera, le agradecería lo que había hecho.
— Aquí está de nuevo Yoo, lo suficientemente frío, como te gusta. — le entregó el vaso, mientras le daba una corta sonrisa.
El silencio estaba ahí, muy pocas veces la veía hablar esos últimos días, parecía pensativa. Pero no se arriesgaría a verse como una entrometida al preguntar.
Suspiró despues de algunos segundos de no escuchar absolutamente nada de su parte, dandose la vuelta.
— Espera
"..."
Suspiró de nuevo, dándose la vuelta y mirandola, mientras esperaba que siguiera con lo que iba a decir.
— El día en el que te he llevado a casa, había un chico - Era un tema que no quería tocar, por lo menos no ahora. — ¿Es tu prometido? — preguntó atentamente.
— ¿Prometido? - No podía llamarse prometido alguien como Siu. — No, no lo es, si era todo, te dejaré disfrutar de tu soledad. — contestó, terminando el tema.
Caminó, recordando todo lo sucedido desde ese día hasta ahora. Su cabeza ya no parecía doler fuerte, pero aún tenía una enorme herida en su frente y corazón, hubiera preferido que Jeongyeon hubiera sido sincera ese día en el hospital.
Sintió los pasos de Jeongyeon seguirla, mientras suspiraba pesadamente, estaba agotada en sí.
— Se que posiblemente sea ahora una extraña, pero he querido hacer esto hace algún tiempo. — extendío su celular — Necesito tu número, sólo para saber si has llegado a casa bien, por lo de tu cabeza. — Se excusó rápidamente.
— ¿Tú le darías tu número telefónico a un extraño?
"..."
— Bien, te lo daré. — la verdad era que, desde que la conoció y antes del accidente, ya quería pedirlo.
Pudo ver un pequeño brillo en los ojos de Jeongyeon, mientras se reía inconcientemente de su reacción, si se comportara así siempre, posiblemente se enamoraría verdaderamente de ella.
— Bien, quiero que me llames cuando llegues a tu casa.
Tomó sus cosas despues de eso, saliendo.
Hoy sería una grandiosa noche, ya que estaba casi recuperada, iría por fin a donde Jihyo y bailaría como comúnmente lo hacía por las noches, ¿Qué podría salir mal? Todo, Gracias a que alguien estaría en el público esa noche.
— Vamos Yoo, puedes encontrar a una chica más bonita en ese club, ya que Nayeon no te recuerda, entonces busca una parecida a ella. — Chaeyoung necesitaba ir ahí y ver a Mina, había investigado y sabía que hoy era una noche especial para la chica.
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𝗕 𝗟 𝗨 𝗘
Fanfic"realmente mi pulso se acelera cuando pienso en tu piel cerca de la mía" Yoo Jeongyeon es la ceo de una famosa empresa de entretenimiento en Corea, pero tiene que mudarse en una semana a Estados Unidos para dirigir la empresa de su padre. Su vida si...