-De verdad- Merlina se queda a medio camino sin querer decir lo demás.
-¿De verdad?- Mal pregunta queriendo que Merlina continúe.
-Me... Me gustas-
-¿Que?
[🖤👾] Al día siguiente por la noche, Mal y Merlina se encontraban en la habitación de la pelinegra.
—¿Ya no te vas a morir?—Merlina pregunta hacia la pelimorada, quien niega con una pequeña sonrisa.
—Estoy mucho mejor— Mal responde y Merlina asiente.
—¿Puedes hacerme un favor?—Addams se acercó a la pelimorada quien asintió.
—Dime—Mal murmuró.
—¿Puedes prestarme tu computadora?— Mal fruncío el ceño pero asintió.
—Es mejor que usemos la de Enid, para no ir hasta mi habitación— Mal se sentó en la silla del escritorio y escribió la contraseña, que era su nombre combinado con el de Enid.
Luego de unos segundos el sonido de llamada resonó por la habitación, las dos chicas se acercaron, Merlina se sentó en la silla viendo con una mueca a Mal.
—Tienes que presionar aqui— Mal le señalo el botón y Merlina hizo lo que le ordenó, la cara de Tyler apareció en la pantalla.
—Ah, hola— Tyler saludo con confusión.
—Es dedos.
—Es... ¿tu mascota?
—Es sensible.
—Ya se que Nunca más es el lugar preelecto para las cosas raras pero esto me rebasa y ¿que paso con lo de no querer ser esclava de la tecnología?
—Momento de crisis, ¿todavía me ayudarías a escapar?
—Despues de lo que pasó ayer en el café pensé que te encerrarian para siempre.
—Este fin de semana es el festival de la cosecha, asistencia obligatoria, voy a usarlo como cubierta, si todavía puedes llevarme a la estación de tren puedo hacer que valga la pena.
—Acepto... y descuida la casa invita.
—¿Por?— Mal aparece en la pantalla levantando una ceja.
—Por que desearía ir con Merlina, al menos uno de los dos saldrá de este agujero infernal— Mal se aleja de la pantalla, su mandíbula luce tensa y sus ojos tienen ese pequeño brillo verde, como si estuviera apunto de explotar.
Merlina la mira por un segundo para después colgar la llamada.
—¿Que?— Merlina le pregunta a la pelimorada quien simplemente levanta los hombros.
—¿Aún te irás?— Merlina asiente levemente.
—Me iré, Mal, ya lo habíamos hablado.
—Lo se solo.... si cambias de opinión estaré aquí, esperándote— Mal habla mirando a los ojos a la chica Addams, quien desvía la mirada al no poder mantenerla, extraño.
—Te lo agradezco, Mal—respondio ocultando esa pequeña sonrisa al escuchar que Mal quería que se quedará, con ella.
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El fin de semana había llegado y por ende el festival de la cosecha.
—¿Segura que confías en el?— Enid pregunto con una mueca en su rostro.
—Confio en que se protegerme— Merlina responde, su mano busca la de la pelimorada, Merlina sonríe al sentir la sensación de calidez al agarrar la mano de Mal.
