MY PRINCESS( Merlina Addams x OC FEM) +18

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[🖤👾]-La fianza fue pagada- Un oficial de policía informó, Mal junto a su madre esperaban la salida de ambas mujeres.

-Morticia, cada vez me pareces más insoportable- Las dos mujeres se sonrieron.

-Ay- Mal frunció el ceño al ver el pelo un poco desordenado de Merlina, su mano se dirigió a este y lo peino un poco. Merlina le dedicó una mirada de agradecimiento que Mal entendió a la perfección.

-¿Puedes llevarnos a la oficina del alcalde?- Morticia le pregunto a Maléfica, quien asintió.

-Vamos.

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Mal esperaba con impaciencia a su amiga pelinegra, su ansiedad había aumentado y aún no sabía la razón.

-Calma- Maléfica pidió con un tono de voz tranquilo, mirando a su hija con un poco de preocupación.

Mal vio salir a hija y madre de la alcaldía de Jericó, quiso acercarse pero su madre la detuvo por unos minutos.

-Dejalas, están charlando de algo importante- Dijo como si supiera perfectamente de lo que hablaban, Mal rasco su nuca nerviosa y apretó su mano en un puño clavando sus uñas en este causando que la sangre cayera al suelo.

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-Cuidate, Igna, no quiero volver a este pueblo por que moriste-Su madre la abrazo con fuerza y dejó un beso en su frente-Te amo-Le confesó, Mal la miro con ojos confundidos, jamás había recibido un te amo por parte de su madre.

-Yo igual, madre- Mal sonrió y abrazo de nuevo a la mujer frente a ella, quien sonrió para luego alejarse con dificultad.

Su madre subió al carruaje y este arranco, Mal sonrió melancolíca y miro hacia otro lugar observando a Merlina que de igual forma la miraba.

Mal solo se dio la vuelta, sintiendo como su mundo daba vueltas, corriendo hacia su habitación, en cuanto entro vio a Yoko en su cama.

Mal cerro la puerta detrás de ella con fuerza, sentándose en el suelo y haciéndose bolita, mientras sentía el aire escaparse de sus pulmones.

-Ey- Yoko se acercó preocupada, tocando el hombro de su amiga sin importarle el ardor en su mano - Todo estará bien- La abrazo contra su pecho haciendo una pequeña mueca al sentir el calor indundandola.

-No quiero amarla- Mal susurro-No quiero, Yoko, no quiero.- Yoko asiento y la abrazo aún más fuerte.

-Lo se, lo se.

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-¿Que hice?- Merlina pregunto hacia la pelimorada, quien solo cerro sus ojos con fuerza sin querer hablar ahora.-Mal- Murmuro, suplicando.

-Dime- Susurro.

-¿Hice algo mal?- Merlina pregunto y Mal por primera vez le dirigió la mirada, negando levemente.

-No, lo lamento, solo que yo...

-¿Tú?

-Estoy un poco cansada.

-¿Puedo decirte algo?- Merlina se acerca un poco más y Mal traga nerviosa.

-Dime.

-De verdad...- Merlina se quedó a medio camino sin querer decir lo demás.

-¿De verdad?-Mal pregunta queriendo que Merlina continúe.

-Me... me gustas.

-¿Que?- Mal abre sus ojos sorprendida, sin reaccionar.

-Olvidalo, yo...- Sin decir más Mal tomo con fuerza la chaqueta de Merlina acercándola a ella con rapidez y atrapando sus labios entre los de ella. Merlina no se negó, sus labios se movieron en sincronía, Mal choco contra una mesa botando el lindo jarrón que tenía encima.

-Eres un pequeño desastre- Merlina negó pero de nuevo busco sus labios, anelando la increíble y caliente sensación.

-Tu también me gustas, por si no había quedado claro- Mal sonrio en medio del beso, sus ojos brillaron en un color rojo fuego, sintiendo el aire volverse candente.