CAPÍTULO III: "BLACKROSE I"

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La vida relativamente normal siguió dentro del asentamiento, sin preocupaciones o malos preludios a lo que pasó en el supermercado. Ya pasaron dos semanas de esa operación llevada a cabo por el grupo de Mateo. Por ahora y por órdenes del líder, el grupo está pasando desapercibido por un tiempo para no llamar la atención de "visitantes inesperados", tal y como dijo Mateo en su tiempo.

Probablemente refiriéndose al Escuadrón de la Perdición o tal vez a los extraños sujetos que estos se encontraron en el supermercado. Pero como ya se mencionó el grupo lleva dos semanas escondidos. Durante ese tiempo Mateo continuó velando por el buen cuidado de la mujer herida que habían encontrado, también Drake y Sara se volvieron mucho más cercanos, incluso declarando ya como oficial una relación entre estos dos.

El resto del grupo continua igual que siempre, Amelia ya está cada vez más avanzada en su embarazo, aunque de momento no tiene ni un interés en el cuidado del bebé cuando nazca, por la forma inesperada y trágica en la que fue concebido.

José Manuel y Andrea continúan igual que siempre, lo mismo con Juan y Carlos. Aunque esta vez quienes han trabajado más constantemente son justamente los que no participaron de lo del supermercado, siendo en este caso Daniel, Nanno y Sara. Quienes son ahora los encargados de cazar y de demás actividades normales.

Un día, durante la mañana, el líder del grupo, engalanado en sus mismas ropas de siempre se dirige a la oficina del doctor, para ver cómo está la muchacha que había rescatado, ya que según lo que hablaba en diferentes ocasiones con el doctor, el cual comentaba que anticipaba que la muchacha sería dada de alta justamente ese mismo día.

Se encontraban en la última semana de abril, el día si bien estaba nublado y una ligera garuga en el ambiente, junto a un frio abrazador, el cual Mateo lograba contrarrestar gracias a su abrigo largo negro, el cual estaba abotonado tapando el resto del conjunto que lleva el hombre, también llevando pantalones negros que combinan con el resto de las prendas y las botas negras que utilizó cuando estuvo en las montañas, solo que estas estaban por debajo del pantalón.

Este al llegar a la ya anticipada y mencionada oficina del médico, al ingresar es recibido amablemente por el avejentado médico. Este le saluda amablemente y da a entender que le estaba esperando para hablar de la muchacha, la cual está en las habitaciones de atrás haciendo reposo intensivo, el doctor explica que la mujer tenía impactos de bala en el estómago y en el pecho. Siendo este último el impacto más letal y que por poco acaban con la vida de la muchacha, casi rozándole el pulmón derecho, siendo un trabajo extremadamente difícil sacar el proyectil y curarle la herida. Pero el trabajo está hecho, por lo que el doctor le abre el paso a Mateo a la parte trasera para que pueda interactuar con la muchacha desconocida.

Mateo entra a la habitación, en donde encuentra la muchacha en el fondo de esta, vistiéndose con sus mismas ropas, lavadas pero desgastadas. Dejando ver una espalda llena de cicatrices y tapada con vendas por las curaciones que se le hizo.

Esta mujer era de una tez blanca, un cabello negro, largo y suelto. Una estatura superior a la mayoría de las mujeres del grupo, exceptuando a Andrea, pero superior ligeramente a Sara. Además de una complexión delgada. Llevando unos pantalones negros extremadamente desgastado, en donde está lleno de parches grises. Las prendas superiores constaban de otra prenda negra desgastadas, esta vez correspondiendo a un sweater gris y una chaqueta negra agujereada y desteñida, sumado a unas botas cafés.

—Con que estás viva. Tuvimos suerte de que te encontramos y te trajimos. —Dice Mateo llamando la atención de la muchacha, que una vez que se colocó las prendas superiores se volteó hacia el hombre, revelando su rostro.

Siendo el rostro de esta desconocida muchacha uno bastante descuidado, pero bello pese a eso. Con una cicatriz en la ceja derecha y una de igual tamaño en la parte inferior del labio y unos ojos azules que llaman la atención a cualquiera.

DUST II: CONDENADOS Y PERDIDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora