TIEMPOS MEJORES

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—¿Qué tal van las cosas con Liam? —preguntó Brand.

Lo miré extrañado. Llevamos un tiempo hablando y de la nada sacó a Liam.

—Bien... todo ha ido bien.

—Yo... me alegro por ustedes —se acercó a mí, se sentó a mi lado en mi cama—. Vi los artículos...

Asentí despacio.

—Ha ido todo bien, gracias.

—No te voy a mentir, sales bien guapo junto a Liam.

—Gracias.

Hace una semana que mi rostro había sido publicado. Ha pasado bastante tiempo y Jonathan decidió que era el momento. El mes paso muy rápido y lo que parecía ser que faltara un tiempo para las vacaciones, ahora solamente faltan días.

Mis clases ya terminaron, ahora estoy empacando para dejar mis cosas en casa de Liam durante el tiempo que no esté.

—Cuenta conmigo para todo, Zayn. Te quiero.

—Gracias, Brand —dejé mi cabeza en su hombro—, pero mejor háblame de tu hombre.

—Oh... Paul... él... es increíble, Zayn... Hablamos todas las noches, reímos, nos divertimos, sin duda alguna es el indicado —me aseguro.

—Me alegro por ti, Brand —le di un pequeño abrazo—. Te dije que llegaría esa persona para ti.

—Y muchas gracias por soportar todos mis llantos —comento avergonzado.

—Para eso estamos.

Me quite la camiseta quedando solamente en short, saque mi móvil y le empecé a hablar a Liam mientras buscaba una camiseta limpia.

—Oye... estás más rellenito —comento Brand a mi espalda.

—¿A qué te refieres? —pregunté girando mi cabeza y arqueando una ceja.

—Está aumentando tu masa muscular —respondió sorprendido.

—¿Sí?

—Sí... muchísimo... sea lo que sea que estás haciendo, no dejes de hacerlo. Te ves bien.

—Gracias. Últimamente, le he comido mucho la polla a Liam —comenté poniéndome la camiseta nueva que encontré.

No resistí y sonreí. Levante la vista para encontrar a Brandon quieto en su lugar mirándome fijamente. Se veía muy sorprendido.

—Joder... No me esperaba eso...

Solté una gran carcajada.

—Estoy de joda, Brand. Solamente te estoy molestando... —respondí riendo, aunque era una pequeña mentira.

—Simplemente, haré como si no escuche eso... Pero ahora no voy a parar de preguntarme de qué tamaño la tiene Liam...

—Brand... —lo miré fijamente y mantuvo su mirada también—. Joder —no aguante y me volví a reír, esta vez Brand junto conmigo—, tampoco me esperaba eso.

Se encogió de hombros y siguió riendo.

Negué con la cabeza divertido por la situación y le envié mensajes a Liam diciéndole que estaba arreglando mis cosas y que en la noche estaría en casa. Luego busque el número de mamá y la llame.

Estuve hablando bastante tiempo con mamá, y estaba muy feliz de que por fin podrá verme después de tanto tiempo.

—Mamá, sabes que no me gustan las fiestas —respondí con obviedad.

—Pero cariño, debes salir un poco más. Sé que te esfuerzas mucho, no es malo tomar un descanso.

—Y lo haré, para eso son las vacaciones.

GRINDR |ZIAM|ⓁDonde viven las historias. Descúbrelo ahora