Más que esto © YoonMin

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—¿Cómo fue estar enamorado?

La pregunta toma por sorpresa a YoonGi. El no lo dice y tampoco lo demuestra, pero la incomodidad se dispara a niveles increíbles mientras termina de abotonar su camisa, con JiMin aún sobre la cama.

Esto es nuevo también.

JiMin no suele ser el tipo de persona que expresa sus dudas, por muy inofensivas o inquietantes que sean. Pero que lo haga de un día a otro, debe depender en gran medida a la distancia que YoonGi está obligando con los padres del chico.

—¿Qué? —Se encuentra diciendo, atento al doloroso apretón en el pecho.

Ese no es un tema que quiera hablar. No con JiMin, no con un amigo, no consigo mismo. Supone que está enterrado en lo más profundo de su mente y que el hecho de recordar a la presencia que está enlazada con el sentimiento de un amor, es.. simplemente difícil de expresar.

—Tu estuviste.. —JiMin titubea, enredándose más en las sábanas. Sus hombros desnudos se ocultan bajo las mismas y sus ojos atentos persiguen los movimientos de YoonGi. —Recuerdo a Aoi.

YoonGi detiene sus dedos y por un segundo parece que no quiere respirar. Hay algo horrible en la forma en que un solo nombre puede joder tu día.

—Se que estaban enamorados.. —JiMin, aún sin percatarse de que es un tema tan delicado, continúa su pequeña conversación. —Pero después cuando murió..

—Lo asesinaron. —YoonGi dice en automático, aclarandose lo suficiente como para terminar de vestirse con más rapidez. —Fue asesinado, no olvides recordar eso cuando quieras saber algo de mi ex pareja. Todavía me jode un poco cuando lo hacen ver cómo un puto accidente, cómo si no le hubieran arrebatado la vida cuando lo tenía todo, cuando lo teníamos todo.

JiMin entonces guarda silencio y YoonGi desearía que el tema no se hubiese tocado nunca. No es culpa de JiMin tener dudas acerca de la vida de su esposo, pero no hay forma de que reaccionara de otra forma contra un tema que nunca fue olvidado.

Perder a Aoi solo pudo ser comparado con perder también parte de su propia vida.

—Lo siento. —JiMin finalmente dice y YoonGi niega. Su atención fija en recoger el resto de sus cosas.

—Simplemente no toques temas que no son para ti, JiMin-Ah. El pasado es el pasado y es duro. El presente es este y en el, estoy casado contigo y estoy..

JiMin aguarda en silencio, pero en esos momentos es difícil hablar.

—Solo no digas su nombre.

—Si, lo siento mucho. Solo.. solo sé que una cosa no tiene que ver con la otra.

Pero a la vez si, porque YoonGi sabía que JiMin hizo la comparación totalmente conciente de que solo había amado a una persona en la vida.

Tomando sus llaves, YoonGi lo miro de nuevo y forzó una sonrisa en sus labios. La noche anterior había sido increíble y ellos estaban bien en los términos en los que tenían que estarlo.

No quería ponerlo triste y no quería enfadarse todo el maldito día.

—El amor es diferente para todos, JiMin. Por muchas cosas que escuches o leas, no existen las palabras para expresar ese sentimiento. No lo sé, mi tipo de amor terminó doliendo.

JiMin parpadeó. Él también sonrió o por lo menos lo intentó. Fijó su mirada a los pies de la cama y asintió para si mismo antes de recordarle que se le hacía tarde y que cenarían más tarde.

YoonGi se quedó un rato más, antes de asentir también y salir de la habitación.

Hay algo extraño con tener todo y no saber exactamente lo que significa en tu vida.