SIETE (PARTE II)

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Pov Neteyam

El Tsaheylu es un vínculo que utilizan los na'vi para lograr una profunda conexión con los animales y con Eywa.

Cuando comencé a crecer mi padre me explico que el día que conociera a una pareja, durante el apareamiento, también formaría dicho vínculo.

Lose, esa es hasta la fecha la conversación más incómoda que he tenido con papá.

La conexión de un na'vi con otro, genera algo tan fuerte que se pueden sentir las emociones, se comparten recuerdos y sensaciones.

Pero va más allá de algo sexual. El tsaheylu es abrirle tu alma y expresarle sin palabras todo lo que hay en tu cabeza y corazón.

Siempre pensé que el momento en el que hiciera esto con alguien, sería en otras circunstancias, pero cuando vi a Laia luchando para no morir, no tuve dudas.

Ahora, sin importar qué pase, una parte de ella siempre estará conmigo y una parte de mí siempre estará con ella, porque formar el vínculo, no solo es abrir una puerta de la que nadie más que tú tienes la llave, sino que además es para toda la vida.

Es por eso que es tan especial y tan íntimo.

Conecte mi trenza a la suya y una oleada de emociones y sensaciones me golpearon.

Fue como si hubieran prendido una fogata en mi pecho.

Reprimí un gemido cuando un cosquilleo me recorrió de pies a cabeza asentándose en un lugar en específico.

Neteyam no es el momento...

Respire hondo varias veces para calmar la sensación que poco a poco fue disminuyendo para dar paso al sentimiento que más presente tenía Laia en ese momento, el miedo. De inmediato mi mente viajo a un recuerdo guardado en la mente de la chica.

Un monstruo de afilados dientes los atacaba, las imágenes fueron muy rápidas, pero fue todo tan vivido que se sintió como haber estado con ella en el momento en que se defendía del animal.

Acababa de confirmar la historia de mi hermano, estaba todo ahí, en su memoria.

- ¿Estás bien?- estaba tan sumido en los sentimientos y sensaciones que recorrían mi cuerpo y mente, estaba tan sumido en ella, que había olvidado que Ronal y mi madre seguían ahí.

- Si madre.- mi voz salió como si fuera un hilo- Háganlo, estoy listo.

Ronal asintió y se acercó a Laia y su herida.

- Esto te va a doler, prepárate- me advirtió.

Si lograba sentir y compartir las sensaciones que Laia tenía, es porque mi plan había funcionado.

Cuando Ronal comenzó a coser la herida, una oleada de dolor me apretó como si me estuvieran aplastando los huesos bajo una roca.

¿Cómo Laia había podido soportar todo esto ella sola?

Di un grito desgarrador.

- Neteyam suelta la conexión!- exigió mi madre- Es muy peligroso. Suéltala ahora.

- No... déjame, yo puedo- gruñí.

Apreté los dientes a tal punto que sentía el sabor metálico de la sangre en mi boca, pero era la única manera de no gritar.

Mi respiración era pesada, y el sudor me caía por el pecho.

Pero nada importaba porque estaba dando resultado.

- Sus latidos se están estabilizando- dijo mi madre.- Ya queda poco, ambos lo están haciendo muy bien.

Los minutos se sentían como horas.

TE VEO - NETEYAM SULLY (EN PROCESO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora