Pequeñas aclaraciones y detalles:
Neteyam y Ao'nung en esta historia tienen 20 años, ya que es una historia clasificación +18, me crea un poco de conflicto pensar que sean menores.
Yo sé que en Avatar se maneja diferente (creo, no tengo los comics...
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Ao'nung había prometido algo, y los expresivos ojos de su pequeña hermana se lo recordaron. Pasando siete noches, tenía que cumplir con su palabra.
- Reya ¿Ocurre algo? – su madre la cuestiono. Evitando la mirada posada en Ao'nung, el joven por fin pudo respirar y comer tranquilo. Ronal se confunde incluso más.
- Estoy emocionada. Ao'nung se unirá a las lecciones hoy – Tsireya controlo sus ganas de brincar en su lugar. No quería tirar su desayuno.
- Ao'nung ¿No te había dado una orden? – Tonowari cuestiono a su hijo.
- Tenía que buscar un reemplazo de mis responsabilidades – dejo su desayuno de lado, se inclinó mostrando respeto – Lo siento padre.
Tonowari toco su hombro. Ao'nung levanta la mirada – Está bien hijo, solo avísame para la próxima - Ao'nung volvió a disculparse con respeto. El desayuno surgió en un ambiente tranquilo.
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Total, desastre. Esa era la opinión de Ao'nung al llegar a las lecciones que Tsireya enseñaba con tanto esmero. Los Omaticaya no tenían la menor idea de como respirar bajo las profundidades del arrecife. Saliendo cada vez que les faltaba el aire.
Maldición. Tragándose un sinfín de malas palabras.
¿Qué les pasa? Ao'nung empleando el lenguaje de señas, cuestiona a los dos Metkayina.
No saben nadar bajo el agua Rotxo le responde.
Están aprendiendo Tsireya tratando que su hermano comprendiera, Ao'nung realiza un gesto descifrable.
Nadando fuera de la superficie. Tsireya es la primera en aparecer delante de los hermanos.
- ¿Están bien? –
- Van muy rápido, espérenos –
- Solo respiren, como practicamos –
Ao'nung sale al cabo de unos segundos – No saben nadar – frunce su expresión. Un comentario le viene a la mente – Tal vez se columpien de lianas, pero... - Tsireya le da un ligero golpe en su hombro. Ao'nung la observa confundido.