Frenesí (LM #2)

09. Charla de chicas (y Val)

09. Charla de chicas (y Val)

Y si no soy el amor de tu vida,
confúndeme con él
- Andrés Ixtepan

Ava Brown

Creo que insulté a Asher de todas las maneras que conocía, la incomodidad en mi vientre y entre mis piernas casi dolía y me sentía arder por dentro.

Su polla continuaba erecta, golpeando sus pantalones cortos, y sé que él estaba igual o peor que yo.

Pero Asher tenía autocontrol. Yo no. Y mis ganas de saltarle encima crecían con los segundos, sin embargo, era competitiva y no pensaba perder.

El rubio aparcó el coche frente a Santa Catalina, donde los gemelos y Abi se besuqueaban. Me pareció ver a uno de ellos meterle la mano en el interior del pantalón a la pelirroja.

Apreté las piernas. Mierda.

Noté a Asher sonreír y le dediqué una mala mirada antes de que él se bajara del coche. Lo seguí.

—¿Podemos unirnos? —inquirió, Abi rió sobre los labios de uno de los gemelos (el que no tenía la mano dentro de su pantalón) y los obligó a alejarse.

—Vete al infierno —gruñó uno de ellos.

—Temen que me quede contigo —bromeó la pelirroja, colocándose bien la ropa.

—Abigail —advirtió uno, aunque mantenía una sonrisa ladina. Una de esas sonrisas que prometían muchas cosas, una de esas sonrisas de protagonista de libro.

Ella se carcajeó, dándole un beso rápido.

—¿Y Lil y Val? —cuestionó Asher, apoyándose en un árbol con los brazos cruzados.

Mierda, que sexy estaba con esa pose.

Mis muslos se tensaron y evité maldecir.

—De camino, los gemelos estaban en mi casa así que ellos vienen en el coche de Lil.

—Oh, ¿ya habéis conocido a la suegra? —se burló Asher.

—Pues sí, y déjame decirte que es encantadora.

El otro gemelo solo rodó los ojos, aunque con una casi invisible mueca divertida.

El coche de Lilith, un Audi negro muy bonito, llegó y la escuché maldecir mientras se bajaba acompañada de Valak.

—Sois idiotas, mi coche no puede pasar por este terreno —bufó. Luego, nos sonrió—. Hola, chicas.

—Eso es favoritismo —acusó uno de los gemelos.

—Es que ellas me gustan.

—Uhhh —rió Asher.

—No me robes a la novia, Lil —advirtió el otro gemelo, aunque con diversión.

Supongo. Realmente nunca sabía si hablaban en serio o en broma.

—Tu novia me prefiere.