21. Cumpleaños, parte 2
Ella ama las tormentas eléctricas,
porque eso demuestra que incluso
el cielo pierde el control a veces
- Ron IsraelAva Brown
—¡Me cago en la puta! ¡¿Por qué has hecho eso?! —gritó Lev, asustado, mirando a Val que todavía estaba pálido. El gemelo estaba empapado, se había quitado la camiseta y Lil le había pasado una toalla para que se secara.
—¡¿Yo?! —le devolvió el bramido— ¡¿Por qué has hecho eso tú?! ¡Ella iba a irse! ¡¿Por qué tenías que soltar esa mierda?!
—La Manada no me agacha la cabeza a nadie —recordó.
—¡¿Ni siquiera a una loca que tiene un arma?!
Y por el pánico de los Greco, pude ver una cosa. Quizá sus padres eran asesinos, pero ellos nunca habían visto un cadáver.
Hasta ahora.
—Tenemos que llamar a mamá —susurró Lilith.
—No, vendrá con Azazel —gruñó Ex. Creo.
—Es tu padre, Ex.
—Amenazó a mi chica.
—Ya no soy tu chica —le ladró Abi.
—¡¿Podemos centrarnos?! —interrumpí yo. Aún sentía el corazón en la garganta y me sudaban las manos, pero no iba a ir a la cárcel. No.
Un verano no iba a joderme la vida que tanto había planeado.
—Hay que hacer algo —murmuró Ash, que parecía leer mis pensamientos.
Tragué saliva, o lo intenté, porque tenía la boca seca.
Mierda, mierda, mierda. Habíamos matado a alguien. Matado. Asesinado. Dejado seco. Extinguido. Cepillado. Despachado...
Mierda. Mierda. Joder.
—Sí, llamar a nuestros padres —afirmó Lilith.
—No te lo tomes a mal, Lil, pero a mí tampoco me hace mucha gracia estar cerca de Azazel —murmuró Abi, eso pareció convencer a la rubia porque suspiró.
—Bien —miró a su alrededor—. Buscad cuerdas y algo de peso.
—¿Algo de peso? No tenemos nada que pese —se desesperó Val, sus manos continuaban aferrándose al cuchillo con tanta fuerza que sus nudillos se habían vuelto de un color blanco.
A paso temblorosos por el miedo de tener un cadáver frente a mí, me acerqué al menor y le quité delicadamente el cuchillo.
—Está bien, Val, vamos a solucionar esto —le susurré, aunque no sé si sonó convincente.
—La nevera —señaló Lilith.
Ash llegó con una soga mientras que los gemelos sacaban la mini nevera de su lugar. Abi comenzó a atar la cuerda a las piernas de Stephanie Catson y luego Lev la ayudó a amarrarla y unirla a la nevera. Le entregué el cuchillo a Ex, que lo metió en el interior del aparato.
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Frenesí (LM #2)
Storie d'amoreAva Brown era una soñadora. Siempre con la cabeza metida en algún libro, sin darse cuenta de lo que pasaba en el exterior. El romance erótico era su categoría favorita, sin duda. Pero estaba cansada de solo leer las historias. Quería vivirlas. Y...