De Flores Y Espadas - Lucerys Velaryon

Lys, Lucerys.

Advertencia: es un capítulo muy intenso, todos los anteriores capitulos han sido narrados por terceros, esto es lo que pasó a través de la víctima real aquí, Lucerys.

En alguna parte de Lys, 5 años atrás.

La música suena fuerte en toda la casa, no alcanza a cubrir los gemidos ni los gritos, pero tampoco era ese su propósito.

Un chico de cabello castaño rizado esta sentado en las piernas de un hombre mayor, el hombre rodea el cuerpo con sus brazos como una serpiente desde la cintura hasta parte de los muslos, apretando la carne cada vez que puede entre chistes y conversaciones sosas, el chico tenía la cabeza escondida en el pecho del señor mayor.

Eran Lucerys y Jaffar.

Lucerys tenía ya  2 lunas desde que había sido expulsado de Westeros.

Jaffar era un mercenario que había soñado con ser maestre, pero fue expulsado de la ciudadela y una vez le dijo a Lucerys que no hubiera respetado su juramento habiendo piernas como la suyas allá afuera.

Lucerys tenía sus ojos mojados, pero no suelta una lágrima, Lucerys nunca llora, ha pasado peores momentos que sentir la mano de Jaffar subir por su muslo y no ha soltado lágrima alguna, no lo hará solo por qué están usándolo como un muñeco de trapo.

A Lucerys le agrada jaffar, no lo golpea  (no tan fuerte) tampoco le jalaba el cabello o lo insulta a él y a su madre, tampoco lo droga y luego de que Lucerys enterrará su cabeza en la almohada le contaba cosas que los maestres hacen.

— Si un maestre te da un té de manzanilla entonces cree que no tienes nada, es un placebo que usan mucho.

— Si un maestre no encuentra una vena entonces golpeara 3 veces en dónde debería estar, tiene que ser suave dragón, con tus dos dedos índice y de en medio, así mirá...

— Las túnicas son blancas por qué así sabrán otros maestres que si hay manchas verdes, entonces está preparando veneno...

La solead se lo come vivo, esta tan perdido que una platica unilateral con el hombre que pago por su cuerpo no es mas que una distracción de la realidad, lejos de su mente l maldad y crueldad de la situación dejo de importar hace tanto tiempo, solo mendigndo un poco de humanidad en su vida.

Le relata historias de él navegando (eran las favoritas de Lucerys) , en bravoss, en ashai, cuenta que un día se enfrentó a un Kraken que media 50 metros y era el Kraken más pequeño que alguna vez habían registrado.

— Era enorme Lucerys, enorme encerio, ustedes los Valyrios tendrán dragones que lideran los cielos, pero en el mar un dragón no es pelea ni para el Kraken más pequeño, aunque los celtigar una vez difundieron que tenían un cuerno capaz de convocar al Kraken más grande de todos, una cosa tan grande que dejaría a las montañas de Yi Ti como simples colinas...

Lucerys siempre trata de tener su mente en otros lugares, por qué por muy agradable que era jaffar en comparación con otros clientes, su mano en su interior es algo que no quería.

Siente el toque de jaffar como acidez, caliente y picante, su piel arde en incomodidad y desespero, siente sus entrañas revolverse y sus ojos se humedecen de inmediato, su mano viaja protectora por mero instinto a su vientre, siempre alerta, siempre en peligro, su vida en manos de un hombre desconocido, diferentes cada noche, distintos cada día. ¿Cuándo será el día que muera por uno de ellos? ¿Cuándo será el día en que su alma errante al fin pueda encontrar paz?

No quería nada de esto.

¿Cómo acabó aquí? ¿Cómo hace 3 lunas estaba él a lomos de Arrax y ahora estaba en una casa que olía a tabaco, ron y tenía las sucias manos de este tipo encima suyo? .