¿Que pasa cuando amamos a alguien que no está destinada a nostros?¿Luchamos por ella o la dejamos ir ? Eran las preguntas que Azriel se hacía día a día mientras miraba con añoranza a Elain caminar por los pasillos , mientras veía a sus hermanos ser...
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CHAPTER FIFTEEN
-Dime , Gwyneth ¿Cómo conociste a mi hijo?- Preguntó la madre de Azriel mientras Gwyn terminaba de comer su trozo de pastel de manzanas.
Automáticamente todo quedó en silencio, incluso los grillos y aves de de los árboles que se encontraban alrededor de la pequeña cabaña se quedaron en silencio, el cordial ambiente se transformó en un instante , se volvió tenso y denso mientras la confundida señora miraba a su hijo y a su compañera quienes tenían los hombros super tensos y se habían quedado completamente quietos.
-Mamá...
El estómago de Gwyn se cerró completamente y sus manos temblaron por unos segundos hasta que obtuvo el control nuevamente de su cuerpo. Azriel no se perdió el detalle y se acercó hasta ella que se encontraba sentada en la enorme mesa de madera.
Leyah, la madre de Azriel entendió que un tema sensible por la reacción de ambos.
-Lo siento sé toqué un tema delicado querida -Tomó las manos de la pelirroja desde el otro lado de la mesa. Su hijo no la estaba tocando pero estaba suficientemente cerca de Gwyn para que sus sombras la envolvieron de forma protectora. -No tienes que responder.
Gwyn le dedicó una cálida sonrisa mientras le devolvía el apretón de manos y movió en forma de negación suavemente la cabeza, sus ojos agua marina se habían cristalizado pero ninguna lágrimas se deslizó de ellos.
-Azriel salvó mi vida -Su sonrisa no le llegaba a los ojos cuando miró hacia el cantor de sombras -Estaba siendo... abusada y él llegó...
-Debí llegar antes -La profunda voz del cantor de sombras sonó peligrosa letal, llena de un odio que heló hasta la sangre de su madre -Debí hacerlo sufrir más...
-También me ayudó a convertirme en una valkiria -La cálida mano de Gwyn calló sobre el puño cerrado de Azriel que se encontraba sobre la mesa -Me entrenó , me hizo encontrar mi fuerza y ya no tengo miedo gracias a él y a mis hermanas, y le aseguro que estoy simplificado muchas cosas.
Gwyn ni siquiera había terminado de hablar cuando unos cálidos brazos la envolvieron con fuerza, Leyah la estrechó contra su pecho en menos de nada , como si con su abrazo pudiera protegerla de su pasado , como si fuera una niña asustada de sus pesadillas.
-Oh querida -Gwyn le devolvió el abrazo, sintiéndolo tan maternal que quería llorar -Este mundo lo han diseñado para ser más difícil para las mujeres.Eres tan fuerte... Me alegro tanto de que estés en la vida de mi hijo.
