Capitulo 7

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  Hoy era lunes y las chicas tendrían que volver al colegio.
Además se irían de viaje. Una salida escolar.
En el viaje iba a ir el grado de Danielle y Haerin, el de Minji y Hanni. Y por último el de Hyein.

La australiana (Danielle) estaba muy emocionada ya que iba a estar con su "casi algo". Podrían aprovechar el viaje y poder estar juntas.
Pero tenía el presentimiento de que el viaje no iba a ser tan bueno como quería. Sabía que iba a estar Nayeon ya que era inevitable por ser de su salón y recordaba perfectamente que quería salir con Haerin. 

Antes de ir al colegio puso mudas de ropa en una mochila, una de ellas era de fiesta. Y se alistó para ver si la coreana (Haerin) ya estaba lista.
Por primera vez iban a ir al colegio juntas.
Intentaban aprovechar el tiempo a solas ya que tendrían que decidir en una semana si una relación estaría bien.

Al bajar las escaleras siguió hasta un pasillo y tocó la puerta de una habitación.

-Hae, ¿estás lista?, se nos hace tarde.
-Sii, ahora salgo.
-Esta bien. Estaré esperando afuera.
-Okey.

Abrió la puerta de la entrada y salió a esperarla. En unos minutos la coreana salió y le sonrió a Danielle.
Cerraron la puerta y caminaron hasta la parada del autobús.

-¿Dani?.
-Um, dime.
-¿Puedo agarrar tu mano?.
La pelinegra se sorprendió por la propuesta y miró a la chica para luego asentir.
La menor agarró su mano y entrelazó sus dedos con los de ella.
La mano de Haerin estaba bastante calentita y la de Danielle fría. Así que se sintió a gusto con el contacto.

Cuando llegaron a la parada esperaron unos minutos hasta que el autobús llegara.
Se subieron y se sentaron en uno de los asientos de atrás.

Al llegar al colegio se soltaron y cada una se fue a dónde estaban sus amigas.

-¿Ya vienen juntas?.- preguntó la menor de sus amigas.
-Si.
-Parecen novias.- está vez la que hablo fue la mayor.
-No digas eso.- contesto la australiana.
-¿Por qué?. ¿Acaso se besaron y son novias?.-
La pelinegra se sonrojo al instante y sus amigas se dieron cuenta de que tenían razon.
-¡Se besaron!. No lo puedo creer.- dijo Hyein.
-Si... y estamos pensando si tener una relación a escondidas.
-¿Se lo van a pensar?. ¿Por cuánto tiempo?.- pregunto Minji.
-Una semana...
-Bueno, ya sabemos que van a terminar juntas. Y van a tener que disimular muyy bien. ¿Verdad Minji?.-
-Exacto. Hyein tiene razon.- sobó la cabeza de la menor, cómo felicitandola y ella le sonrió.
Al terminar la conversación entraron a los salones. Allí vió a la coreana hablando con Nayeon.
Se acercó a ellas y se sentó en su banco. Esperando que el profesor llegará.

Después de esperar llegó su profesor y Nayeon fue a su asiento.

-Buen día alumnos. Voy a explicarles bien como va a ser el viaje y como van a compartir sus habitaciones.- todos los estudiantes hicieron silencio y dejaron hablar al profesor.- Iremos a la isla Jeju, y cuando lleguemos se irán a sus habitaciones con los compañeros de banco. Con los que están sentados ahora. No podrán cambiar de compañeros. Así que nadie reclamé eso. Ahora sí, por favor salgan todos ordenadamente al patio. Ahí está el autobús.- todos se pararon y salieron hacia el patio.

A Danielle por un momento le entraron los nervios, porque compartiría habitación con Haerin. Algo que nunca habían hecho. Y de pensarlo le daba miedo y curiosidad de saber si algo iba a pasar.

Al llegar al patio todos los salones estaban formados en 2 filas, esperando a que llegarán los autobuses.

-¿Nos sentamos juntas?.- preguntó la coreana.
-Claro.- Danielle le sonrió y la chica hizo lo mismo.
Esperaron hasta que llegó el autobús y subieron.
Danielle se sentó del lado de la venta y Haerin al lado. Atrás de ellas estaba la molesta de Nayeon.
-¿Estás segura de que no quieres sentarte aquí?.- preguntó la australiana.
La menor respondió negando con la cabeza.

El viaje fue largo y Danielle no pudo dormir, pero Haerin si. Cayó rendida a los hombros de la pelinegra.
Cuando llegaron al lugar los profesores les indicaron a dónde estaban las habitaciones. Todos comenzaron a entrar para poder dormir ya que era muy tarde. Pero Haerin no aparecía. Y Nayeon igual.
Cómo eran familia Danielle tenía el número de la coreana. Asi que le mando un mensaje diciéndole cuál era su habitación.
Se quedó despierta esperándola pero cada vez se hacía más tarde y no aparecía.
Llegó al punto de hacerse la cabeza y decidió salir a ver si la encontraba.
Recorrió todos los pasillos hasta que llegó a un sauna. Abrió la puerta y a lo lejos vio a la chica. Cuando iba a dar un paso más vió a otra persona. Nayeon.

Al quedarse quieta vió algo que le destrozó el corazón. Nayeon se acercó a Haerin y se besaron.
No fue un beso corto, al contrario.
No pudo contenerse más y salió corriendo.
Fue a la habitación y se tiró en su cama, escondiendo su cara en una de las almohadas. Sus lágrimas salieron y lo único que quería en ese momento era desaparecer.
No quería. No necesitaba. No iba a aceptar esa semana para pensar si debían estar juntas.
Con esa imágen que no se podía sacar de la cabeza era suficiente para darse cuenta que Haerin no quería estar con la australiana.

Una noche estrellada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora