Una noche estrellada

Capitulo 25

   El comienzo del año estuvo bastante bien que hasta nos dieron una semana libre.

Mis amigos planearon irse de viaje el fin de semana pero era para las parejas y como yo no tenía me quedé en casa, pero invite a Taylor que era la otra solterona del grupo.

El día del viaje, a la tarde, Taylor llegó a casa. Y al meternos en mi cuarto comenzamos a hablar de nuestra vida.
Ella me contó que tuvo a su madre en el hospital 3 meses y que el día de año nuevo falleció. Al escuchar su historia sentí que por las mismas experiencias debía contarle de mi madre, así que lo hice.

-¿Y hay alguien que te gusta?- pregunto Taylor, acomodándose en mi cama.
-Si, pero vive en Corea
-¿Quien es?
-Te lo diré pero... No te alteres ¿si?
-Si, no te preocupes, estoy preparada para todo
-Bueno, si tu dices... Es una chica, se llama Haerin y  es mi hermanastra...
-Que lindo nombre... ¡¿Espera que?!. ¡¿Tu hermanastra?!
-Si...
-Wow, Danielle Marsh enamorada de su hermanastra, quien iba a decirlo
Mis mejillas comenzaron a tornarse rojas de la vergüenza.
-Espera. Por eso rechazaste a todos los chicos del año pasado ¿verdad?
-¿Que chicos?
-Tomas y John
-Ahh, exacto. Los rechace por Haerin, tenemos planeado volver a ser novias cuando termine mis estudios
-Asi que ya fueron novias antes
-Si y su madre nos descubrió, por eso estoy aquí...
-Ahh así que esa es la razon... Mira de lo que me vengo a enterar
-Si...
-¿Y por que no te veo nunca hablando con ella?
-No sé... La extraño tanto que no podría aguantar y iría corriendo a Corea... Por eso hablamos por cosas importantes
-Pero Dan, ella te gusta. ¿Por qué no la llamas?
-¿Ahora?
-Si, inténtalo, verás como te gustará escuchar su voz y querrás hablarle siempre... Inténtalo
-Esta bien... Lo haré

Agarré mi celular y busque su contacto, no estaba preparada para escuchar su suave voz. Enserio que no me resistiría.
Respire hondo y apreté el botón de llamar sin pensarlo.

Bip, bip...

-¿Hola?... ¿Dani, eres tú?.- su voz sonaba tan bien, cómo si estuviera en frente mío.
-Hola Hae...
-¿Sucedió algo?
-No, en realidad... solo quería saber cómo estabas, hace mucho que no hablamos sobre nosotras
-Creo que estoy bien... No lo sé. Y tienes razon, siempre mandaba mensajes sobre nuestros padres... Lo siento Dani
-Nono, no lo sientas. Está bien, entiendo que quisieras decirme sobre nuestros padres, yo hubiera hecho lo mismo
-Si, por eso te contacte en el momento... ¿Tú cómo estás?
-Bien... Un poco cansada por la universidad pero bien
-¿Tienes planeado venir a visitarnos?
-Si... Pero no creo que sea el momento, iré si las cosas están bien
-Lo entiendo... Yo, necesito decirte algo Dani
-Soy toda oídos
-Mi madre y Andrew se divorciaron... Ahora estamos viviendo en un departamento, cerca de tu casa... Yo no quería dejar de ver a tu padre y mucho menos a tí...
-¿Hace cuánto paso esto?
-Dos días...
-¿Y sabes si mi padre está bien?
-Hable con el y dice que está bien, con el tiempo se sentira mejor
-¿Y tú madre?
-Esta bien, dijo que tú padre era un buen esposo pero ella no estaba preparada para estar casada. Lamentaba adelantarse de esa manera
-Espero que con el tiempo estén mejor. ¿Terminaron bien?
-Si, dijeron que serían amigos
-Me alegra escuchar eso
-Lo sé...
Nos quedamos en silencio un rato hasta que Haerin hablo con voz ronca, cómo si estuviera llorando.
-Dani, me tengo que ir. Espero que sigas bien y que saques buenas notas en los exámenes. Te deseo lo mejor...
-Yo tambien espero que estés bien Hae. Te llamaré más seguido
-Esta bien...
-Antes de que cortemos... Hae, te extraño demasiado y quiero que sepas que todavía el amor que siento por ti sigue igual...
-Yo igual Dani, me sigues gustando desde el momento que te ví... Te extraño tanto...
Sentí como Haerin comenzó a llorar y yo comencé a hacer lo mismo.

No pudimos despedirnos ya que corte la llamada. No podía escucharla llorar, me destrozaba por dentro y sentía culpa de no estar allí, secando sus lágrimas.

La distancia poco a poco nos quemaba. Nos dolía de tal forma que no podíamos saber de la otra.

Taylor me consoló hasta que mi corazón dejo de sentirse vacío.
Era porque los pensamientos habían llegado. Y todos eran de ir a Corea, a ver a Haerin.
Volver a abrazarla, tocarla y besarla. Sentir sus dulces labios y su perfume.

La necesitaba y sabía que ella a mí, pero ¿iría a Corea para verla?