Apoyarse
Mary estaba aburrida estando sola en su casa, sus hijos estaban en el jardín y su esposa estaba en una reunión de su clan, apesar de ya no ser Momobami legalmente seguía llendo y ayudando a su hermana en lo que necesitará.
La rubia decidió hacer el almuerzo para sus cachorros y Omega, no era la mejor cocinera del mundo pero sabía que Ririka vendría cansada de esa reunión y no quería matar a su amada esposa para que cocinará.
Pensó en una buena receta fácil y rápida para no dejarla quemar, cuando se le ocurrió una entro a la cocina y busco lo que necesitaba.
Mary:"espero no quemar la cocina... Otra vez" -penso nerviosa.
Nunca había sido amante de cocinar cosas tan complicadas, lo único que sabía cocinar sin quemar la cocina en el proceso era Ramen, el platillo favorito de Ririka, curry, entre otros platillos muy fáciles. Pero se esforzaba al máximo por su familia.
Cuando encontró todo lo que necesitaba se alistó para poder cocinar y no quemar nada en el intento.
Los minutos pasaron y no conseguía realizar el platillo con éxito, la cocina después de esto necesitará una limpieza urgente, Mary estaba sucia y cansada.
Ririka: ya llegué -dijo tranquila.
Mary al oír la voz de su esposa se puso nerviosa, no quería que Ririka la viera en esas condiciones. La albina entro a la cocina y lo primero que vio fue a su esposa.
Ririka: Mary ¿Estas bien? -pregunto preocupada.
Mary: s-si solo... Quería preparar la cena para ti y los niños -murmurró nerviosa.
Ririka sonrió de manera suave y beso los labios de Mary, cuando se separaron la omega tomo otro delantal.
Mary:¿Que haces Riri? -pregunto confundida.
Ririka: te ayudaré -dijo con una sonrisa.
Mary: p-pero no es necesario, puedo hacerlo.
Ririka: quiero ayudarte -dijo tranquila.
Mary: debes estar cansada por la reunión que tuviste, es mejor que vayas a descansar mi vida.
Ririka se acercó a su esposa y me dio un beso en las mejillas.
Ririka: agradezco tu preocupación pero no fue una reunión difícil, sabes que Kirari no me da mucho trabajo -murmurró con una sonrisa.
Mary: pero aún así, me sentiría mal si me ayudas sin descansar primero -dijo cruzándose de brazos.
Ririka sabía lo dulce y terca que era Mary, se veía adorable cuando quería cuidarla como si su vida dependiera de ello.
Ririka: es lindo que te preocupes por mi amor, pero sabes que necesitas ayuda en la cocina y no lo veas como si te estuviera ayudando, míralo como un apoyo.
Mary pensó las palabras de su esposa bufó algo molesta pero acepto el apoyo de Ririka, mientras preparaban el almuerzo hablaron de diferentes cosas y disfrutaron su tiempo a solas.
Continuará
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