Destino forzado

Capítulo 14

Nick

Vi a mi abuelo cuidar de lo que consumía, comía solamente algo que preparaban en su presencia con cosas que ya había verificado estaban en perfecto estado. Siempre pensé que era remilgoso o un exagerado pero ahora lo comprendo.

Así como no descansaron hasta matarlo a él, ahora quieren hacerlo conmigo.

Son peligrosos, es lo único que tengo claro.

__ ¿De verdad crees que en este pueblo si esté? - Meredith se baja del auto que nos trajo en lo que debo arreglarmelas para que el dichoso vestido no se atore entre la sandalia y el suelo. Si esto continúa de este modo tendré que tomar clases de como se camina para no enredarse.

La tela se pega a los tobillos, es demasiado ligera para tener un peso que no la haga ondearse en casa paso, por lo cual decido agarrar la tela así me vea peor de lo que ya lo hago peleando solo, o sola.

__ Nick, deja eso. Te vas a cansar más deteniendo el vestido que caminando. - aconseja.

__ No debí hacerte caso. Tenía pantalones en la maleta, no entiendo porqué vestido - alego soltando la tela que vuelve a adherirse a los pies. - Son una molestia.

__ Deja de renegar y camina. - el dolor en las caderas no ayuda. Estoy de mal humor sin motivo, y me enoja más no saberlo

__ Espero que la señora esa aparezca pronto y sepa cómo arreglarnos. Porque de otro modo se las verá con mi abogado. - miro alrededor, este lugar no es distinto del otro, solamente un poco más transitado

__ ¿Y de qué la acusarás, genio? - el que me lleve la contraria me pone peor - ¿De meter tu alma en mi cuerpo? ¿Cuantos piensas que creerán eso? Nadie. Ninguno lo hará. - lo que dice es verdad pero no demuestro que le doy la razón. Mi orgullo no da para eso. - Comportate como una dama linda y tranquila como lo he sido toda la vida para continuar con la búsqueda.

Carajo. Quiero hacerle caso. Me prometí arreglar esto para que Meredith esté tranquila pero el recordar que pueden dañarla creyendo que soy yo, me desespera.

No tienen que ser así. No deben ponerle una mano encima o enviarle regalos sorpresas para hacerle daño.

Ella es inocente de la guerra familiar que empezó hace años conmigo. Ese es mi conflicto verdadero.

__ Sé que te frustra esto. - trata de ser amable. Justo lo que me pone peor y reitera lo que sucede - Me frustra también. Es complicado todo lo que debo hacer sin tener idea de como o ver a cada nada mi cuerpo de frente creyendo que pude volverme loca o morí.

Mi enojo no me deja ver que también está sufriendo esto.

__ Pero, demuestra que puedes con esto. - debería ser quién dé ánimos - Somos los dos, King. Confío en que puedes, me tienes a tu lado y creo en que sabrás arreglarlo si está en tus manos hacerlo porque créeme que si fuera por mí, te libro de todo esto.

No puede decir eso y pensar que algo no sucede.

__ Deja de verme así. Me pones más nerviosa - exclama con las mejillas rojas y repito que nunca creí que me vería de ese modo pero ella lo causa todo el tiempo. - Sigamos.

Toma la delantera viéndose un hombre mandón que exigiendo a una pequeña de metro y medio caminar más rápido. Siento que si esto sigue de este modo terminaré en la cárcel. Ya nos persiguió la policía una vez, no les costará nada hacerlo de nuevo si seguimos actuando de esta forma.

__ ¿Te pongo nerviosa? - juego. Detiene sus pasos.

__ Nickolas King. - advierte.

__ Eres una aburrida mujer. No eres capaz de sostener tu palabra, gruñona. - paso adelante. - Quien encuentre a doña Beatrice decide que métodos de tortura implementar para que nos regrese a nuestros cuerpos.